9 de enero de 2013

A LA DISTANCIA DE MERCURIO. Un 17% de estrellas como el Sol tienen cerca planetas similares a la Tierra

Foto: UDG






Un 17 por ciento de todas las estrellas similares al Sol tiene planetas entre una a dos veces el diámetro de la Tierra orbitando cerca de sus estrellas madre, según concluye un equipo de astrónomos de las universidades estadounidenses deCalifornia, en Berkeley, y de Hawai, en Manoa, a raíz de los resultados de los tres primeros años de datos de la misión Kepler de la NASA, que ya ha descubierto miles de potenciales exoplanetas.

"Nuestro principal resultado es que la frecuencia de planetas aumenta a medida que se avanza a tamaños más pequeños, pero no aumenta hasta llegar a planetas del tamaño de la Tierra, sino que se mantiene a un nivel constante por debajo de dos veces el diámetro de la Tierra", explica Andrew Howard, miembro del Instituto de Astronomía de la Universidad de Hawai.

Los planetas de entre una y dos veces el diámetro de la Tierra podrían ser rocosos y si se encuentran dentro de la zona Ricitos de Oro, no demasiado caliente ni demasiado fría, justo para el agua líquida, podrían sustentar vida, explican los investigadores, que presentaron sus resultados este martes en una sesión de la misión Kepler durante la reunión de la Sociedad Astronómica Americana en Long Beach, California (Estados Unidos).

"Uno de los objetivos de Kepler objetivo es responder a una pregunta que la gente ha estado pidiendo desde los tiempos de Aristóteles: ¿qué fracción de las estrellas como el Sol tienen un planeta parecido a la Tierra --destaca Howard--. No estamos allí todavía, pero Kepler ha encontrado suficientes planetas que permiten hacer estimaciones estadísticas."

Las estimaciones se basan en una mejor comprensión del porcentaje de planetas de gran tamaño como la Tierra que Kepler se pierde por las incertidumbres en la detección, que el equipo estima que se trata de aproximadamente uno de cada cuatro (25 por ciento).

Para encontrar los planetas, el telescopio Kepler capta imágenes repetidas de 150.000 estrellas en una región del cielo en la constelación del Cisne. Los datos son analizados por los programas informáticos, "pipeline", en busca de las estrellas que brevemente, que pasan por delante de un planeta, llamado tránsito.

Para planetas tan grandes como Júpiter, la estrella puede reducir la intensidad de un 1 por ciento, que es fácilmente detectable, pero en el caso de un planeta tan pequeño como la Tierra, sin embargo, se atenúa por una parte en 10.000, lo que es probable que se pierda, según estos expertos.



Fuentes : EUROPA PRESS

Un gran cinturón de asteroides envuelve a la estrella Vega

Foto: NASA/JPL/CALTECH

Un equipo de astrónomos estadounidenses han descubierto un gran cinturón de asteroides alrededor de la estrella Vega, la segunda más brillante en el cielo nocturno del hemisferio norte. Este hallazgo, publicado en 'Astrophysical Journal', se suma al anteriormente descubierto alrededor de la estrella Fomalhaut.

Los científicos utilizaron datos del telescopio Spitzer de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA), así como del observatorio espacial Herschel para llevar a cabo este descubrimiento cuya información, según han explicado los expertos, es "consistente".

De este modo, la estrella Vega tiene dos cinturones, uno interior más cálido y otro exterior, más frío, y separado del primero por un espacio entre ellos. Esta arquitectura es similar a la que se da en el Sistema Solar con el Cinturón de Asteroides y el Cinturón de Kuiper.

Los astrónomos sospechan que la separación entre ambos cinturones se debe a la presencia de múltiples planetas. En el Sistema Solar, el Cinturón de Asteroides se mantiene gracias a la gravedad de los planetas interiores y de los exteriores. En cambio, el Cinturón de Kuiper es esculpido únicamente por la gravedad de los planetas exteriores gigantes.

"Este hallazgo demuestra una vez más lo comunes que son los sistemas planetarios más allá del Sistema Solar", ha señalado la autora principal del trabajo, Kate Su.

La científica ha indicado que Vega y Fomalhaut son similares también en otros aspectos. Ambas poseen aproximadamente el doble de la masa del Sol, son más calientes y más azules. Además se encuentran relativamente cerca, a unos 25 años luz de distancia. Además, ha precisado que la edad de Vega se estima en 600 millones de años, y la de Fomalhaut, en 400 millones de años.

La NASA ha explicado que Herschel y Spitzer tienen la capacidad de detectar la luz infrarroja emitida por el polvo caliente situado alrededor de estas dos estrellas, lo que ha llevado al descubrimientos de estos cinturones de asteroides. Los cinturones interiores no se pueden ver en la luz visible porque la brillante luz de sus estrellas los eclipsan.

Tanto los cinturones interiores como exteriores de Vega y Fomalhaut contiene mucho más material que los del Sistema Solar. Los expertos han explicado que esto se debe a que estos sistemas estelares son mucho más jóvenes, por lo que aún no ha habido tiempo suficiente para eliminar escombros mediante los vientos estelares. Del mismo modo, influye que estas estrellas nacieron de una nube de gas y polvo mucho más masiva que la que dio vida al Sistema Solar.


Fuentes : EUROPA PRESS

Marte tiene cavernas que captaron enormes flujos de agua hace 2.000 millones de años


-Las cavernas se formaron por erupciones volcánicas de barro.
-El estudio se ha desarrollado en la Universidad Autónoma de Barcelona.

Una investigación internacional ha descubierto un vasto sistema de cavernas subterráneas que captó ingentes flujos de agua hace dos mil millones de años en Marte, según un estudio geomórfico en el que han participado investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).

La investigación ha permitido descubrir que el agua de las inundaciones, relacionadas con el origen de los océanos en Marte, se filtró en el subsuelo a través de estascavernas que se habían formado por erupciones volcánicas de barro.

