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30 de julio de 2017

Descubren Tres Poblaciones Diferentes de Estrellas Bebé en el Cúmulo de la Nebulosa de Orión

La nebulosa y el cúmulo de Orión vistas por el VLT Survey Telescope. Image Credit: ESO/G. Beccari

Gracias a nuevas observaciones del telescopio de rastreo del VLT de ESO, un equipo de astrónomos ha descubierto tres poblaciones diferentes de estrellas bebé dentro del Cúmulo de la Nebulosa de Orión. Este descubrimiento inesperado aporta nueva y valiosa información, útil para comprender cómo se forman este tipo de cúmulos. Los datos sugieren que la formación de las estrellas podría darse en forma de brotes, donde cada brote se produciría en una escala de tiempo mucho más rápida de lo que se pensaba.

OmegaCAM, - la cámara óptica de amplio campo del VST (VLT Survey Telescope)- ha captado con gran detalle la espectacular nebulosa de Orión y su cúmulo asociado de estrellas jóvenes, dado lugar a esta nueva y hermosa imagen. Este objeto es uno de los viveros más cercanos de estrellas de baja y alta masa, y se encuentra a una distancia de unos 1.350 años luz.

Pero es más que una imagen bonita. Un equipo liderado por Giacomo Beccari, astrónomo de ESO, ha utilizado estos datos de calidad inigualable para medir con precisión el brillo y los colores de todas las estrellas del cúmulo de la nebulosa de Orión. Estas mediciones han permitido a los astrónomos determinar la masa y las edades de las estrellas. Para su sorpresa, los datos han revelado tres secuencias diferentes de edades potencialmente diferentes.

"Al ver los datos por primera nos llevamos una gran sorpresa, fue uno de esos momentos '¡Wow!' que suceden sólo una o dos veces en la vida de un astrónomo", afirma Beccari, autor principal del artículo científico que presenta los resultados. "La increíble calidad de las imágenes de OmegaCAM reveló sin ninguna duda que estábamos viendo tres poblaciones distintas de estrellas en las partes centrales de Orión".

Monika Petr-Gotzens, coautora y también astrónoma de ESO en Garching, continúa, "Es muy significativo. Lo que estamos presenciando es que las estrellas de un cúmulo en el comienzo de sus vidas no se formaron todas juntas al mismo tiempo. Esto puede implicar que debamos cambiar las ideas que teníamos hasta ahora sobre cómo se forman las estrellas en los cúmulos".

Los astrónomos estudiaron cuidadosamente la posibilidad de que en lugar de indicar diferentes edades, los diferentes brillos y colores de algunas de las estrellas fueran debidos a estrellas compañeras ocultas, lo cual haría que las estrellas se vieran más brillantes y rojas de lo que realmente son. Pero esta idea implicaría propiedades muy inusuales de las parejas de estrellas, propiedades nunca antes observadas. Otras mediciones de las estrellas, como su velocidad de rotación y sus espectros, también indican que deben tener diferentes edades.

"Aunque aún no podemos refutar formalmente la posibilidad de que estas estrellas sean binarias, parece mucho más natural aceptar que lo que vemos son tres generaciones de estrellas que se forman sucesivamente en un plazo de menos de 3 millones años", concluye Beccari.

Los nuevos resultados sugieren firmemente que la formación de estrellas en el cúmulo de la nebulosa de Orión está teniendo lugar en brotes y más rápidamente de lo que se pensaba anteriormente.

15 de enero de 2017

Los Secretos Ocultos de las Nubes de Orión



La nube molecular Orión A observada por VISTA. Image Credit: ESO/VISION survey

Esta espectacular nueva imagen es uno de los mosaicos más grandes en alta resolución en infrarrojo cercano de la nube molecular de Orión A, la fábrica de estrellas masivas conocida más cercana, a unos 1.350 años luz de la Tierra. Fue tomada con el telescopio de rastreo infrarrojo VISTA, instalado en el Observatorio Paranal de ESO, en el norte de Chile, y revela la presencia de numerosas estrellas jóvenes y de otros objetos que, de otra manera, permanecerían ocultos en las profundidades de las nubes de polvo.

La nueva imagen del sondeo VISION (VIenna Survey In Orion) es un montaje de imágenes tomadas en la parte del infrarrojo cercano del espectro por el telescopio de rastreo VISTA en el Observatorio Paranal de ESO, en Chile. Cubre la totalidad de la nube molecular de Orión A, una de las dos nubes moleculares gigantes del Complejo Molecular de la nube de Orión (OMC, Orion Molecular Complex). Orión A se extiende aproximadamente ocho grados hacia el sur en la familiar zona de Orión conocida como la espada.

VISTA es el telescopio de sondeo más grande del mundo, cuenta con un gran campo de visión y está dotado con detectores infrarrojos muy sensibles, características que lo hacen ideal para la obtención de imágenes en infrarrojo profundas y de alta calidad, requeridas por este ambicioso estudio.

El sondeo VISION ha dado lugar a un catálogo que contiene casi 800.000 estrellas individuales identificadas, objetos estelares jóvenes y galaxias lejanas, lo que representa la información más profunda y la mayor cobertura alcanzadas hasta ahora por ningún estudio en esta región del cielo.

