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24 de febrero de 2019

El fantasma de la constelación de Casiopea



A 550 años luz de distancia, en la constelación de Casiopea, yace la impresionante nebulosa IC 63, también conocida como el Fantasma de Casiopea. La gigantesca nube de gas y polvo está siendo erosionada lentamente por la radiación de una estrella cercana e impredecible, llamada Gamma Cassiopeiae.

Gamma Cassiopeiae es una estrella subgigante variable azul-blanca, la cual se encuentra rodeada por un disco de gas. Esta estrella es 19 veces más masiva y 65.000 veces más brillante que nuestro Sol. Rota a la increíble velocidad de 1.6 millones de kilómetros por hora (200 veces más rápido que nuestra estrella). La rotación frenética provoca que Gamma Cassiopeiae expulse masa en todas direcciones. Dicha pérdida de masa está relacionada con las variaciones de su brillo.

El Fantasma de Casiopea está siendo bombardeado constantemente con radiación ultravioleta proveniente de Gamma Cassiopeiae, provocando que los electrones de la nebulosa adquieran energía que después liberan en forma de radiación Hidrógeno-alfa, visible de color rojo en esta imagen. La constante exposición a esta radiación está provocando que el Fantasma de Casiopea se disipe lentamente.

Crédito: ESA / NASA / Hubble

3 de enero de 2019

2018, el año en que murió Stephen Hawking y un auto deportivo surcó el espacio

Fotografía del deportivo Tesla lanzado por SpaceX como carga del cohete Falcon Heavy - SpaceX
En este año hemos despedido a Stephen Hawking, hemos visto el lanzamiento de un gran cohete reutilizable, se ha descubierto un gran lago de agua en Marte y se han lanzado varias importantes misiones, entre otras muchas cosas
El año que está a punto de dejarnos ha dejado una gran cantidad de noticias relacionadas con la astronomía y el espacio de gran interés e importancia. Por ejemplo, durante 2018 dijimos adiós a Stephen Hawking, uno de los científicos más destacados de este siglo. La compañía Space X hizo historia con el lanzamiento de un cohete pesado reutilizable, una estación espacial china se estrelló y la NASA lanzó varias relevantes misiones, como la Insight, a Marte, la Parker Solar Probe, al Sol y la TESS, en busca de exoplanetas.

El año comenzó con la pérdida, en extrañas circunstancias, de Zuma, un satélite ultrasecreto valorado en 1.000 millones de dólares y lanzado por un cohete de la compañía SpaceX. A pesar de todos los interrogantes que suscitó su pérdida, nunca trascendió lo ocurrido con este artefacto.

Muchos se olvidaron de Zuma enseguida porque el 31 de enero tuvo lugar un eclipse total de Luna azul, una extrañeza astronómica que no ocurría desde el año 1866. Recordemos que, por un lado, la Luna azul es sencillamente la segunda Luna llena de cada mes. Por otro lado, una superluna es la situación en la que una Luna llena ocurre cuando el satélite está en el perigeo, en el punto de su órbita más próximo a nuestro planeta, por lo que se ve más grande y brillante en el cielo.


La era de los cohetes reutilizables

Con un rugido y un impresionante surtidor de fuego, un cohete pesado Falcon Heavy certificó el comienzo de la nueva era de la exploración espacial, caracterizada por el uso de lanzadores reutilizables. La compañía SpaceX, del multimillonario Elon Musk, lanzó el cohete en operación más potente en la actualidad y solo superado por los Saturn V del programa Apollo, y capaz de enviar cargas a la Luna y a Marte. Además, logró que dos de los tres bloques de la etapa inferior de la nave aterrizasen en la Tierra para volver a ser utilizados.

Este hito dejó en nuestras retinas una de las que podrían ser las imágenes más destacadas de este siglo: la de un deportivo rojo cereza de la marca Tesla, tripulado por un maniquí de astronauta, de nombre Starman, viajando hacia Marte. Está previsto que el Falcon Heavy vuelva a volar en 2019 con fines comerciales.