Los científicos desconocían qué ocurría en la parte final de los canales de 250 kilómetros situados en la cuenca de Impacto de Utopía, ya que en su parte final "desaparecían bruscamente", lo que ahora la nueva investigación ha relacionado con las cavernas.

Los investigadores han planteado la hipótesis de que la red de fracturas y de conductos abiertos, creados a partir del vulcanismo, "crearon un sistema de cavidades en la crioesfera que actuó como trampa".

Por el momento, desconocen la edad y las dimensiones de las cavernas, pero creen que este sistema de cuevas hubiera sido "inestable" en la Tierra, si bien en el plantea rojo adquirieron la solidez y resistencia similar a las cuevas terrestres, a causa de la temperatura de la zona de -65 grados.

El hallazgo ha sido posible gracias a una nueva tecnología que permite obtener imágenes de alta resolución captadas desde el satélite Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) y a estudios geomorfológicos más detallados.

En el estudio, financiado por la NASA y publicado en 'Geophysical Research Letters', han colaborado los geólogos de la UAB Mario Zarroca y Rogelio Linares, además de investigadores del Astrogeology Science Center, U.S. Geological Survey y Space Science Astrobiology Division, entre otros, ha informado este martes la UAB en un comunicado.

Fuentes : EUROPA PRESS

En busca de la vida bajo el hielo


Rumbo al polo Sur, donde un equipo británico busca bajo el hielo rastros de vida posible, para comprender mejor la evolución de los organismos vivos tanto en la Tierra como en medios de vida extremos.

Desde hace un año, este equipo de científicos se ha instalado en uno de los lugares más aislados y hostiles de nuestro planeta, el oeste de la Antártida.

Este equipo de glaciólogos investigan el Lago Ellsworth. Una extraña extensión de agua que se encuentra bajo el hielo desde hace 125 000 años.

Los exploradores van a tratar de sondar el lago. Pero es un trabajo difícil porque se encuentra bajo una gruesa capa de 3 kilómetros y medio de hielo.

Por un agujero de 36 centímetros de diámetro, van a bombear 90.000 litros de agua y harán pasar una sonda para recoger muestras y sedimentos del fondo del lago.

“Lo que vamos a encontrar en este lago será muy interesante, asegura Chris Hill, coordinador del equipo. Podremos encontrar rastros de vida microbiana y será apasionante tratar de saber como los microbios han podido sobrevivir en un medio tan extremo.”

El análisis de las muestras permitirá también a los científicos evaluar la estabilidad del casquete glaciar, además de proseguir su estudio del deshielo y el aumento del nivel del mar.

Los científicos deberán hacer este trabajo muy rápidamente pues una vez perforado el hueco para la sonda, solo dispondrán de 24 horas para coger muestras antes de que el hielo vuelva a cerrar el acceso.

Esta experiencia extrema servirá para saber si la vida puede soportar temperaturas muy bajas, pocos elementos nutritivos y una oscuridad completa bajo una intensa presión.


Fuente : euronews

5 de enero de 2013

El extraño caso del agujero negro de Andrómeda

La galaxia de Andrómeda. Imagen: Wikipedia

Una investigación internacional revela que un agujero negro de la galaxia de Andrómeda emite, en ocasiones, más luminosidad de la esperada para su masa. El hallazgo, publicado en la revista Nature, le confiere características de una fuente de rayos X ultraluminosa.


Uno de los numerosos agujeros negros presentes en la vecina galaxia de Andrómeda ha puesto patas arriba los modelos de emisión de rayos X al descubrirse que la luminosidad que emite puede llegar a superar aquella que le correspondería en función de su masa.

Una investigación, en la que ha participado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha establecido la masa de este objeto en unas diez veces la del Sol.

No obstante, algunos sus registros de luminosidad exceden los límites establecidos por la física. El hallazgo ha sido publicado hoy en la revista Nature.

Una serie de fórmulas matemáticas establece cuál debe ser la luminosidad máxima de un objeto cósmico en función de su masa –conocida como la luminosidad de Eddington–.

Por encima de este límite, por ejemplo, una estrella normal se descompondría. Para un agujero negro de masa una decena de veces superior a la del Sol, esta cifra es de 1x1032 vatios, un millón de veces mayor que la luminosidad del Sol.

Fuentes de rayos X ultraluminosas

Algunas fuentes cósmicas de rayos X alejadas de los centros de las galaxias brillan con luminosidades que superan esta cifra, y por ello se denominan fuentes de rayos X ultraluminosas –ULX por sus siglas en inglés–.

Tienen masas mayores que las de los agujeros negros normales pero menores que las de los agujeros negros supermasivos localizados en los centros de las galaxias.

La experta del Instituto de Ciencias del Espacio –centro del CSIC asociado al Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña– Margarita Hernanz, que ha colaborado en la investigación, explica: “Dentro de las ULX, el nivel de luminosidad de este agujero negro es de los menos intensos, de hecho, sólo supera el límite de 1x1032 vatios en algunas ocasiones”.


Los resultados obtenidos abren una nueva ventana de comprensión de los agujeros negros y su evolución en el Universo
Este fenómeno se debe a la propia configuración del agujero negro, que pertenece a un sistema binario en el que él y su estrella acompañante orbitan mutuamente entre sí a gran velocidad. Durante este baile cósmico, parte de la materia de la estrella es atraída y absorbida por el agujero. Antes de ser engullida, esta materia crea un disco de acrecimiento alrededor del agujero negro y emite intensamente en rayos X.

Es en este momento cuando puede medirse la luminosidad del objeto y su masa, ya que, como comenta la investigadora del CSIC, “un agujero negro que no interactúa con ningún otro objeto no puede ser observado porque no emite luz”.

