22 de agosto de 2013

Una nueva y sencilla forma de medir la gravedad de las estrellas a partir de su titileo

Simulación de granulaciones en el Sol. (Foto: Regner Trampedach, JILA/CU Boulder, CO.)




Las variaciones en el brillo de las estrellas similares al Sol están impulsadas por muchos factores, incluida la granulación, que es una consecuencia de la convección de calor por debajo de la fotosfera.

Si se tiene en cuenta que la granulación se relaciona con la gravedad en la superficie estelar, observar las variaciones en el brillo puede dar una medida de esta gravedad. Con esta idea, y gracias a los datos del telescopio espacial Kepler de la NASA, investigadores de varios centros estadounidenses han logrado un método sencillo para determinar la gravedad superficial de las estrellas, una propiedad básica muy difícil de medir con precisión.

Un patrón del parpadeo de la estrella durante ocho horas sirve para determinar la gravedad de la superficie. Su procedimiento consigue una incertidumbre del 25% para estrellas enanas, similares al Sol.

“El 25% de incertidumbre está muy bien, ya que las otras técnicas que se utilizan normalmente tienen una incertidumbre mucho mayor, de hasta el 150%. Medir la gravedad de la superficie de una estrella es muy difícil y puede llevar horas o días de trabajo”, declara a SINC Fabienne Bastien, coautora del estudio que publica la revista Nature e investigadora de la Universidad Vanderbilt (EEUU).

Las técnicas asterosismologías pueden mejorar ese 25%, pero solo se aplican a un número muy reducido de estrellas. “Con nuestro método, podemos medir la gravedad en la superficie de una estrella en pocos segundos –con unas pocas líneas de código informático– y en más de 50.000 estrellas, solo en el campo de acción del telescopio Kepler”, añade la científica.

La importancia de conocer la gravedad superficial de una estrella reside en que es lo único con lo que los científicos cuentan para determinar si es enana, como el Sol, o gigante y más evolucionada.

El nuevo método también ampliará el conocimiento sobre los exoplanetas, de los cuales no se pueden medir masas ni dimensiones directamente, sino a partir de la información sobre de las estrellas que orbitan. “Al mejorar la medida de la gravedad en la superficie estelar, que a su vez nos da el tamaño y la masa de la estrella, sabremos los tamaños y masas de los planetas que la orbitan con mucha más precisión”, asegura Bastien. 




Fuente: SINC

Confirman que los estallidos de rayos gamma más breves provienen de la colisión de estrellas de neutrones

Esta secuencia ilustra un modelo para la formación de un fogonazo breve de rayos gamma. 1: Un par de estrellas de neutrones en un sistema binario se acercan paulatinamente la una a la otra trazando una espiral. El momento orbital se disipa a través de la emisión de ondas gravitatorias, que son como pequeñas ondulaciones en el tejido del espacio-tiempo. 2: En los milisegundos finales, y mientras los dos objetos se están fusionando en uno solo, expulsan materiales altamente radiactivos. Esta masa de materia radiactiva se calienta y expande, emitiendo el estallido de luz que es la kilonova. Ésta es acompañada por un fogonazo de rayos gamma, que dura sólo una décima de segundo pero que es 100.000 millones de veces más brillante que el resplandor de la kilonova. 3: La "nube ardiente" o "bola de fuego" bloquea la luz visible pero no frena las emisiones en la banda infrarroja. 4: Un disco de "escombros" rodea al objeto resultante de la fusión de los dos. El nuevo objeto puede haberse derrumbado del todo sobre sí mismo formando un agujero negro. ((Imagen: NASA, ESA, y A. Field -STScI-)

Una explosión de rayos gamma es un fogonazo o destello de luz de alta energía (rayos gamma) causado por fenómenos, no muy bien conocidos, en los que intervienen cantidades colosales de energía. Hay dos tipos esenciales de estallidos de rayos gamma: Los de larga y los de corta duración.

Un análisis detallado de datos reunidos mediante el Telescopio Espacial Hubble de la NASA y la ESA (Agencia Espacial Europea) ha proporcionado las evidencias más claras halladas hasta ahora, de que las explosiones de rayos gamma de corta duración son provocadas por la fusión de dos objetos estelares de tamaño pequeño pero densidad elevadísima, como un par de estrellas de neutrones o una estrella de neutrones y un agujero negro.

Un agujero negro es básicamente el cadáver de una estrella prensada sobre sí misma por su propia gravedad, al faltarle la fuerza que la mantenía "hinchada". Una vez alcanzado ese estado colosal de compresión, su campo gravitacional se vuelve tan poderoso que absorbe todo lo que pase cerca, incluyendo la mismísima luz. Por eso no emite ni refleja luz alguna.

Una estrella de neutrones también es el núcleo muerto de una estrella que previamente explotó como supernova pero, pese a comprimirse mucho, no se ha convertido en agujero negro. Aún así, la materia de una estrella de neutrones alcanza densidades formidables, que no existen de forma natural en la Tierra: Una simple cucharada de la materia de la que está hecha una estrella de neutrones pesa más que las montañas del Himalaya. De hecho, la composición química de una estrella de neutrones tiene muy poco que ver con la de la materia de cualquier astro normal, o sea menos comprimido. La compresión que reina en una estrella de neutrones es tan brutal que en los átomos fuerza a los electrones a "incrustarse" contra los protones, dando lugar a neutrones. De ahí que a esta clase de objetos se les llame estrellas de neutrones.
 


La evidencia definitiva de que los estallidos de rayos gamma de corta duración son provocados por la fusión de dos objetos estelares muy densos, provino de las observaciones del Hubble en luz del infrarrojo cercano del resplandor que acompañó a un fogonazo breve de rayos gamma. El análisis, hecho por el equipo de Nial Tanvir de la Universidad de Leicester en el Reino Unido, sobre el brillo remanente de ese estallido, revela por primera vez un nuevo tipo de explosión estelar a la que se ha denominado kilonova.

Una kilonova, que típicamente acompaña a un estallido de rayos gamma de corta duración, es unas 1.000 veces más brillante que una nova. Ésta es causada típicamente en una estrella enana blanca por una explosión muy potente, pero no tanto como para destrozar la estrella. Una kilonova tiene sólo entre una centésima y una décima parte del brillo de una supernova típica, una explosión que destroza a una estrella de gran masa.



Fuentes : nasa.gov

Auroras boreales en directo desde Groenlandia, con GLORIA

(Foto: JC Casado/IAC)

El proyecto europeo GLORIA (GLObal Robotic-telescopes Intelligent Array, Red Global de Telescopios Robóticos), con participación del Instituto de Astrofísica de Canarias (España), realizará retransmisiones en directo del fenómeno de las auroras boreales desde el Sur de Groenlandia del 24 al 29 de agosto. La propuesta de GLORIA incluye también compartir fotos y actividades educativas para los estudiantes.