Adiós a Stephen Hawking

En marzo, llegó la triste noticia de la muerte de Stephen Hawking, a sus 76 años de edad. El físico más conocido y reconocido del mundo se fue sin avisar y en plena actividad profesional. Detrás de él quedaron sus preguntas sobre el origen del Universo, los agujeros negros, las singularidades, la inteligencia artificial o la conveniencia, o no, de revelar nuestra presencia a hipotéticas civilizaciones extraterrestres. Para algunos, Hawking solo es comparable a Einstein en relevancia, y para otros será difícil que pueda llegar un «sucesor» que tome el testigo como divulgador de ciencia de talla mundial, capaz de inspirar a millones de personas.

Stephen Hawking ha sido uno de los principales referentes de la ciencia en los últimos 30 años - AFP

Los ecos de la muerte de Hawking resonaban en abril, cuando unaestación espacial china fuera de control y de 8, 5 toneladas de peso entró en la atmósfera de la Tierra a toda velocidad. La Tiangong-1, en chino, «Palacio estelar-1», cayó en la región central del Pacífico sur a las 2.15 hora peninsular española del día 2 de abril, sin provocar ningún tipo de incidente.

Tiangong 1, el laboratorio espacial chino

También en abril, la NASA lanzó TESS, el próximo cazador de exoplanetas, se nombró a Jim Bridenstine como líder de esta agencia espacial y la Agencia Espacial Europea (ESA) publicó el mapa tridimensional de nuestra galaxia más vasto hasta la fecha y elaborado con datos de la misión Gaia.

Ya en mayo comenzó una tormenta de polvo global en Marte que duró semanas y que descargó las baterías del robot Opportunity, con el que no se ha podido contactar a día de hoy. En junio, su compañero, el rover Curiosity, detectó la presencia de moléculas orgánicas complejas en la superficie del planeta rojo. En la Tierra, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó la fundación de una fuerza militar espacial.

El origen de los rayos cósmicos

En julio se descubrió la primera fuente de rayos cósmicos, unos chorros de partículas de altísima energía que bombardean continuamente la Tierra. La detección de neutrinos de alta energía en la Antártida, en el detector IceCube, permitió seguir un único neutrino hasta su origen, un blazar, una galaxia elíptica gigante con un enorme agujero negro supermasivo que gira rápidamente en su núcleo.

Agua en Marte

Pocos días después, se publicó el hallazgo de un gran lago de agua líquida de 20 kilómetros de diámetro en el subsuelo de Marte. Según explicaron los científicos, en el polo sur del planeta rojo existe una masa de agua muy fría y salobre que recuerda a las reservas subglaciales de la Antártida, en la Tierra.

John Priscu, biogeoquímico de la Universidad Estatal de Montana en Bozeman (EE.UU.), quien estudia la vida en las condiciones extremas de los lagos subglaciales de la Antártida, explicó a ABC que «las condiciones físicas y químicas en el lago marciano son compatibles con la vida microbiana terrestre».

En verano llegó también la bonita Luna roja, un eclipse parcial de nuestro satélite, y la NASA presentó la primera tripulación para vuelos espaciales desde el año 2011.

La misión para tocar el Sol

Ya en agosto, la NASA lanzó la misión Parker Solar Probe, una nave que medirá el flujo del viento solar y la lluvia de partículas que brotan desde el Sol y que a veces bombardean la Tierra y sus satélites. Para ello, viajará más rápido y se pondrá siete veces más cerca del Sol que ninguna otra nave hasta ahora.

Fotografía del orificio detectado en la Soyuz MS-09, acoplada a la Estación Espacial Internacional (ISS) - AFP

La misión New Horizons a Plutón, tomó su primera fotografía de Ultima Thule, un pequeño y distante objeto situado en las afueras del Sistema Solar. Además, los astronautas a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS) detectaron un orificio en la pared de una de las cápsulas del laboratorio orbital que llevó a las autoridades rusas a concluir que se trataba de un intento de sabotaje. El agujero provocó una fuga de la atmósfera en toda la instalación y fue realizado con un taladro.