La luminosidad depende de la masa

La luminosidad de este fenómeno depende de la masa del agujero negro, ya que cuanto más masivo sea, más potente será su campo gravitatorio y más materia será capaz de absorber, lo que le conferirá una mayor luminosidad.

No obstante, resulta lógico pensar que estos parámetros no son estables, si no que varían con el tiempo y, a menor escala del agujero más rápida será la variación de los parámetros. Según Hernanz, “el objeto que comenzó siendo un ULX ha demostrado ser un microcuásar, un sistema binario que alberga un agujero negro de masa pequeña. Las observaciones en radio de los chorros relativistas de materia expulsada por los polos del agujero negro en rotación han ayudado a determinar su masa”.

Los resultados obtenidos por esta investigación abren una nueva ventana de comprensión de los agujeros negros y su evolución en el Universo. Para la investigadora, “comprender el comportamiento de los agujeros negros supone un gran reto, no obstante, las microescalas en las que se presentan los microcuásares hacen que su evolución sea mucho más rápida y les convierten en escenarios perfectos para entender la evolución de los cuásares –los mega agujeros negros ubicados en el centro de las galaxias– para comprender cómo se ha distribuido la masa y la energía en el Universo primitivo y cómo se han formado las galaxias que vemos hoy en día”.



Fuente: CSIC

Las grandes galaxias se formaron a partir de la fusión de otras más pequeñas

Según los astrofísicos, hay una gran diferencia entre la composición química del universo primigenio y la del actual. Imagen: IAA-CSIC.

Un estudio, liderado por el Instituto de Astrofísica de Andalucía, ha analizado veinte mil galaxias comprendidas en el muestreo zCOSMOS, realizado a partir de datos obtenidos con uno de los telescopios VLT del Observatorio Europeo Austral, en Chile. El trabajo indica que las galaxias más distantes, y, por tanto, más jóvenes, tienen menor proporción de elementos pesados que las del universo local, confirmando así el modelo que asegura que las grandes galaxias se formaron a partir de la fusión de otras más pequeñas.

Una reciente investigación llevada a cabo por Enrique Pérez Montero, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y su equipo, indica que las galaxias más distantes, y, por tanto, más jóvenes, tienen menor proporción de elementos pesados que las del universo local, lo que, según los científicos, confirmaría el modelo que afirma que las grandes galaxias se formaron a partir de la fusión de otras más pequeñas.

Según el estudio, fueron las estrellas las que, a través de las reacciones nucleares que se producen en su centro, operaron el cambio y aumentaron la proporción de metales (en astrofísica, los elementos más pesados que el hidrógeno y el helio). "Es como una fábrica, un enorme horno en el que el hidrógeno da lugar a elementos más pesados, que se liberan al medio a través de vientos y de expulsión de material en las explosiones de supernova", apunta Pérez Montero.

Evolución química

La evolución química de las galaxias se estudia a través de lo que se conoce como "relación masa metalicidad", que analiza la proporción de elementos pesados que contiene una galaxia con respecto a la masa total de estrellas que presenta. Dicha relación está bien establecida en el universo local: se sabe que las galaxias enanas son menos metálicas que las masivas. "La cuestión era analizar si esa relación ha sido igual a lo largo de todas las etapas cosmológicas o ha ido sufriendo una evolución. Empezaron a hacer mediciones y se observó que las galaxias en épocas jóvenes del universo tendían a tener menos contenido en metales", señala el investigador.

Sin embargo, en 2010 un estudio desmintió estos resultados aludiendo a un sesgo selectivo relacionado con la tasa de formación estelar de las galaxias, o la cantidad de estrellas por unidad de tiempo que son capaces de formar. Una alta tasa de formación estelar suele ir acompañada de una metalicidad menor, ya que en muchas galaxias la formación estelar se dispara debido a la captura de gas poco procesado, lo que reduce la proporción total de elementos complejos.

La formación estelar se dispara debido a la captura de gas poco procesado

Dado que, precisamente, las galaxias con brotes de formación estelar son las más brillantes y, por lo tanto, más fácilmente detectables a grandes distancias, los investigadores concluyeron que el contenido en metales ha permanecido constante a lo largo de la historia cosmológica y que lo que se había interpretado como evolución era un efecto de selección.

Pero el artículo de Pérez Montero y colaboradores desmiente esa deducción. Por un lado, calcula y corrige la tasa de formación estelar para evitar sesgos; y, por otro, en lugar de ceñirse solo al contenido en oxígeno, que es el empleado habitualmente y que depende de la formación estelar, estudia el cociente entre nitrógeno y oxígeno -independiente de la tasa de formación estelar- para determinar la cantidad de metales en las veinte mil galaxias del muestreo zCOSMOS, uno de los más profundos y completos hasta la fecha, realizado con una valiosa colaboración internacional a partir de datos obtenidos con uno de los telescopios VLT del Observatorio Europeo Austral (ESO), situado en Chile.

Diez mil millones de años

"Con este muestreo medimos la metalicidad a lo largo de los últimos diez mil millones de años, algo antes nunca conseguido, y confirmamos que cuando el universo era más joven la relación masa metalicidad era más plana: es decir, las grandes y las pequeñas tenían una proporción de metales similar, al contrario de lo que ocurre en el universo local", señala Pérez Montero.

La evolución de la relación masa metalicidad constituye una evidencia del modelo jerárquico de formación de galaxias, que sostiene que en el universo primitivo las galaxias grandes se formaban como fusión de galaxias pequeñas. La fusión de dos galaxias pequeñas con metalicidad baja origina una galaxia con el doble de masa estelar pero con la metalicidad de las pequeñas; aunque la fusión dispara la tasa de formación estelar, debe transcurrir tiempo hasta que las estrellas generen metales, los liberen y doten a la galaxia de la metalicidad que le corresponde para su masa.

