7 de agosto de 2016

Como nacen los cometas

El cometa de Rosetta

Un anĂ¡lisis detallado de los datos recopilados por Rosetta muestra que los cometas son restos antiguos procedentes de la formaciĂ³n primigenia del Sistema Solar y no fragmentos mĂ¡s recientes, resultantes de colisiones entre otros cuerpos de mayor tamaño.

Comprender cĂ³mo y cuĂ¡ndo se formaron objetos como el cometa 67P/Churyumov–Gerasimenko resulta fundamental para determinar con exactitud hasta quĂ© punto pueden emplearse para interpretar la formaciĂ³n y evoluciĂ³n temprana de nuestro Sistema Solar.

La revista Astronomy & Astrophysics acaba de publicar un nuevo estudio al respecto dirigido por Björn Davidsson, del Laboratorio de PropulsiĂ³n por ReacciĂ³n del Instituto de TecnologĂ­a de Pasadena (Estados Unidos).

Si los cometas realmente son tan primitivos, podrían contribuir a desvelar las propiedades de la nebulosa solar a partir de la cual se condensaron el Sol, los planetas y otros cuerpos menores hace 4.600 millones de años, así como los procesos que transformaron nuestro sistema planetario hasta convertirse en lo que conocemos hoy en día.

La hipĂ³tesis alternativa establece que se trata de fragmentos mĂ¡s recientes, resultantes de la colisiĂ³n entre cuerpos anteriores, como objetos transneptunianos (TNO), por ejemplo. AsĂ­, ofrecerĂ­an informaciĂ³n del interior de estos cuerpos de mayor tamaño, las colisiones que los fragmentaron y el proceso de formaciĂ³n de nuevos cuerpos a partir de los restos de otros mĂ¡s antiguos.

“En cualquier caso, los cometas son testigos de importantes

acontecimientos evolutivos en el Sistema Solar; por eso hemos realizado con Rosetta estas mediciones y las de otros cometas, para averiguar quĂ© escenario es mĂ¡s probable”, aclara Matt Taylor, cientĂ­fico del proyecto Rosetta de la ESA.

Los dos años junto a 67P/Churyumov–Gerasimenko han permitido a Rosetta mostrarnos un cuerpo bilobulado, muy poroso y de baja densidad con numerosas capas, lo que sugiere que ambos lĂ³bulos fueron acumulando materia antes de fusionarse.

El perfil de un cometa primigenio

La porosidad excepcionalmente alta del interior del nĂºcleo nos da la primera pista de que no pudo formarse mediante colisiones violentas, ya que estas habrĂ­an compactado un material tan frĂ¡gil. Las estructuras y formaciones de distinto tamaño que han captado las cĂ¡maras de Rosetta ofrecen mĂ¡s datos de cĂ³mo podrĂ­a haberse desarrollado su evoluciĂ³n.

Un trabajo anterior mostraba que la cabeza y el cuerpo del cometa en principio estaban separados, pero que la colisiĂ³n que provocĂ³ su uniĂ³n fue de una velocidad tan baja que no llegĂ³ a destruirlos. El hecho de que ambos lĂ³bulos presenten capas similares tambiĂ©n indica que han debido de experimentar evoluciones similares y que la tasa de supervivencia a colisiones catastrĂ³ficas debiĂ³ de ser alta durante un largo periodo de tiempo.

Es posible que tambiĂ©n se produjeran otras uniones a menor escala. Por ejemplo, en la regiĂ³n de Bastet, en el lĂ³bulo inferior del cometa, existen tres ‘casquetes’ esfĂ©ricos, y se cree que se trata de restos de cometesimales conservados en parte.

Fuentes: ESA

No hay comentarios:

Publicar un comentario