En septiembre, la compañía aeroespacial SpaceX anunció que el multimillonario japonés de 42 años Yusaku Maezawa volará alrededor de la Luna en su gigantesca nave Big Falcon Rocket (BFR) a partir de 2023. Por entonces, se convertirá en el primer turista que viajará más allá de la órbita baja de la Tierra. La agencia espacial de este país, la JAXA, también fue protagonista cuando logró posar varios robots de exploración en el asteroide Ryugu, en el curso de la misión Hayabusa 2.

Aterrizaje de emergencia

En octubre, una nave Soyuz aterrizó de emergencia con dos astronautas a bordo después de un error en el despegue. Los vuelos de estas naves, el auténtico cordón umbilical que une la Tierra con la Estación Espacial Internacional (ISS), no se recuperaron hasta diciembre.

También en octubre la ESA y la JAXA lanzaron la misión BepiColombo para explorar Mercurio, con la finalidad de estudiar el origen y evolución del planeta, su composición y su campo magnético.

La NASA anunció en octubre su decisión de poner fin a la misión del telescopio espacial Kepler, un instrumento que ha servido para descubrir más de 2.681 exoplanetas en los últimos nueve años y medio y para encontrar 2.899 candidatos a exoplanetas. En todo este tiempo, Kepler ha estudiado 530.506 estrellas y ha cambiado nuestra comprensión sobre los sistemas solares de la Vía Láctea.

Ilustración difundida por la NASA para despedir a Kepler - NASA/Wendy Stenzel/Daniel Rutter

Apenas días después, la NASA se despidió también de la misión Dawn, la sonda que exploró Ceres, el mayor asteroide del Sistema Solar, y Vesta, un gran cuerpo del cinturón de asteroides. Esta misión, que agotó su combustible, fue clave para revelar muchos detalles sobre la evolución de nuestro sistema planetario y reforzar la idea de que los planetas enanos pudieron albergar océanos de agua en el pasado.

El 26 de noviembre la NASA cosechó un éxito total con el aterrizaje de la misión Insight en Marte. Su trabajo será perforar y estudiar el interior del planeta rojo y convertirse en la primera misión geofísica a un planeta distinto de la Tierra.

Momentos de alegría vividos en el centro de control de la NASA en Pasadena, California, tras el aterrizaje de Insight - Bill Ingalls/NASA

Sin que hubiera tiempo para darse un respiro, el 3 de diciembre la misión OSIRIS-REx, de la NASA, llegó por fin al asteroide Bennu y comenzó a prepararse para sus operaciones científicas. Su finalidad será estudiar la atmósfera y la masa del objeto y, sobre todo, recoger entre 60 gramos y dos kilogramos de material del asteroide, a través de un brazo robótico, para traerlo a la Tierra.

Ya para finalizar el año, el 10 de diciembre la sonda Voyager 2, un artefacto lanzado el 20 de agosto de 1977, se convirtió en la segunda nave en la historia en llegar al espacio interestelar.

El próximo hito ocurrirá el 1 de enero, cuando la sonda New Horizons, la exploradora de Plutón, sobrevuele el objeto conocido como Ultima Thule, en los confines del Sistema Solar. ¿Qué será lo que nos deparará 2019?

Fuentes: ABC

28 de noviembre de 2018

El misterio de la estrella desaparecida

Dos observaciones realizadas por el telescopio espacial Hubble en 2007 y 2015 ilustrando la desaparición de la estrella N6946-BH1 NASA/ESA/HST/Adams et al

El astrónomo Rafael Bachiller nos descubre en esta serie los fenómenos más espectaculares del Cosmos. Temas de palpitante investigación, aventuras astronómicas y novedades científicas sobre el Universo analizadas en profundidad.

Después de un débil abrillantamiento que duró unos meses, la estrella N6946-BH1 se ha desvanecido ante la mirada atónita de los astrónomos. Se piensa que ha podido convertirse en un agujero negro sin pasar por la fase de supernova.

Fuegos artificiales

Situada a unos 22 millones de años luz, en la frontera entre las constelaciones del Cisne y de Cefeo, la bellísima galaxia NGC6946 nos muestra de frente unos brazos espirales muy bien definidos y una prominente barra central. Hasta ocho supernovas han sido observadas durante el último siglo en esta galaxia, por lo que ha pasado a ser conocida como la 'Galaxia de los Fuegos Artificiales'.