"El hecho de que la relación masa metalicidad sea más plana en el universo más joven indica que las fusiones eran más frecuentes en el universo primigenio y eso confirma el modelo jerárquico. Si las galaxias se hubieran formado de forma aislada la relación masa metalicidad sería la misma en cualquier época que miraras", concluye el investigador.


Fuente: Instituto de Astrofísica de Andalucía

Las estrellas más primitivas del universo eran muy masivas y pobres en metales

Esta galaxia enana irregular es “una Isla del Tesoro para los estudiosos de las estrellas masivas". Imagen: G. Pérez (SMM-IAC) y M. García (IAC).



Las primeras estrellas que se formaron tras el Big Bang y la Edad Oscura eran muy masivas y tuvieron un gran protagonismo durante la reionización –la segunda mayor fase de cambio de hidrógeno en el universo–. Nuevas observaciones del Instituto de Astrofísica de Canarias nos acercan a esas estrellas del universo primitivo que se hallan en la galaxia C 1613, la más cercana a la Tierra.




La principal diferencia entre las primeras estrellas y las que se observan actualmente es que las primeras se formaron solo a partir de hidrógeno y helio, sin metales. Así, esas estrellas masivas, que eran pobres en metales, son fundamentales para comprender las primeras etapas del universo.

Gracias a observaciones realizadas con el espectrógrafo OSIRIS en el Gran Telescopio de Canarias (GTC), Miriam García y Artemio Herrera, científicos del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), han duplicado el número de estrellas-O –la fase joven de las estrellas más masivas– conocidas en esta galaxia.

Hasta la fecha solo se conocían seis estrellas-O censadas en la galaxia enana IC1613, y otra estrella estudiada por Herrero y sus colaboradores en el 2012. Ahora se han descubierto ocho nuevas estrellas de tipo-O, lo que aumenta el número de estrellas conocidas en esta galaxia.

Asimismo, los investigadores han establecido la escala de temperaturas para las estrellas masivas en IC1613, en unas condiciones de ‘metalicidad’ más próximas que nunca a las del universo primitivo.

Con un 30% menos de metales, la escala de temperatura de IC1613 –la galaxia más cercana a la Tierra, se encuentra a unos 2,3 millones de años luz de esta– es unos 1000 Kelvin (727 ºC) más caliente que la de las estrellas de la Pequeña Nube de Magallanes, la tercera galaxia más próxima a la Vía Láctea.

A partir de este hallazgo, las estrellas de IC1613 constituyen el siguiente paso para estudiar cómo funcionaban las primeras estrellas del Universo. Para los autores, este resultado constituye una herramienta muy potente para estimar el flujo ionizante de poblaciones estelares jóvenes no resueltas, como las que se observan al penetrar cada vez más lejos en el Cosmos.

Sobre las estrellas masivas

Las estrellas masivas calientan, ionizan y hacen brillar el medio que las rodea a través de la radiación que emiten, que depende de su temperatura. Cuanto mayor es esta, más capacidad tienen para hacer brillar el gas de su entorno.

“Este gas es el material que observamos cuando nos remontamos a las edades más tempranas del universo”, explican los autores.

En el universo primitivo, las estrellas estaban formadas por un contenido muy bajo en metales (en astrofísica, todos los elementos distintos del hidrógeno y el helio). Para entenderlo, es necesario estudiar objetos con una composición química similar.

En cuanto a su actividad, estas estrellas eran capaces de generar eventos muy energéticos –como explosiones de supernova y estallidos de rayos-gamma– que afectaban profundamente a su entorno.


Fuente: IAC

Encalla una plataforma petrolera con más de 500.000 litros de combustible en Alaska

Describen el primer meteorito procedente de la corteza de Marte

Meteorito (NWA) 7034. (Imagen: NASA)



Un equipo liderado desde la Universidad de Nuevo México (EEUU) acaba de presentar en Science una nueva clase de meteorito marciano que, muy probablemente, se formó en la propia corteza del planeta rojo. Se parece mucho a las rocas analizadas por los rovers de la NASA in situ.

El meteorito, bautizado con el nombre de (Northwest Africa o NWA) 7034, se encontró en Marruecos en 2011. Presenta algunas similitudes con los otros 110 meteoritos marcianos conocidos como SNC, por sus tres miembros (Shergotty, Nakhla y Chassign), pero en realidad es bastante distinto. De hecho es el único del que se puede determinar de forma bastante fiable su punto de origen en el planeta rojo.

Andrew Steele, uno de los autores, explica que la textura de NWA “no se parece a la de ninguno de los meteoritos SNC. Se compone de fragmentos cementados de basalto –se forman con lava enfriada rápidamente–, una composición común en las muestras lunares, pero no en los meteoritos marcianos. Esto sugiere su posible procedencia de la corteza”.

“La roca basáltica en este meteorito es consistente con la corteza o el manto superior de Marte”, puntualiza el autor principal, Carl B. Agee, “en base a los datos recogidos por los últimos vehículos de exploración y orbitadores de Marte”.

“Además, nuestro análisis de isótopos de oxígeno muestra que NWA 7034 no es como las otras muestras planetarias –prosigue–. La química es consistente con un origen superficial y una interacción con la atmósfera marciana. La abundancia de agua, unas 6000 partes por millón, sugiere que interactuó con la superficie de Marte hace alrededor de 2100 millones de años”. Esta datación implica que pertenece a la denominada era marciana Amazónica, la más reciente.

El meteorito contiene alrededor de diez veces más agua que cualquiera de los demás. Este agua podría haberse originado en una fuente volcánica o en un manto acuífero próximo a la superficie, lo que refleja que la actividad en la superficie acuosa en Marte pudo continuar bien entrada la era Amazónica temprana.

"Tal vez lo más interesante, es que el alto contenido de agua puede significar que hay una interacción de las rocas con el agua superficial, ya sea a partir del magma volcánico, o de fluidos de cometas que hayan podido impactar durante ese tiempo", plantea Steele, que concluye: "Es el meteorito marciano más rico desde un punto de vista geoquímico y sus futuros análisis nos darán más sorpresas". 