Sólo desde los casquetes polares de nuestro planeta se observan las auroras boreales y australes, un fenómeno astronómico espectacular que aparece ante nuestros ojos como cortinas luminosas de tonalidades diversas y cambiantes. Pero este verano trae la oportunidad de observar las auroras boreales (aquellas que se ven en el hemisferio norte) en directo desde casa, con una conexión a Internet. El momento para la observación es propicio: en la actualidad existe un aumento de la actividad solar que produce las auroras y que alcanzará su máximo a finales de 2013.

GLORIA es un innovador y ambicioso proyecto de ciencia ciudadana que dará acceso libre y gratuito a una red de telescopios robóticos a través de una interfaz Web. El IAC participa en el proyecto a través del Telescopio Abierto Divulgación (TAD).

Del 24 al 29 de agosto la expedición Shelios 2013, coordinada por el investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), Miquel Serra-Ricart, observará las auroras boreales desde el sur de Groenlandia. Miembros del proyecto europeo GLORIA se unirán a la expedición para realizar una retransmisión en directo del fenómeno. Vídeos e imágenes de las auroras serán retransmitidos en directo por Internet (en el portal live.gloria-project.eu) desde Groenlandia.

La retransmisión de las Auroras 2013 es la cuarta de una serie de retransmisiones en directo de eventos astronómicos programados por el proyecto GLORIA para promover la Astronomía y Ciencia Ciudadana entre el público (la primera fue el tránsito de Venus y le siguieron un eclipse de Sol y la relativa a la expedición Auroras 2012).
 



En su vertiente más educativa, el proyecto desarrolla actividades para involucrar a los estudiantes de secundaria. Concretamente, en el caso de las Auroras Boreales, se propondrá a los estudiantes que determinen la distancia a la que se forman las Auroras a partir de observaciones simultáneas realizadas desde dos puntos separados una distancia de 1km.

Se realizará una conexión diaria, siempre que las condiciones atmosféricas lo permitan, entre 24 y 29 de agosto 2013, desde tres emplazamientos situados al sur de Groenlandia. El emplazamiento principal estará situado en los alrededores del glaciar Qaleraliq (longitud = 46.6791W ; latitud = 60.9896N, figura 1) el segundo en una granja de Tasiusaq (figura 2) y el tercero en el poblado de Qasiarsuk (figura 3). Las emisiones serán desde 00:30 a 1:30 UT (22:30 - 23:30 hora local del día anterior en Groenlandia, 02:30-03:30 CET; donde UT significa Tiempo Universal y CET hora central europea). La emisión se llevará a cabo a dos niveles:

1) Conexiones en directo. Durante una hora una cámara apuntará hacia el cielo con el objetivo de transmitir una secuencia de vídeo de los movimientos de la aurora.

2) Time-Lapse. Todas las noches durante una hora y cada minuto se cambiará la imagen del cielo estrellado para mantener actualizado el portal de la emisión.

Estas imágenes serán accesibles en la web con el fin de realizar la actividad educativa propuesta.

Las retransmisiones podrán seguirse en el portal de GLORIA y en el del principal colaborador sky-live.tv . En el portal de GLORIA se mostrará información actualizada tanto de la situación meteorológica como de la realización o no de la retransmisión. Las retransmisiones también serán anunciadas, con unas horas de antelación, por las redes sociales de GLORIA.

Las auroras polares se producen cuando partículas muy energéticas originadas en el Sol (viento solar) alcanzan la atmósfera de la Tierra. La entrada de estas partículas está gobernada por el campo magnético terrestre y por ello sólo pueden penetrar por el Polo Norte (auroras boreales) y el Polo Sur (auroras australes). "La emisión de luz se produce en la alta atmósfera, entre 100 y 400 kilómetros, y se debe a los choques del viento solar, compuesto esencialmente por electrones, con átomos de oxígeno, lo que origina los tonos verdosos que son los más comunes", explica Serra-Ricart. En el año 2000 se detectaron intensas auroras, al coincidir con un periodo de máxima actividad solar.

Durante los máximos solares hay un aumento del viento solar y, por tanto, crece el flujo de partículas elementales que al llegar a la Tierra son dirigidas hacia los polos magnéticos. La mejor zona para la observación de las auroras boreales se localiza en un círculo alrededor del Polo Norte magnético (entre 60 y 70 grados de latitud norte). Según el astrofísico del IAC, "debido a que el Polo Norte magnético no coincide con el Polo Norte geográfico, y se encuentra situado al noroeste de Groenlandia, en concreto al norte de Canadá cerca de la isla Ellesmere, el sur de Groenlandia es una de las mejores plataformas de observación".

GLObal Robotic telescopes Intelligent Array for e-Science (GLORIA) es un proyecto financiado por la Unión Europea del Séptimo Programa Marco (FP7/2007-2012) bajo el acuerdo de subvención 283783. El proyecto está coordinado por la Universidad Politécnica de Madrid y participan 13 socios (UPM, ASU-CAS, CSIC, CTU, FZU-CAS, IAC, INAF, SAO, UCD, UCH, UMA, UOX, UWAR) de ocho países (España, República Checa, Italia, Rusia, Irlanda, Reino unido, Polonia y Chile). 



Fuente: IAC

Viaje entre enanas blancas y estrellas de neutrones

Algunos científicos son personas con poderes tan extraños que para sí los quisieran los más esforzados héroes que pueda crear nuestra imaginación ¿Cómo si no se puede entender que una persona equipada con lápiz, papel y unas pocas ecuaciones, incomprensibles para la mayoría de los mortales, sea capaz de ver los más íntimos secretos de la vida de las estrellas o de la formación del Universo? Antonio Claret, astrofísico teórico e investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA), es uno de esos pocos elegidos. A pesar de vivir la mayor parte del tiempo, limitado por una enfermedad que le impide hacer una vida normal, Antonio es un viajero audaz que acostumbra a recorrer la galaxia observando millones de estrellas que nacen, viven y mueren mostrándole sus secretos más escondidos.

Cuando Antonio Claret estudia las fotografías tomadas con los más sofisticados telescopios, su mente, entrenada en las artes que proporcionan las matemáticas, ve mucho más lejos que ningún instrumento de observación. Con las ecuaciones sobre el papel y los cálculos de su ordenador como nave de exploración, Antonio puede visitar cualquiera de los puntos lejanos de luz que muestran las imágenes y visualizarlo como lo haría un explorador intrépido situado en el lugar. Consciente de que cada punto del firmamento es el tenue mensaje luminoso enviado por alguna lejana estrella, el investigador utiliza la luz para acercarse a ella y observa su enorme esfera incandescente y el corazón nuclear que late en su interior. Allí comprueba cómo, a partir del hidrógeno, en la fragua estelar se forjan los más variados átomos, unos átomos que luego formarán otros mundos donde, si las condiciones son adecuadas, se asociarán para crear estructuras exquisitamente ordenadas como las que ahora forman nuestros cerebros.