Dos observaciones realizadas por el telescopio espacial Hubble en 2007 y 2015 ilustrando la desaparición de la estrella N6946-BH1 NASA/ESA/HST/Adams et al

Una estrella, conocida ahora como N6946-BH1, destacaba en uno de los brazos espirales de NGC6946 por su brillo intenso que permitió su estudio durante años. Era una estrella supergigante roja unas 25 veces más masiva que nuestro Sol. Dado que las estrellas masivas viven muy deprisa, se esperaba que ésta explot

aría en un día no muy lejano formando una espectacular supernova.

La desaparición

En los meses de marzo a mayo de 2009, la estrella N6946-BH1 aumentó ligeramente su luminosidad, que pasó a situarse en unos millones de veces la del Sol, pero este ligero y lento abrillantamiento fue muy diferente de lo que estamos acostumbrados a observar en las supernovas.

La gran sorpresa llegó hace un par de años, cuando los astrónomos se dieron cuenta de que esta estrella había desaparecido en las imágenes de la galaxia tomadas en el óptico. Un equipo internacional de astrónomos coordinado por Scott Adams (Caltech, EEUU) utilizó el Gran Telescopio Binocular (LBT, Monte Graham, Arizona) y los telescopios espaciales Hubble y Spitzer de NASA para buscar la estrella tanto en imágenes ópticas como en infrarrojas. Finalmente, ha sido encontrada como un emisor infrarrojo de unas 2000 o 3000 luminosidades solares, una luminosidad modesta si se tiene en cuenta el brillo que tenía la estrella hacia el año 2009.

Esta drástica disminución de la luminosidad (de un factor del orden de 1000) no puede ser explicada mediante la posible ocultación de la estrella por una nube interestelar, ni por el oscurecimiento que habría sido ocasionado por la posible eyección de una capa polvorienta de materia desde la superficie más externa de la propia estrella. En ninguno de estos dos casos puede explicarse la razón observada de las luminosidades observadas en el óptico y en el infrarrojo.

Una muerte apacible

La explicación más plausible es que la estrella N6946-BH1 esté acabando sus días formando un agujero negro, pero sin experimentar la explosión de supernova.

Hasta ahora se pensaba que todas las estrellas masivas morían como supernovas. Al agotar el combustible nuclear en sus interiores, disminuye la presión ejercida hacia el exterior y el núcleo estelar colapsa catastróficamente para formar una estrella de neutrones o un agujero negro. Según el interior estelar colapsa, una onda de choque de rebote se propaga hacia el exterior creando la supernova. En esta explosión, millones de toneladas de material estelar son arrojadas por segundo al espacio interestelar creando un remanente nebuloso muy brillante.

Recreación de una 'supernova fallida' NASA/ESA/HST

Pero N6946-BH1 parece haber muerto sin todo este aparataje, parece haberse convertido en un agujero negro de una manera mucho más discreta y apacible, como una 'supernova fallida'. Quizás la estrella eyectó algo de material desde sus capas más externas durante el proceso de implosión, este material pudo crear un disco de gas polvoriento que rodearía al agujero negro y que sería el responsable de la emisión observada en el infrarrojo.

Con el Gran Telescopio Binocular, los astrónomos han buscado, en datos obtenidos durante 7 años, más estrellas de este estilo, que pasen a convertirse en agujeros negros sin pasar por la fase de supernova. No han encontrado más. A cambio, en este mismo período se detectaron tres supernovas 'normales'. Aunque a todas luces se trata de una estadística muy insuficiente, estas observaciones parecen sugerir que el 30 % de tales estrellas masivas podrían convertirse en agujeros negros sin desencadenar una explosión de supernova.

En resumen, N6946-BH1 podría constituir un ejemplo de una modalidad de muerte estelar relativamente común, pero no estudiada hasta la fecha. Para confirmar estas hipótesis es preciso realizar más observaciones tanto en el infrarrojo como en rayos X y seguir estudiando así la evolución de esta peculiar estrella, y será necesario realizar nuevas búsquedas encaminadas a la identificación de otras estrellas similares.