Fuente: SINC

¿El agujero negro de mayor masa del universo?

La galaxia NGC 1277, en cuyo centro está el colosal agujero negro. Trampa gravitacional invisible:. El centro de la galaxia NGC 1277 disco contiene un agujero negro con 17 mil millones de masas solares - uno de los más pesados ​​que se ha encontrado
 Foto: NASA / ESA / Andrew C. Fabian / Remco C. van den Bosch / MPIA)
Se ha descubierto un agujero negro que sacude los cimientos de muchos modelos actuales de evolución galáctica. Este monstruo tiene 17.000 millones de veces la masa del Sol, y es, por tanto, bastante más pesado de lo predicho por los modelos. Y aún más importante: el objeto podría ser el agujero negro más masivo conocido hasta la fecha.

Los astrónomos creen que hay un agujero negro supermasivo en el centro de cada galaxia. La masa de los agujeros negros de esa clase va desde varios cientos de miles de masas solares hasta unos pocos miles de millones. El agujero negro mejor investigado tiene alrededor de cuatro millones de masas solares y se encuentra en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea.

En los estudios sobre las masas de galaxias distantes y sus agujeros negros se ha comprobado una interesante correlación: Un agujero negro alcanza típicamente sólo una fracción muy concreta de la masa total de la galaxia. Aunque no se conoce muy bien el por qué de esta proporción, desempeña un papel importante en todos los modelos teóricos actuales sobre evolución de galaxias.

Ahora, durante una búsqueda sistemática que se inició en 2010, y en la que se ha trabajado con el telescopio Hobby-Eberly y las imágenes archivadas del telescopio espacial Hubble, el equipo dirigido por Remco van den Bosch, del Instituto Max Planck para la Astronomía en Alemania, ha localizado un agujero negro que incumple esta proporción.

Está en el centro de la galaxia NGC 1277, ubicada a 220 millones de años-luz, en la constelación de Perseo. NGC 1277 tiene tan sólo el 10 por ciento del tamaño y de la masa de nuestra Vía Láctea.

Colección de las galaxias:. El cúmulo de Perseo es Alrededor de 250 Millones de Años Luz de la Tierra La galaxia NGC 1277 miembro (flecha) aparece relatively Compacto.
© David W. Hogg, Michael Blanton y la Colaboración SDSS

Con el fin de determinar la masa del agujero negro, van den Bosch y sus colegas produjeron un modelo dinámico de la galaxia que incluye todas las órbitas estelares posibles. Comparaciones sistemáticas de los datos del modelo con los de las observaciones mostraron qué combinaciones de órbitas y valores de masa del agujero negro proporcionan la mejor explicación para las observaciones.

El resultado es que el agujero negro del centro de NGC 1277 debe tener alrededor de 17.000 millones de masas solares. Esto significa que el agujero podría ser el más masivo conocido. Se calcula que la masa del agujero negro que ahora ostenta el récord actual debe tener entre 6.000 y 37.000 millones de masas solares. Si el valor real está en el extremo inferior de este rango, el agujero de NGC 1277 superaría este récord.

Sin embargo, la mayor sorpresa para los astrónomos es que este agujero tan masivo esté en una galaxia bastante pequeña. A juzgar por el tamaño de ésta, el agujero negro debería ser mucho menos masivo, si tenemos en cuenta la citada proporción típica entre masa de una galaxia y masa de su agujero negro central.

Información adicional


Fuentes : http://www.mpg.de/6648360/black-hole-galaxy-models?filter_order=L

¿Fluyó agua líquida por Vesta en el pasado?

Esta imagen muestra ejemplos de largos y estrechos barrancos sinuosos, que los científicos de la misión Dawn de la NASA han encontrado en el asteroide Vesta gigante. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / UCLA / MPS / DLR / IDA

En un análisis preliminar de imágenes obtenidas en la misión Dawn de la NASA, unos científicos han descubierto intrigantes canales en cráteres del asteroide gigante Vesta.

El misterio es cuál es la causa de la formación de algunos de esos canales.

Los canales descubiertos por el equipo de Jennifer Scully, miembro del equipo de la Dawn en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), son esencialmente de dos clases.

Los de la primera clase encajan con lo que cabe esperar de flujos de material seco, por ejemplo arena, como los vistos en nuestra Luna. Pero los del segundo tipo, de trazado sinuoso, son un descubrimiento emocionante e inesperado para el que los científicos todavía no han hallado una explicación clara.

Los canales sinuosos son más largos, estrechos y curvos que los otros. Además, tienden a comenzar en regiones características y a combinarse con otros canales.

Todo apunta a que estos dos tipos de canales fueron creados por procesos distintos.



Canales largos y sinuosos en el cráter Cornelia de Vesta. El origen de estos canales es por ahora un misterio. (Foto: NASA JPL / Caltech / UCLA / MPS / DLR / IDA)








Buscando referencias en otros astros con las que ayudar a aclarar el misterio, surgen paralelismos fascinantes. "En la Tierra, el agua líquida ha esculpido rasgos similares, visibles en lugares como el Cráter del Meteoro en Arizona", subraya Christopher Russell, investigador principal de la misión Dawn, también de la UCLA. "En Marte, todavía se debate sobre qué los ha causado. Tendremos que analizar los canales de Vesta con mucho cuidado antes de poder especificar su origen de modo definitivo".

De hecho, los científicos han sugerido varias explicaciones para rasgos parecidos de Marte, desde que fueron descubiertas estructuras geológicas de aspecto reciente en imágenes de la Mars Global Surveyor, de la NASA, en 2000. Algunos de los mecanismos marcianos propuestos implican la acción de agua, otros la de dióxido de carbono, y otros no requieren ninguna de esas dos sustancias.