Antonio Claret maneja los acontecimientos a voluntad. Plantea las condiciones de partida a las ecuaciones ideadas por Einstein y muchos otros sabios y busca las soluciones que le muestran cómo es el Universo, aunque ni siquiera con los más sofisticados adelantos técnicos podamos verlo. Con esos mimbres, con la imaginación que la Naturaleza le regaló y con el trabajo incansable del que sabe que sin esfuerzo no hay recompensa, Antonio ha aprendido a estirar el tiempo hasta tal punto que, bajo sus cálculos mágicos, la ínfima parte de un segundo se convierte en millones de años o los millones de años se comprimen en fracciones de segundo. Todo eso sucede en el corto espacio de tiempo que su cerebro, formado en Brasil, tarda en encontrar la palabra castellana adecuada para describir su visión. 

No existen límites, ni en el espacio ni en el tiempo, para Antonio. Es un poder de valor incalculable para una persona que, debido a su enfermedad, no puede hacer una vida normal sin la compañía atenta de Rosana, su esposa, o de su hija Bárbara. Pero ésas son limitaciones del cuerpo, su mente, en cambio, es libre, capaz de viajar entre planetas, estrellas y galaxias observando una variedad enorme de pobladores cósmicos que le cuentan su vida a través de las ecuaciones. Cuando sus ojos se fijan en una estrella enana blanca, su cerebro retrocede sin dificultad miles de millones de años atrás, hasta su nacimiento, cuando no era más que una nebulosa de gas y polvo que comenzaba a condensarse forzada por la gravedad. A partir de ese instante inicial, el tiempo se acelera y el científico observa cómo la gravedad comprime la materia en el interior de la nube hasta que se enciende el horno nuclear. No contento con ser testigo de la inmensidad inobservable, desciende hasta lo diminuto para ver como se fusionan los invisibles núcleos de hidrógeno generando el llanto de energía y luz que indica el nacimiento de la estrella.

Esa habilidad, compartida con muchos otros astrofísicos que, como él, viajan por los más escondidos lugares del Cosmos, es la que permite que usted y yo volemos hoy hasta los más recónditos lugares del Universo, guiados por tan experimentado explorador. Es un viaje fascinante que tendrá dos escalas obligadas. En esta primera parte, juntos podremos conocer la vida de las enanas blancas y de los agujeros negros. Servirá para que, en el próximo programa, podamos comprender uno de los descubrimientos más recientes de Antonio Claret en sus investigaciones y que él mismo presenta con una pregunta: ¿Fósiles en las estrellas de neutrones? 




Fuentes: Antonio Claret dos Santos, Astrofísico teórico del Instituto de Astrofísica de Andalucía del CSIC en Granada.

Viajes tripulados a otros mundos pero haciendo descender a robots en ellos

El robot K10, controlado desde la órbita terrestre, circula por el campo de pruebas. (Imagen: NASA / Dominic Hart)

De modo comparable a cómo los vehículos manejados por control remoto nos ayudan a explorar las profundidades del océano desde la superficie, un enfoque similar, que la NASA ha comenzado a estudiar, puede que algún día ayude a los astronautas a explorar otros mundos.

La NASA ha realizado últimamente pruebas de exploración mediante robots situados en la Tierra pero dirigidos por astronautas desde el espacio. En esto consiste el concepto de exploración de superficies mediante telerrobótica. Un astronauta en órbita dentro de una astronave, controla a distancia un robot que ha aterrizado en la superficie de un planeta. En el futuro, los astronautas que entren en órbita a otros mundos, como Marte, la Luna o algún asteroide, podrían valerse de esta técnica para efectuar trabajos de exploración y análisis en la superficie, sin tener que ser ellos quienes desciendan allá abajo, y podrían incluso usar avatares encarnados en esos robots de la superficie, controlados mediante telepresencia (realidad virtual aplicada a un entorno real aunque distante, en vez de a un entorno ficticio).

Las primeras pruebas de este concepto en condiciones reales de control de un robot desde el espacio, han sido las llevadas a cabo por los astronautas Chris Cassidy de la NASA y Luca Parmitano de la Agencia Espacial Europea (ESA). El vehículo robótico gobernado desde el espacio fue el K10, un robot de cuatro ruedas que tiene cerca de metro y medio (4,5 pies) de altura, pesa unos 100 kilogramos (220 libras), y puede desplazarse a casi 1 metro por segundo (un poco menos que la velocidad promedio de una persona andando).
 

Para las pruebas de telerrobótica, el K10 está equipado con múltiples cámaras y un sistema de escaneo láser en 3D que le permite efectuar trabajos de inspección del terreno, así como un mecanismo para desplegar una antena de radio simulada, una operación, ésta última, que debe hacer con una antena real el típico vehículo robótico que acaba de aterrizar en Marte.

Durante las pruebas, el robot circuló por un terreno especialmente preparado para ese fin.

Los resultados de las pruebas son muy alentadores, y demuestran que se está alcanzando una muy deseada madurez en las tecnologías de este tipo.



Fuentes :  nasa.gov

Explorando el subsuelo de Marte


Marte oculta secretos que no podemos ver a simple vista, pero el radar de la sonda europea Mars Express nos permite estudiar lo que esconde a varios kilómetros bajo su superficie.

El radar de Mars Express emite pulsos de baja frecuencia hacia el planeta, y analiza el eco producido cuando rebotan contra cualquier tipo de superficie.

Si bien la mayoría de los pulsos se reflejan contra la superficie del planeta, algunos logran penetrar en el subsuelo hasta que se encuentran con las superficies que separan las capas de distintos materiales, como rocas, agua o hielo.

Al analizar la intensidad y la fase de los ecos que regresan al instrumento, Mars Express es capaz de determinar a qué profundidad se encuentran las distintas capas del subsuelo.


Sección de las tierras altas del sur de Marte. (Foto: ESA/NASA/JPL/ASI/Univ. Rome) 

Esta imagen radar muestra un corte de 5.580 kilómetros de longitud a través de las tierras altas del sur de Marte, y fue creada poco después de que el instrumento MARSIS (Radar Avanzado para la Investigación de la Ionosfera y del Subsuelo de Marte) entrase en servicio en el año 2005.

En la parte derecha destaca la inmensa Hellas Planitia. Esta cuenca de 7 kilómetros de profundidad y 2.300 km de diámetro es uno de los mayores cráteres de impacto del Sistema Solar.