VISTA puede ver la luz que el ojo humano no puede, permitiendo a los astrónomos identificar muchos objetos escondidos en esta guardería estelar. Las estrellas muy jóvenes que no pueden verse en imágenes de luz visible se revelan cuando se observan a longitudes de onda infrarrojas, más largas, donde el polvo que las envuelve es más transparente.

La nueva imagen representa un paso hacia un conocimiento completo de los procesos de formación de estrellas en Orión A, tanto para estrellas de baja masa como para estrellas masivas. El objeto más espectacular es la gloriosa nebulosa de Orión, también llamada Messier 42, hacia la izquierda de la imagen. Esta región forma parte de la espada de la famosa y brillante constelación de Orión (el cazador). El catálogo de VISTA cubre tanto objetos conocidos como nuevos descubrimientos. Estos incluyen cinco nuevos candidatos a objeto estelar joven y diez candidatos a cúmulos de galaxias.

En otras partes de la imagen, podemos mirar en el interior de la nubes moleculares oscuras de Orión A y descubrir muchos tesoros ocultos, incluyendo discos de material que podrían dar origen a nuevas estrellas (discos pre-estelares), nebulosidades asociadas a estrellas recién nacidas (objetos Herbig-Haro), pequeños cúmulos de estrellas e incluso cúmulos de galaxias más allá de la Vía Láctea. El sondeo VISION permite estudiar de forma sistemática las fases evolutivas más tempranas de estrellas jóvenes en el interior de nubes moleculares cercanas.

Esta imagen de Orión A, con un nivel de detalle impresionante, establece una nueva base observacional para continuar los estudios sobre formación de estrellas y de cúmulos y pone de relieve, una vez más, las capacidades del telescopio VISTA para obtener imágenes de amplias áreas del cielo de forma rápida y profunda en la parte infrarroja del espectro.

14 de agosto de 2016

La gran nebulosa de Orión, captada en una imagen con gran detalle

En el centro de la nebulosa las estrellas pueden ser hasta 30 veces más masivas y 200.000 veces más luminosas que el Sol - VLT

Es la región de formación de estrellas masivas más cercana al Sistema Solar. Por eso, estas nuevas observaciones permiten entender mejor cómo nacen las estrellas
Investigadores han obtenido la primera imagen en alta resolución del borde de la nube molecular de Orión, la región de formación de estrellas masivas más cercana al Sistema Solar.

Los detalles de esta imagen, que permite estudiar la morfología y actividad que tiene lugar en la zona, se publican en la revista «Nature Letters», en un artículo que lidera el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Detalle de la nebulosa, captado por los observatorios ALMA y VLT- Weilbacher et al.

La nebulosa de Orión es la región de formación de estrellas masivas más cercana y los astrofísicos la observan para estudiar el proceso de nacimiento y evolución de las mismas, que, en el caso del cúmulo del Trapecio -en el centro de la nebulosa-, llegan a ser hasta 30 veces más masivas y 200.000 veces más luminosas que el Sol.


Liderados por Javier Goicoechea, del grupo de Astrofísica Molecular del Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid, los científicos consiguierondelimitar y estudiar con precisión la morfología y la actividad que ocurre en el borde iluminado de la nube (el interfaz donde sucede la transición entre el gas molecular frío y el gas atómico, ionizado y muy caliente), informa el CSIC.

Esto fue posible gracias a la combinación de imágenes del borde de la nube Orión obtenidas con el observatorio ALMA (Atacama Large Millimeter/Submillimeter Array) y utilizando observaciones previas del telescopio VLT (Very Large Telescope), ambos en Chile.

«Hasta ahora teníamos una visión muy estática de lo que ocurre con el gas molecular en esa zona de transición debido a la poca precisión de los instrumentos. Eso ha cambiado radicalmente con ALMA», subraya Goicoechea.

Los datos obtenidos, añade, permiten lograr imágenes «con una sensibilidad exquisita» y con gran precisión; «prácticamente estamos fotografiando 'la piel' de Orión».

Filamentos en la nebulosa
«Las imágenes proporcionadas por ALMA revelan que el borde de la nube molecular está formado por pequeñas estructuras filamentarias yrugosidades con patrones periódicos», detalla el investigador.

Además de ser uno de los componentes «más fascinantes» de la galaxia, las «nubes moleculares» son el reservorio de material para formar nuevas estrellas.

Una de las preguntas que se hacen los investigadores es si estos grumos y filamentos densos observados podrían ser las «semillas» para la formación de una nueva generación de estrellas.

En este caso, la masa de los grumos detectados con ALMA en Orión es todavía muy pequeña comparada con la que se necesitaría para que la gravedad impulse su colapso y dé lugar a protoestrellas.

Para responder a si estos grumos pueden unirse en el futuro y dar lugar a condensaciones más masivas se necesitan más observaciones y modelos, lo que ayudará a entender si estos mecanismos que ocurren en «la piel» de Orión podrían ser un inductor de formación estelar, según Goicoechea.

Fuentes: ABC