Se ha barajado la posibilidad de que Vesta albergase en el pasado depósitos subterráneos de hielo de agua que, ante el impacto de meteoritos, hubieran generado torrentes efímeros de agua.

Información adicional


Fuentes : http://www.jpl.nasa.gov/news/news.php?release=2012-389

Observan las corrientes de gas que permiten la formación de planetas gigantes

A la izquierda, las observaciones de ALMA, a la derecha, una impresión artística. (Foto: ALMA (ESO/NAOJ/NRAO)/M. Kornmesser (ESO), S. Casassus et al.)

Gracias al radiotelescopio ALMA, los astrónomos han podido captar por primera vez una etapa clave en el proceso de formación de los planetas gigantes. Se trata de grandes corrientes de gas que fluyen a través de un espacio del disco de material que se encuentra alrededor de una estrella joven. Ahora se han detectado por primera vez de forma directa estas corrientes, que se cree originan los planetas gigantes que toman el gas a medida que crecen.

El equipo internacional realizó un estudio de la joven estrella HD 142527, localizada a más de 450 años luz de la Tierra, la cual se encuentra rodeada por un disco de gas y polvo cósmico (los restos de la nube que dio origen a la estrella). Un espacio vacío divide el disco de polvo en dos partes, una interna y otra externa.

Se cree que esta división ha sido moldeada por planetas gaseosos gigantes, de reciente formación, que van despejando sus órbitas a medida que rodean a la estrella. El disco interior se extiende desde la estrella hasta el equivalente a la órbita de Saturno en el Sistema Solar, mientras que el disco externo comienza unas 14 veces más afuera. El disco exterior no rodea a la estrella de manera uniforme, más bien parece una herradura, lo que probablemente ha sido ocasionado por el efecto gravitacional de los planetas gigantes en órbita.

De acuerdo con la teoría, los planetas gigantes crecen al tomar el gas del disco exterior, en corrientes que forman puentes a lo largo de la división en el disco.

“Los astrónomos han estado anticipando que estas corrientes efectivamente existen, pero esta es la primera vez que hemos sido capaces de verlas directamente", dice Simon Casassus (Universidad de Chile, Chile), quien dirigió el nuevo estudio. “Gracias al nuevo telescopio ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), hemos sido capaces de obtener observaciones directas, que serán un aporte a las teorías actuales que intentan explicar cómo se forman los planetas”.


Casassus y su equipo utilizaron ALMA para observar el gas y el polvo cósmico alrededor de la estrella, obteniendo mayores detalles, y para alcanzar una perspectiva más cercana del astro, mucho más de lo que se había podido captar con telescopios anteriores. Las observaciones de ALMA, en longitudes de onda submilimétricas, no se ven afectadas por la luz de la estrella, que sí afecta a los telescopios infrarrojos o de luz visible.

El vacío de material en el disco de polvo ya se conocía, pero ellos también descubrieron restos de gas disperso en este espacio, además de dos corrientes de gas más densas que circulaban desde el disco exterior, a través del espacio divisorio, hacia el disco interior.

“Creemos que hay un planeta gigante oculto dentro, causando cada una de estas corrientes. Los planetas crecen a medida que capturan una parte del gas proveniente del disco exterior, pero ellos dejan escapar otra gran cantidad: el resto del gas lo rebasa y desemboca en el disco interior alrededor de la estrella”, dice Sebastián Pérez, un miembro del equipo, también de la Universidad de Chile.

Las observaciones dan respuesta a otra interrogante sobre el disco presente alrededor de la estrella HD 142527. Como la estrella central está todavía en formación, al tomar material del disco interno, este ya debería haber sido devorado, si no fuese capaz de mantener de algún modo su mismo estado. El equipo descubrió que la velocidad a la cual el gas sobrante fluye hacia el disco interno, es la velocidad adecuada para mantenerlo totalmente recargado, y para alimentar a la estrella en desarrollo.

Otro descubrimiento importante es la detección de gas disperso en el espacio del disco. "Los astrónomos han estado buscando este gas por mucho tiempo, pero hasta ahora sólo teníamos evidencia indirecta del mismo. Ahora, con ALMA, podemos verlo directamente", explica Gerrit van der Plas, otro miembro del equipo de la Universidad de Chile.

Este gas residual es una prueba más de que las corrientes son causadas por planetas gigantes, y no por objetos aún más grandes, como una estrella compañera. "Una segunda estrella habría eliminado cualquier elemento en este espacio, sin dejar ningún resíduo de gas. Al analizar la cantidad de gas residual, podemos determinar las masas de los objetos que lo toman", Añade Pérez.

¿Qué sucede con los planetas? Casassus explica que, a pesar de que el equipo no los pudo detectar de manera directa, él no se sorprende. “Hemos buscado estos planetas con instrumentos infrarrojos de última generación instalados en otros telescopios. Sin embargo, creemos que estos planetas en formación aún se encuentran inmersos en lo profundo de las corrientes de gas, que son prácticamente opacas. Por lo tanto, pueden haber pocas posibilidades de captarlos directamente”.

Sin embargo, los astrónomos desean saber más acerca de estos supuestos planetas, analizando tanto las corrientes de gas como el gas que aún queda disperso. El telescopio ALMA está todavía en construcción, y aún no ha alcanzado su máxima capacidad. Cuando esté completo, su visión será aún más aguda, y las nuevas observaciones de las corrientes podrían permitir que el equipo determine las propiedades de los planetas, incluyendo sus masas. 


Fuente: ESO

Voyager 1 - Nueva región en el Espacio Profundo

Explora la Voyager 1 'Highway Magnetic'

Esta imagen fija y un conjunto de animaciones muestran Voyager 1 de la NASA nave espacial explorar una nueva región en nuestro sistema solar llamada "carretera magnética". En esta región, las líneas magnéticas del sol de campo se conectan a las líneas del campo magnético interestelar, permitiendo que las partículas del interior de la heliosfera para comprimir distancia y las partículas procedentes del espacio interestelar para acercar la imagen Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech 

La nave espacial Voyager 1, de la NASA, ha entrado en una nueva región que los científicos creen que es la última zona por la que tiene que cruzar la sonda antes de alcanzar el espacio interestelar propiamente dicho.