El pico brillante a la izquierda del centro de la imagen es el polo sur de Marte, y es aquí donde el radar demuestra todo su potencial, desvelando varias capas de polvo y hielo ocultas bajo el casquete de agua y dióxido de carbono congelados.

Estas formaciones, conocidas como los Depósitos Estratificados del Polo Sur, se extienden hasta una profundidad de 4 kilómetros. Se piensa que son el resultado de los distintos ciclos de cambio climático que sufrió Marte, que provocaron variaciones en la sedimentación del polvo y del hielo.

Gracias al radar de Mars Express, los científicos han calculado que estos depósitos estratificados contienen suficiente agua como para cubrir todo el planeta con una capa líquida de 11 metros de profundidad. 



Fuente: ESA

Salida extravehicular de récord en la ISS

Ingeniero de Vuelo Alexander Misurkin participa en una caminata espacial para continuar equipando la Estación Espacial Internacional el 16 de agosto Él y el ingeniero de vuelo Fyodor Yurchikhin están llevando a cabo otra caminata espacial en agosto 22. Image Crédito NASA

Dos cosmonautas rusos, Fyodor Yurchikhin y Alexander Misurkin, llevaron a cabo el 16 de agosto una salida extravehicular, en el exterior de la estación espacial internacional, que rompió el récord ruso de este tipo de actividades, con más de 7 horas. Utilizando el módulo Pirs como esclusa, ambos iniciaron la EVA a las 10:36, hora de Florida. Su objetivo sería continuar preparando la llegada del próximo módulo Nauka. Para empezar colocaron en posición una grúa Strela, en el módulo Poisk, que utilizaron para desplazar a Yurchikhin hasta una zona particular del módulo Zarya. El cosmonauta instaló allí una serie de cables y un conector. Mientras, su compañero Misurkin instaló un panel de experimentos llamado Vinoslivost, equipado con varios materiales que quedarán expuestos al ambiente espacial. Misurkin colocó también varios conectores y elementos estructurales en el módulo Poisk. Después, se reunió con Yurchikhin para instalar un cable de red Ethernet en el Zarya, que será conectado al Nauka cuando llegue en sustitución del actual Pirs. 


(Foto: NASA TV)

Los dos cosmonautas, tras guardar la grúa Strela, regresaron finalmente al interior de la estación a las 18:05, hora de Florida, rompiendo el récord de duración de una EVA rusa. La duración estimada inicialmente eran 6 horas y media, pero el trabajo se prolongó unos minutos más, hasta 7 horas y 29 minutos (el anterior récord estaba situado en las 7 horas y 16 minutos, de 1990).

Durante su estancia en el exterior, sus compañeros Pavel Vinogradov y Chris Cassidy permanecieron dentro de la cápsula Soyuz TMA-08M, mientras que Karen Nyberg y Luca Parmitano se quedaron en el segmento estadounidense.

La EVA recién terminada es la número 172 de la historia dedicada al mantenimiento y ensamblaje de la estación internacional, la séptima de Yurchikhin y la segunda de Misurkin. Ambos regresarán al exterior el 22 de agosto para reemplazar un experimento de comunicaciones con una plataforma en la que en futuro se instalará un pequeño telescopio óptico.











Fuentes : nasa.gov

Una estrella muerta posee uno de los campos magnéticos más poderosos del universo

Gracias al telescopio espacial XMM-Newton, de la ESA, un equipo de científicos ha descubierto que una curiosa estrella muerta presenta uno de los campos magnéticos más intensos del universo, a pesar de que todos los indicios parecían indicar que su magnetismo era inusualmente débil.

Este objeto, conocido como SGC 0418+5729 (o SGR 0418, de forma abreviada), es un magnetar, un tipo de estrella de neutrones.

Una estrella de neutrones es el núcleo muerto de una estrella masiva que terminó colapsando sobre sí misma tras agotar todo su combustible y explotar como supernova. Son objetos extraordinariamente densos, acumulando una masa mayor que la de nuestro Sol en una esfera de apenas 20 kilómetros de diámetro– el tamaño de una ciudad.

Un pequeño porcentaje de las estrellas de neutrones se transforman en magnetares, objetos con un intenso campo magnético. Como referencia, pueden presentar un magnetismo miles de millones o billones de veces más intenso que el generado por las máquinas de resonancia magnética de los hospitales. Estos campos magnéticos provocan que los magnetares emitan de forma esporádica potentes explosiones de radiación de alta energía.

SGR 0418 se encuentra en nuestra galaxia, a unos 6.500 años luz de la Tierra. Fue detectado por primera vez en junio de 2009 por los telescopios espaciales Fermi (NASA) y Koronas-Photon (Roscosmos), cuando se iluminó de repente en las bandas de los rayos X y de los rayos gamma. Desde ese momento se ha estado estudiando con toda una flota de observatorios, entre los que se encuentra el telescopio espacial XMM-Newton de la ESA.

"Hasta hace poco, todo parecía indicar que este magnetar tenía uno de los campos magnéticos más débiles jamás registrados, de apenas 6 x 1012 Gauss, unas 100 veces menos intenso que el de un magnetar típico”, explica Andrea Tiengo, del Instituto Universitario de Estudios Superiores de Pavía, Italia, autor principal del artículo que presenta estos resultados en Nature.

“Comprender estos resultados fue todo un reto. Sospechábamos que SGR 0418 ocultaba un campo magnético mucho más intenso, fuera del alcance de las técnicas de análisis habituales”.

Los magnetares giran más lento que las estrellas de neutrones convencionales, pero también son capaces de completar una revolución cada pocos segundos. La forma habitual de medir el campo magnético de un magnetar es determinar a qué velocidad se está frenando esta rotación. Basándose en los datos recogidos a lo largo de tres años, los astrónomos llegaron a la conclusión de que el campo magnético de SGR 0418 era extremadamente débil.


Bucle magnético en el magnetar SGR 041. (Foto: ESA/ATG Medialab)

El equipo de Andrea Tiengo desarrolló una nueva técnica capaz de analizar este campo magnético con un nivel de detalle sin precedentes, basada en el estudio de las variaciones en el espectro de rayos X del magnetar sobre una escala temporal extremadamente corta. Esta técnica ha desvelado que SGR 0418 es en realidad un monstruo magnético.

“Nuestras observaciones sugieren que este magnetar tiene un campo magnético muy fuerte y retorcido, que alcanza los 1015 Gauss en ciertas regiones de su superficie, de apenas unos pocos cientos de metros de diámetro”, aclara Andrea.

“El campo magnético global puede parecer débil, como sugerían las primeras observaciones, pero ahora somos capaces de estudiar la sub-estructura del campo magnético en la superficie del magnetar y hemos descubierto que es extremadamente intenso”.

Este fenómeno es similar al que podemos observar en nuestro Sol, que presenta campos magnéticos localizados anclados en las manchas solares. Cuando la configuración de estos campos varía, pueden colapsar produciendo una erupción solar, o en el caso de SGR 0418, una explosión de rayos X.

“Los datos espectrales recogidos por XMM-Newton, combinados con una nueva técnica de análisis, nos han permitido realizar el primer estudio detallado del campo magnético de un magnetar, confirmando que es uno de los más intensos del universo conocido”, añade Norbert Schartel, Científico del Proyecto XMM-Newton para la ESA.

“Ahora disponemos de una nueva herramienta que nos permitirá estudiar el campo magnético de otros magnetares y perfeccionar nuestros modelos de estos exóticos objetos”. 




Fuente: ESA

El telescopio ALMA capta los detalles de un parto estelar


Emoción contenida en la comunidad científica tras la grabación de un parto celestial. En las imágenes, que han sido captadas por el telescopio ALMA, situado en el norte de Chile, se ven las emanaciones de material provenientes de la estrella Harbig-Haro 46/47 en el momento de su nacimiento, y el brillo producido por las moléculas de monóxido de carbono presentes en el objeto. También recogen detalles precisos de dos chorros de materia, uno en dirección a la Tierra y otro con una trayectoria totalmente opuesta. No es la primera vez que los telescopios captan un fenómeno de este tipo, pero nunca se hizo con la nitidez y sensibilidad mostrada por el telescopio ALMA.






Fuentes : Euronews

20 de agosto de 2013

Las sondas Van Aleen de la NASA Descubre Acelerador de partículas en el corazón de los cinturones de radiación de la Tierra

Recientes observaciones de gemelos Van Allen sondas de la NASA muestran que las partículas en los cinturones de radiación que rodean la Tierra son acelerados por una patada locales de la energía, lo que ayuda a explicar cómo estas partículas alcanzan velocidades de 99 por ciento de la velocidad de la luz.
Crédito de la imagen: G. Reeves / M. Henderson


Los científicos han descubierto un enorme acelerador de partículas en el corazón de una de las regiones más hostiles del espacio cercano a la Tierra, una región de partículas super-energéticos, cargadas que rodean el mundo llamó a los cinturones de radiación de Van Allen. Los científicos sabían que algo en partículas aceleradas espacio en los cinturones de radiación de más del 99 por ciento de la velocidad de la luz, pero que no sabían qué era ese algo. Nuevos resultados de Van Allen Las sondas de la NASA muestran ahora que la energía de aceleración viene de dentro de las propias bandas. Las partículas dentro de los cinturones se aceleran mediante lanzamientos locales de energía, abofeteando las partículas a velocidades cada vez más rápidas, como un empuje perfectamente sincronizado en un columpio en movimiento.

El descubrimiento de que las partículas son aceleradas por una fuente local de energía es similar al descubrimiento de que los huracanes nacen de una fuente de energía local, como una región de agua caliente del océano. En el caso de los cinturones de radiación, la fuente es una región de las ondas electromagnéticas intensas, aprovechar la energía de otras partículas situadas en la misma región. Conocer la ubicación de la aceleración ayudará a los científicos a mejorar las predicciones del clima espacial, porque los cambios en los cinturones de radiación puede ser riesgoso para los satélites cerca de la Tierra. Los resultados fueron publicados en la revista Science el 25 de julio de 2013.

A fin de que los científicos a entender mejor los cinturones, las sondas Van Allen fueron diseñadas para volar a través de esta área intensa del espacio. Cuando la misión lanzada en agosto de 2012, que tenía objetivos de alto nivel para comprender cómo las partículas en los cinturones se aceleran a energías ultra altas, y cómo las partículas a veces puede escapar.Determinando que esta aceleración súper proviene de estos retrocesos locales de energía, en lugar de un proceso más global, los científicos han sido capaces de responder definitivamente a una de esas preguntas importantes por primera vez.

"Este es uno de los más esperados y emocionantes resultados de las sondas de Van Allen", dijo David Sibeck, Van Allen Sondas científico del proyecto en el Goddard Space Flight Center de la NASA en Greenbelt, Md. "Se va al corazón de por qué lanzamos la misión ".

Los cinturones de radiación fueron descubiertos en el lanzamiento de los primeros satélites de Estados Unidos ha enviado con éxito al espacio, Explorers I y III. Se dio cuenta rápidamente de que las cintas fueron algunos de los entornos más peligrosos de una nave espacial puede experimentar. La mayoría de las órbitas de satélite son elegidos para agacharse debajo de los cinturones de radiación o círculo fuera de ellos, y algunos satélites, como la nave espacial GPS, deben funcionar entre las dos cintas. Cuando las cintas se hinchan debido a la meteorología espacial entrante, que pueden abarcar estas naves espaciales, exponiéndolos a radiación peligrosa. De hecho, un número importante de fallos permanentes en las naves espaciales han sido causados ​​por la radiación. Con suficiente advertencia, podemos proteger la tecnología de las peores consecuencias, pero tal advertencia sólo se puede lograr si realmente comprendemos la dinámica de lo que está sucediendo dentro de estas misteriosas cintas.

"Hasta la década de 1990, pensamos que los cinturones de Van Allen fueron muy bien atendidos y cambiar poco a poco", dijo Geoff Reeves, el primer autor del artículo y científico cinturón de radiación en el Laboratorio Nacional de Los Alamos en Los Álamos, Nuevo México "Con más y más medidas, sin embargo, nos dimos cuenta de la rapidez y de manera impredecible cambiar los cinturones de radiación. Son básicamente nunca en equilibrio, pero en un estado constante de cambio. "

De hecho, los científicos se dieron cuenta de que los cinturones no tienen ni siquiera cambian constantemente en respuesta a lo que parecen ser estímulos similares. Algunas tormentas solares causaron los cinturones de intensificar, mientras que otros hicieron que los cinturones que se agotan, y algunos parecían tener casi ningún efecto en absoluto. Tales efectos dispares de eventos aparentemente similares sugieren que esta región es mucho más misterioso que se pensaba. Para entender - y, finalmente, predecir - que las tormentas solares se intensificarán los cinturones de radiación, los científicos quieren saber dónde está la energía que acelera las partículas viene.

Los gemelos Van Allen Las sondas fueron diseñados para distinguir entre dos amplias posibilidades en los procesos que aceleran las partículas a velocidades tan sorprendentes: la aceleración radial o aceleración local. En aceleración radial, las partículas son transportadas perpendicular a los campos magnéticos que rodean la Tierra, desde las zonas de baja intensidad magnética lejos de la Tierra a las zonas de alta intensidad magnética cercana a la Tierra. Las leyes de la física dictan que las velocidades de las partículas en este escenario se acelerará cuando aumenta la intensidad del campo magnético. Así que la velocidad aumentaría a medida que se mueven las partículas hacia la Tierra, tanto la forma de una roca rodando por la colina gana velocidad, simplemente debido a la gravedad. Los depósitos locales teoría de aceleración que las partículas ganan energía de una fuente de energía local más similar a la forma en que el agua del océano caliente genera un huracán por encima de ella.