Los científicos se refieren a esta nueva región como una autopista magnética para partículas cargadas, debido a que las líneas del campo magnético de nuestro Sol están conectadas con líneas del campo magnético interestelar. Esta conexión permite que partículas cargadas de menor energía originadas en el interior de nuestra heliosfera (la burbuja de partículas cargadas que expele nuestro Sol a su alrededor) se aceleren, y también posibilita que partículas de mayor energía provenientes del exterior entren dentro.

El equipo de Edward Stone, científico del proyecto Voyager en el Instituto Tecnológico de California en Pasadena, considera que éste es el último tramo del viaje antes de iniciarse de manera definitiva la etapa interestelar. Stone y sus colegas creen que la Voyager 1 entrará definitivamente en el espacio interestelar dentro de unos meses como muy pronto o dentro de un par de años como muy tarde.

Voyager en la heliopausa

Esta concepción artística muestra dos naves espaciales Voyager de la NASA explorando una región turbulenta del espacio conocida como la heliopausa, la capa exterior de la burbuja de partículas cargadas alrededor de nuestro sol. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech



Charged Particle poblaciones dentro y fuera de la Región Nuevo

Este gráfico muestra animados los saltos y caídas en dos poblaciones principales de partículas cargadas como los Voyager 1 de la NASA entrar y salir de una nueva región llamada la "autopista magnético". Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / GSFC

Viento Sur del Sol fluye hacia el norte

Esta concepción artística muestra cómo Voyager de la NASA nave espacial 1 está bañado por el viento solar en el hemisferio sur que fluye hacia el norte. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech







Plasma Flow Cerca Voyager 1

Esta concepción artística muestra flujos de plasma alrededor de la Voyager 1 de la NASA nave espacial cuando se aproxima el espacio interestelar. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / JHUAPL




Lugar de baja energía del instrumento de partículas cargadas

Este gráfico muestra el Voyager 1 de la NASA nave espacial y la ubicación de su instrumento de baja energía de partículas cargadas. A marcada primer plano del instrumento de partículas de baja energía cargada aparece como la imagen del recuadro. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / JHUAPL

Los datos cargados de partículas de baja energía del Voyager 1 Instrumento de partículas cargadas
Este gráfico de la misión Voyager de la NASA muestra las mediciones de las diferentes poblaciones de partículas cargadas de baja energía del Voyager 1 instrumento de partículas cargadas (LECP). Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / JHUAPL


Los campos magnéticos solares y Interestelar

Esta concepción artística muestra las diferentes direcciones esperadas de los campos magnéticos en el espacio interestelar (líneas negras) y el campo magnético que emana de nuestro Sol (líneas blancas). Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech



Los cambios magnéticos y acusado de partículas en la Región Nuevo Sistema Solar
Este gráfico, a partir de los datos obtenidos por la nave Voyager 1 de la NASA nave espacial, el seguimiento del comportamiento del campo magnético del sol. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / GSFC / Universidad de Delaware

Voyager 1 la fuerza del campo magnético y Dirección

Este gráfico muestra cómo la dirección del campo magnético en la región de la NASA Voyager 1 está explorando no ha cambiado, a pesar de que la intensidad del campo magnético se ha incrementado. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / GSFC / Universidad de Delaware


Los datos obtenidos con dos instrumentos a bordo de la Voyager 1 que registran partículas cargadas mostraron que la nave espacial entró por vez primera en esta región el 28 de julio de 2012. La frontera entre esta región y la anterior retrocedió y se acercó a la Voyager 1 en varias ocasiones. La nave entró a la región nuevamente el 25 de agosto y desde entonces el ambiente se ha mantenido estable.

La Voyager 1 fue lanzada en 1977 y es el objeto de fabricación humana más lejano. En la actualidad, se halla a 17 horas-luz de la Tierra (unos 18.000 millones de kilómetros ó 11.000 millones de millas).

Información adicional


Fuente : http://www.jpl.nasa.gov/news/news.php?release=2012-381

Destello clase M1.7 en limbo NE - 5-ene-2013 09:31 UTC AIA-131


una llamarada solar moderada alcanzando M1.7 fue detectada cerca de la extremidad noreste a 9:31 UTC esta mañana.

Galaxia deformada por el paso de otra por su centro

NGC 922. (Foto: NASA, ESA)



NGC 922 no es una galaxia espiral normal. Sus brazos espirales se interrumpen, una corriente de estrellas se extiende hacia la parte superior de la imagen, y una nebulosa de color rosa brillante rodea casi por completo el núcleo.

Observaciones hechas por el Observatorio Chandra de rayos X de la NASA revelan más caos en forma de fuentes de rayos-X ultraluminosas dispersas por la galaxia.

La actual forma inusual de NGC 922 y la estructura anular es el resultado del paso de una galaxia menor por el centro de NGC 922 hace 330 millones de años.

Esta galaxia menor, catalogada como 2MASXI J0224301-244443, atravesó el corazón de NGC 922 y salió disparada por el otro lado. En imágenes panorámicas de la NGC 922, el pequeño intruso puede observarse alejándose de la escena de la colisión.

A medida que la pequeña galaxia atravesó el centro de NGC 922, su presencia y su recorrido perturbaron las nubes de gas y desencadenaron la formación de nuevas estrellas, cuya radiación luego hizo brillar al gas restante. El color rosado brillante de la nebulosa resultante es un signo característico de este proceso, y se debe al hidrógeno gaseoso excitado. El hidrógeno es el elemento mayoritario en las nubes de gas interestelar. Este proceso de excitación y emisión de luz por los gases es similar al experimentado por los letreros de neón.