Dos franjas de partículas que rodean la Tierra llamados cinturones de radiación son uno de los mayores aceleradores naturales en el sistema solar, capaces de empujar las partículas hasta un 99% la velocidad de la luz. Las sondas Van Allen lanzó en agosto de 2012, han descubierto los mecanismos detrás de esta aceleración.
Crédito de la imagen:
NASA / Goddard / Scientific Visualization Studio


Para ayudar a distinguir entre estas posibilidades, las sondas Van Allen consisten en dos naves. Con dos conjuntos de observaciones, los científicos pueden medir las partículas y de las fuentes de energía en dos regiones del espacio al mismo tiempo, lo cual es crucial distinguir entre las causas que se producen localmente o vienen de lejos. Además, cada nave espacial está equipado con sensores para medir la energía de la partícula y la posición y determinar el ángulo de paso - es decir, el ángulo de movimiento con respecto a los campos magnéticos de la Tierra. Todo esto va a cambiar de manera diferente en función de las fuerzas que actúan sobre ellos, ayudando así a los científicos distinguir entre las teorías.

Equipado con estos datos, Reeves y su equipo observaron un aumento rápido de la energía de los electrones de alta energía en los cinturones de radiación el 9 de octubre de 2012. Si la aceleración de estos electrones se produce debido al transporte radial, uno podría medir efectos de partida primero lejos de la Tierra y moviéndose hacia el interior debido a la propia forma y la fuerza de los campos de los alrededores. En tal escenario, las partículas se mueven a través de campos magnéticos, naturalmente, saltan de uno a otro en una cascada similares, ganando velocidad y energía a lo largo del camino - en correlación con ese escenario de rocas rodando por una colina.

Pero las observaciones no muestran una intensificación que se formó más lejos de la Tierra y poco a poco se trasladó hacia el interior. En su lugar, mostraron un aumento en la energía que se inició justo en el medio de los cinturones de radiación y se extendió gradualmente tanto hacia el interior y hacia el exterior, lo que implica una fuente de aceleración local.

"En este caso en particular, toda la aceleración se produjo en cerca de 12 horas", dijo Reeves. "Con las medidas anteriores, un satélite podría haber sido sólo es capaz de volar a través de un evento de una sola vez, y no tener la oportunidad de ser testigo de los cambios que ocurren en realidad. Con las sondas Van Allen tenemos dos satélites y así podemos observar cómo cambian las cosas y dónde estos cambios comienzan ".

Los científicos creen que estos nuevos resultados conducirán a mejores predicciones de la compleja cadena de acontecimientos que intensifican los cinturones de radiación a niveles que pueden inhabilitar satélites. Mientras que el trabajo muestra que la energía local proviene de las ondas electromagnéticas que cursan a través de los cinturones, no se sabe exactamente lo que estas ondas pueden ser la causa. En el conjunto de las observaciones descritas en el documento, las sondas Van Allen observó un tipo específico de ondas llamadas ondas de coro, al mismo tiempo que se aceleran las partículas, pero más trabajo debe realizarse para determinar la causa y el efecto.

"Este trabajo ayuda a diferenciar entre dos grandes soluciones", dijo Sibeck. "Esto demuestra que la aceleración puede ocurrir a nivel local. Ahora los científicos que estudian las ondas y campos magnéticos saltarán a hacer su trabajo, y descubrir lo que la onda proporciona el empuje."

Por suerte, esta tarea también será ayudado por las sondas de Van Allen, que también fueron cuidadosamente diseñados para medir y distinguir entre los numerosos tipos de ondas electromagnéticas.

"Cuando los científicos diseñaron la misión y la instrumentación de las sondas, se miraron las incógnitas científicas y dijo:" Esto es una gran oportunidad para desbloquear algunos conocimientos básicos sobre cómo se aceleran partículas '", dijo Nicola J. Fox, científico adjunto del proyecto en el Laboratorio de la Universidad Johns Hopkins de Física Aplicada en Laurel, Md. "Con cinco suites idénticas de los instrumentos a bordo de la nave espacial gemela - cada uno con una amplia gama de partículas y el campo y la detección de onda - tenemos la mejor plataforma jamás creados para comprender mejor esta crítica región del espacio por encima de la Tierra ".

El Laboratorio de Física Aplicada construyó y opera los gemelos Van Allen Sondas para la Dirección de Misiones Científicas de la NASA. Las sondas Van Allen comprenden la segunda misión en la vida de la NASA con un programa estrella, gestionado por Goddard, para explorar aspectos del sistema Sol-Tierra conectada que afectan directamente a la vida y la sociedad.



Videos sobre las sondas Van Aleen 

 

 

 

 

 

 


Para obtener más información acerca de las sondas de Van Allen, visite:
www.nasa.gov/vanallenprobes/



Fuentes : Nasa.gov

19 de agosto de 2013

Descubre ¿Dónde está el centro de la Via Láctea?

Fotografia Pablo Tenesaca, coordinador del Centro de Investigación de Ciencias Astronómicas de la Unidad Educativa Rosa de Jesús Cordero-Catalinas (Cuenca - Ecuador)

Unos científicos de Alemania lograron dar con un pulsar que pudiera generar las claves sobre la ubicación del teórico agujero negro supermasivo.
 
Teóricamente se afirma que en el centro de la Vía Láctea hay un agujero negro súper masivo que se nutre de materia. Entienden que éste da forma a un disco en espiral que lo rodea.

El proceso forma un remolino y provoca fuertes campos magnéticos que hacen que algo de materia no sea absorbida.

"De esta manera, el campo magnético del centro galáctico es importante para conocer la estructura del flujo de material del que se alimenta el agujero debido a atracción gravitatoria" cita un reportaje publicado en la web de La Opinión.

Pero a pesar de esto ese centro galáctico se oscurece para los telescopios ópticos de la Tierra producto del gas y el polvo, cosa que hace difícil poder verlo.




Pero los alemanes, según la publicación hecha por La Opinión, dieron con un nuevo púlsar al centro de la Vía Láctea que piensan colabore con poder dar explicación al funcionamiento del agujero negro más cercano a la Tierra.

"Esta estrella de neutrones se sitúa a medio año luz de distancia de Sagitario A* (SgrA*), una gran fuente de radio compacta y brillante que existe en el centro de la Vía Láctea la cual es asociada con un agujero negro supermasivo por múltiples estudios científicos", indica el reporte.

El púlsar llamado PSR J1745-2900, fue localizado luego de un destello de rayos X que el telescopio Swift de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) captó en abril pasado.

Venía del centro de la Vía Láctea y su naturaleza se comprobó por observaciones posteriores con diferentes radiotelescopios en varios países.





Fuentes : Terra

Sublime: Colores del espacio vistos por el telescopio Hubble

Conmemorando los 23 años en órbita del Telescopio Espacial Hubble, la NASA expone las más espectaculares imágenes que ha podido captar a lo largo de estas dos décadas.



El Museo Marítimo Nacional de Londres expone más de 100 impresionantes vistas del espacio, que exploran el desarrollo de la fotografía, la utilización del telescopio y la comprensión de nuestro lugar en el Universo conmemorando los 20 años de Hubble en el espacio. 

La exposición "Visiones del Universo" en el Museo Marítimo Nacional de Londres recoge más de 100 impresionantes vistas del espacio, que exploran el desarrollo de la fotografía, la utilización del telescopio y la comprensión de nuestro lugar en el Universo conmemorando los 20 años de Hubble en el espacio.
Foto: NASA / ESA
 
Al igual que otras galaxias espirales, la galaxia Sombrero consiste en un disco plano de estrellas que rodean un "bulto" central más gordo. Sin embargo, este núcleo central de estrellas se extiende para abarcar la totalidad del disco en un halo de estrellas.
Foto: NASA / ESA
Esta es una de las imágenes más grandes y con mejor resolución tomadas por el Hubble: está compuesta por un mosaico de fotos de menor tamaño que contienen la totalidad de la Nebulosa del Cangrejo. La explosión de esta supernova tuvo lugar hace unos mil años y se cree que los astrónomos japoneses, chinos y nativos americanos registraron el hecho en sus pinturas y libros
Foto: NASA / ESA
Este primer plano de la Nebulosa del Águila es una de las imágenes astronómicas más famosas jamás tomadas por el telescopio espacial Hubble. Llamada "Pilares de la Creación", las puntas de las columnas gigantes contienen densos nudos de gas en condensación para formar nuevas estrellas. Los colores de la imagen final se seleccionaron para resaltar elementos específicos detectados por las cámaras del Hubble: verde para el hidrógeno, rojo para el azufre y azul para el oxígeno.
Foto: NASA / ESA

En el mundo de las imágenes espaciales, los astrónomos utilizan diferentes paletas para darle vida a sus fotografías. En la imagen, la Nebulosa de la Mariposa.
Foto: NASA / ESA
Esta reciente fotografía es una vista espectacular de la región de formación de estrellas más cercana a la Tierra. Está hecha de 520 imágenes tomadas en cinco colores. La nebulosa de Orión se muestra con unos detalles sin precedentes, con más de 3.000 estrellas en las diversas etapas de la formación.
Foto: NASA / ESA
Al igual que en muchas de las fotos del Hubble, los colores visibles de las imágenes son composiciones de los astrónomos para indicar las diversas estructuras de los objetos estelares. En este caso colorearon la Nebulosa del Anillo para mostrar la temperatura de los gases que la rodean, de más caliente (azul y verde) a más frío (amarillo y rojo) en el exterior.
Foto: NASA / ESA


Su nombre técnico es NGC 6543, pero se conoce como Nebulosa Ojo de Gato: es uno de los objetos estelares más complejos conocidos, debido a las particularidades de su estructura, compuesta por diversas capas cuya formación ni siquiera los astrónomos han entendido completamente todavía.
Foto: NASA / ESA
En este cúmulo estelar llamado NGC 602, cerca de la Pequeña Nube de Magallanes, millones de estrellas jóvenes emiten radiación y energía en forma de ondas que erosionan el material que las rodea creando formaciones visualmente interesantes. El tamaño de lo que se ve en la foto abarca 200 años luz de lado a lado.
Foto: NASA / ESA 
Esta galaxia llamada NGC 1300 es el ejemplo típico de galaxia espiral barrada, un tipo de formación en el que los brazos de la galaxia no son espirales que llegan hasta el centro, sino más bien dos brazos formados por estrellas que conectan con el centro a través de una barra recta y continua.
Foto: NASA / ESA 
Esta foto de la Nebulosa Boomerang, situada en la Constelación de Centauro, está tomada a 5.000 años luz de distancia. En esa nebulosa planetaria se forman planetas alrededor de la estrella central; se considera el objeto estelar más frío encontrado en el universo hasta ahora.
Foto: NASA / ESA 
En su exploración de los planetas del Sistema Solar, el Hubble nos dejó imágenes tan nítidas como esta del planeta más exótico y sus magníficos anillos: Saturno. Tomada en 2004, en muchas de ellas pueden apreciarse incluso los más pequeños detalles de cómo están formados sus anillos concéntricos.
Foto: NASA / ESA 
No son pocas las estructuras fotografiadas por el Hubble que tienen aspecto de ojos, figuras o animales: en realidad somos nosotros las personas las únicas que somos capaces de sacarles esas similitudes con nuestro cerebro acostumbrado a formas y objetos que ya conocemos. Las de esta toma son dos galaxias espirales de la constelación del Can Mayor.
Foto: NASA / ESA 
En algunos lugares del universo, la gravedad generada por la materia oscura es tan intensa que incluso la luz visible se curva a su paso, como predijo Einstein y se aprecia en esta imagen: los «arcos» son en realidad una misma estructura, un cúmulo de galaxias llamado Abell 1689, que está situado más o menos en el centro, al fondo de la foto
Foto: NASA / ESA 
Este cúmulo de galaxias situado en la constelación de Pegaso se llama Quinteto de Stefan y muestra cinco galaxias tan diferentes como interesantes (dos de ellas están en el centro, casi unidas). Están situadas a unos 300 millones de años luz de distancia y fueron fotografiadas por la nueva cámara del Hubble en 2009.
Foto: NASA / ESA 



Fuentes : Terra , lexandro777

18 de agosto de 2013

La NASA desiste de poner de nuevo en funcionamiento el telescopio espacial Kepler

Las ruedas de reacción del Kepler son los cilindros negros que se ven en esta imagen.Ball Aerospace
 
- Su misión es detectar planetas en órbita alrededor de otras estrellas
- Lleva parado desde mayo de 2013 por el fallo de su sistema de estabilización
- Todos los demás sistemas de a bordo funcionan correctamente


El telescopio espacial Kepler lleva sin hacer observaciones desde finales del pasado mes de mayo debido al fallo de la segunda de las cuatro ruedas de reacción que tiene y que sirven para mantenerlo estabilizado.

Esto es debido a que para poder llevar a cabo su misión de localizar planetas en órbita alrededor de otras estrellas las observa fijamente con sus sensores para así poder detectar la pequeña disminución en su brillo que provoca cuando un planeta pasa por delante de ellas, y para poder hacer esto necesita estar completamente estabilizado.