Información adicional


Loading player...
Fuentes : http://spacetelescope.org/news/heic1218/

3 de enero de 2013

Los misterios del Universo

2 de enero de 2013

Lluvia de estrellas Cuadrántidas 2013


Cudrántida cruzando el cielo nocturno
Cudrántida cruzando el cielo nocturno
Con el comienzo del 2013, se inicia también la ventana de observación de la primera lluvia de meteoros del año, las Cuadrántidas que se extenderá hasta el día de Reyes (6 de enero). Junto a las Gemínidas son las dos lluvias de estrellas más intensas del año, aunque menos conocidas, como hemos visto otra veces este blog el frio es uno de los factores que influye en el menor interés, en el caso de las Cuadrántidas se ve acentuado debido a que el máximo se produce casi siempre de día.

Este año la Luna entre llena y cuarto menguante, estará presente durante toda la noche del máximo dificultando su observación.
La máxima actividad para las Cuadrántidas 2013, se espera para las últimas hora de la madrugada del 3 a 4 de enero, siendo posible observarla a partir de las 1:00 hora española (0:00 horas TUC), aunque hay que tener en cuenta que la actividad fuera del día máximo es relativamente baja, pese a extenderse por seis días.

Radiante de las Cudrántidas para el 3 de enero de 2013
Radiante de las Cudrántidas para el 3 de enero de 2013

Los meteoros son entre moderados y lentos entrando en la atmósfera a unos 41 Km. por segundo, dejan tras de sí, estelas tenues aunque visibles, por ello aunque la THZ de esta lluvia ronda los 120 meteoros por hora, solo es posible apreciar en cielo nocturno unas tasas máxima de 80 a 100 meteoros por hora (lo que es una cifra realmente importante). Así con un poco de paciencia, y elementos para combatir el frío, la observación de las Cuadrántidas, puede convertirse en una experiencia muy gratificante.

Origen de las Cuadrántidas
Esta lluvia de estrellas recibe su nombre una constelación que ya no existe, la constelación de Quadrans Muralis, dado que contenía su radiante. Quadrans Muralis (del latín de Cuadrante de Muro) fue una constelación creada por el astrónomo francés Jérôme Lalande en 1795, en esta época, los cartógrafos celestes tendían a sobrecargar el cielo de nuevas constelaciones, tomando parte de las existentes, pues Quadrans Muralis usa parte de las estrellas de la zona norte de la constelación de Boyero. En 1922 la Unión Astronómica Internacional, con el fin de normalizar el catalogo de constelaciones, elimino muchas duplicidades de constelaciones, entre ellas la constelación que dio origen a la lluvia de meteoros de las Cuadrántidas.


Representación de la extinta constelación Quadrans Muralis
Representación de la extinta constelación Quadrans Muralis
A pesar de todo la lluvia de enero sigue conservando el nombre de la extinta constelación que la bautizó, pero aquí no acaban los misterios, casi todas las lluvias de estrellas tienen su origen en los restos de un cometa (las partículas de polvo y roca que al entrar en la atmosfera se incineran creando la bella imagen de una estrella fugaz), la trayectoria que siguen estos meteoros al entrar en la atmosfera señala la trayectoria de su progenitor, pero en el caso las Cuadrántidas no fue posible conocer su origen hasta 2003, cuando el astrónomo Peter Jenniskens identifico el origen, el asteroide 2003EH1, siendo la segunda lluvia de meteoros cuyo origen se debe a un asteroide como ocurre con la lluvia de diciembre las Gemínidas. El asteroide progenitor de las Cuadrántidas parecer ser el núcleo cometario C/1490 Y1, que ha perdido todo el hielo y gas, quedando extinto como cometa.

¿Cuándo verlas? ¿Dónde mirar? ¿Qué se necesita?

-Cuando verlas, la noche del 3 a 4 de enero, a partir de la 1:00, hora española. (0:00 TUC o GMT)
-Donde mirar, en las cercanías del radiante, en la zona norte de la constelación de Boyero.
-Que se necesita, cielo oscuro (alejados de las ciudades), mucha ropa de abrigo, ya que la temperatura de enero baja bastante por la noche (en el hemisferio, aunque en el sur ya están disfrutando del verano), una bebida caliente (café o chocolate). Lo que no se debe hacer es usar prismáticos o telescopios, que reducirían el campo visual, dificultando la observación.

Datos de las Cuadrántidas 2013 (QUA):

Ventana de actividad: Del 1 a 6 de enero.
Máximo: Madrugada del 3 a 4 de enero, a partir de las 01:00 hora española (00:00 TUC)
Número de meteoritos por hora: entre 80 y 100 meteoros por hora
Velocidad de los meteoros: 41 Km. por segundo (meteoros de moderados a lentos).


Fuente: Sociedad de Observadores de Meteoros y Cometas de España

El cielo enero 2013 - El Cielo de Invierno


Efemérides astronómicas del mes de Enero de 2013 para el cielo del Hemisferio Norte. Una visión del cielo diferente para los que habitan en el hemisferio terrestre opuesto, que nos hará comprender la esfericidad de nuestro planeta y nuestra posición sobre él.

January 2013 astronomical events for the Northern Hemisphere sky. A different vision of Sky for those who inhabit the land opposite hemisphere, which we will explain the roundness of our planet and our position on it.







Efemérides astronómicas del mes de Enero de 2013 para el cielo del Hemisferio Sur. Una visión del cielo diferente para los que habitamos en el hemisferio terrestre opuesto, que nos hará comprender la esfericidad de nuestro planeta y nuestra posición sobre él.

January 2013 astronomical events for the Southern Hemisphere sky. A different vision of Sky for those who inhabit the land opposite hemisphere, which we will explain the roundness of our planet and our position on it.


1 de enero de 2013