Basta con que funcionen tres de las cuatro ruedas de reacción para estabilizar el Kepler, pero una ya había fallado en enero de 2012, así que el fallo de la segunda lo dejó fuera de combate.

De todos modos, como el resto de los sistemas de a bordo funciona correctamente, la NASA decidió llevar a cabo unas pruebas para ver si era posible poner esas ruedas de reacción de nuevo en marcha y así seguir usando el Kepler en alguna medida. 


Demasiada fricción

Lo intentaron primero con la número 4, la última en fallar, y en un principio solo consiguieron que girara en el sentido contrario a las agujas del reloj, aunque unas pruebas posteriores consiguieron hacerla girar en los dos sentidos.

La número 2, por su parte, sí respondió desde el princpio a las órdenes para girar tanto en el sentido de las agujas del reloj como en el contrario.

Pero al final las pruebas realizadas muestran mucha más fricción de la normal al girar y menos precisión a la hora de funcionar de la necesaria, por lo que la agencia ha anunciado finalmente que deja de intentar la recuperación total del Kepler.

Una opción que podría caber a partir de ahora es la de activar las ruedas estropeadas para llevar a cabo observaciones puntuales de estrellas alrededor de las cuales ya se han detectado planetas para refinar estas observaciones, pues así bastaría con que las ruedas funcionaran unas horas mientras se realizan esas nuevas observaciones.

Pero en cualquier caso es un modo de funcionamiento cuya viabilidad habría que comprobar todavía en las próximas semanas. 


Misión cumplida

En cualquier caso, no hay que olvidar que el Kepler ha estado en funcionamiento durante tres años y medio, un año y medio más de lo previsto inicialmente, y que durante este tiempo ha localizado 3.277 candidatos a planetas extrasolares, de los que ya se han confirmado 135, en órbita alrededor de las aproximadamente 150.000 estrellas que observaba.

Además, quedan aún años de análisis de los datos ya obtenidos, en los que pueden quedar todavía escondidos algunos planetas no detectados.

En cualquier caso, la NASA trabaja ya en el lanzamiento de un nuevo cazador de planetas, el TESS, el Transiting Exoplanet Survey Satellite.

TESS es otro observatorio espacial muy similar al Kepler que usará el mismo método de detección, pero que al usar tecnología más moderna será más sensible que este.





Fuentes : Rtve.es

Los empujones de la nave Albert Einstein a la Estación Espacial Internacional

Impresión artística de un ATV durante una maniobra de aumento de altura de la órbita de la EEI.ESA
 
- La EEI pierde cada mes unos 10 kilómetros de altura que hay que recuperar
- Puede usar sus propios motores o los de las naves visitantes para ello
- También se puede jugar con la orientación de los paneles solares para minimizar la pérdida de altura

 
Aunque su misión principal es la de llevar suministros a la Estación Espacial Internacional las naves de carga automatizadas de la Agencia Espacial Europea también se usan para subir la órbita de esta.

Estas maniobras se llevan a cabo periódicamente y son necesarias porque aún a la altitud de unos 350 a 400 kilómetros a la que orbita la Estación, el rozamiento con las pocas moléculas de la atmósfera que hay allí arriba la frenan un poco cada día, haciéndola bajar poco a poco.

Aunque depende de la altura a la que esté en cada momento, este frenado hace que cada mes la órbita de la Estación pierda unos 3 kilómetros de altitud, pérdida que es mayor en las épocas de mayor actividad solar, ya que esto hace que haya más moléculas a más altura.

De no ser contrarrestados los efectos de este rozamiento la Estación -o cualquier otra nave o satélite que esté en órbita baja, incluido el telescopio espacial Hubble- acabaría quemándose en la atmósfera, así que cada cierto tiempo, ya sea usando sus propios motores o los de alguna nave atracada en ella, la Estación acelera un poco para así hacer subir su órbita.

Al ir un poco más rápido es capaz de oponer más resistencia a la fuerza de la gravedad que tira de ella hacia la Tierra de forma que la órbita sube unos kilómetros con cada empujón.

Es un poco el efecto que sentimos al tomar una curva: cuanto más rápido vayamos más tenderemos a irnos hacia fuera, sólo que en el caso de la EEI el efecto es aumentar la altura de su órbita.

Así, los 1,45 metros por segundo de aumento de velocidad que proporcionó el ATV-4 Albert Einstein a la Estación Espacial Internacional el pasado 10 de julio, apenas 5,22 kilómetros por hora frente a los aproximadamente 28.000 kilómetros por hora a los que se mueve, sirvieron para subir su órbita en unos dos kilómetros.

Eso sí, si el Albert Einstein tuviera el suficiente combustible y sus motores pudieran ser mantenidos en marcha el tiempo suficiente la Estación acabaría escapándose de la órbita terrestre.

Esta era la segunda ocasión en la que el Albert Einstein le daba un empujón a la EEI; la primera fue el 19 de junio, y hay otras más previstas para el 31 de agosto, el 13 de septiembre, el 2 de octubre y una última para el 25 octubre antes de que el ATV-4 deje la EEI.

Todas estas fechas tienen programada una fecha de reserva por si hubiera algún problema, por lo general un par de días más tarde de la fecha programada originalmente.

Lo que puede suceder en cualquier momento es que haya que usar los motores del Albert Einstein para apartar la Estación de algún resto de basura espacial, aunque lógicamente esas maniobras no están programadas de antemano. 


Modo planeador nocturno

Otra cosa que se hace para mantener la altura de la órbita de la Estación es usar lo que se denomina 'modo planeador nocturno' durante el cual lo que se hace es poner los paneles solares de la Estación planos respecto al sentido de la marcha, como si fueran las alas de un avión, cuando esta se encuentra en la sombra de la Tierra.

Esto reduce el arrastre que provocan en aproximadamente un 30 por ciento, y en cuanto la Estación vuelve a salir al Sol los paneles se vuelven a orientar hacia este para seguir generando electricidad.

A veces en lugar de mantener los paneles, que son capaces de rotar sobre su eje, orientados directamente hacia el Sol, lo que se hace es dejarlos planos respecto al sentido de la marcha aún cuando la Estación está al Sol, lo que reduce su capacidad de generar electricidad a cambio de generar menos arrastre.

E incluso en ciertas ocasiones lo que se hace es programar el movimiento de los paneles para que generen el mayor arrastre posible, de tal forma que la órbita de la Estación baja más rápidamente, lo que permite ahorrar combustible a los vehículos que se lanzan hacia ella.

En total se estima que jugar con la orientación de los paneles solares permite ahorrar unos 1.000 kilos de combustible al año, lo que con lo caro que resulta colocar cualquier cosa en órbita es muy de agradecer.





Fuentes : Rtve.es