También interesante
  • NGC6946 fue descubierta en el año 1798 por el gran astrónomo británico de origen alemán William Herschel, el descubridor del planeta Urano.
  • Nuestra galaxia, la Vía Láctea, dobla en número de estrellas a NGC6946, pero tan solo produce, en término medio, una supernova por siglo. Las diez supernovas detectadas en NGC6946 durante el último siglo dan una idea de lo extremadamente prolífica que es esta galaxia en supernovas.
  • El artículo titulado The search for failed supernovae with the Large Binocular Telescope: confirmation of a disappearing star, por Adams y colaboradores, será publicado en un número próximo de la revista británica Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, el manuscrito puede consultarse aquí.


Fuentes: El Mundo

19 de octubre de 2018

Sigue el lanzamiento de BepiColombo en directo



Sigue en directo el lanzamiento de la misión BepiColombo de ESA-JAXA a Mercurio, a bordo de un cohete Ariane 5 desde el Puerto Espacial Europeo de Kurú (Guayana Francesa).

BepiColombo es la primera misión europea a Mercurio, el planeta más pequeño y menos explorado del Sistema Solar interior. También es la primera en enviar dos orbitadores científicos para que efectúen mediciones simultáneas y complementarias del entorno dinámico del planeta.

Un tercer módulo transportará los orbitadores hasta su destino a lo largo de un viaje de siete años, para lo cual empleará una combinación de propulsión solar-eléctrica y realizará nueve maniobras de asistencia gravitatoria en la Tierra, Venus y Mercurio.

Programa (horario sujeto a cambios):

20:15 ECUADOR, 03:15 ESPAÑA CEST Inicio de la transmisión en directo
20:45 ECUADOR, 03:45 ESPAÑA CEST Despegue, seguido de la confirmación de la adquisición de señal, prevista 40 minutos tras el lanzamiento
21:30 ECUADOR, 04:30 ESPAÑA CEST Fin de la transmisión en directo





Fuentes: ESA

BepiColombo ...Camino de desvelar los secretos de Mercurio

Los dos satélites de la misión BepiColombo ya está preparados para comenzar su viaje -de nada menos que siete años- hacia la órbita de Mercurio, uno de los planetas más misteriosos de nuestro sistema solar. 



La Agencia Espacial Europea y la japonesa colaboran en una misión que estudiará como ninguna otra anteriormente todas sus rarezas. Uno de los grandes retos de esta misión será llegar sano y salvo allí.


Mercurio espera a BepiColomboLa Agencia Espacial Europea explorará el planeta Mercurio por primera vez, después de un viaje por el Sistema Solar que, si todo va bien, durará siete años. Esta madrugada la nave BepiColombo despegará de la Guayana francesa en busca de este pequeño planeta, lleno de misterios para la ciencia.

"Una de las especificidades de Mercurio es que es un planeta que gira muy rápido alrededor del Sol. Así que por una parte tenemos que luchar contra la gravedad del Sol, pero también tenemos que acelerar la nave para que vaya junto a Mercurio", explica Johannes Benkhoff, ciéntifico europeo de la misión. BepiColombo estudiará por ejemplo, por qué el planeta parece estar encogiendo, ya que nadie sabe por qué, o cómo es posible que haya hielo en sus polos soportando temperaturas que alcanzan los 450 grados durante el día.




También su órbita interesa a los científicos. La duración de un año en Mercurio es muy corto, 88 días en la Tierra, pero un día en Mercurio es muy largo, 58 días terrestres.

"Tenemos que entender Mercurio para entender cómo se formaron los planetas. Si tenemos el modelo que forma todos los planetas, pero no Mercurio, el modelo no sirve", desgrana Jörn Helbert, científico planetario.

Por el momento todas estas explicaciones tendrán que esperar, al menos, a que llegue la misión, allá por 2025.






Scenes from yesterday's rollout of the launcher, taking the @BepiColombo spacecraft to the launch pad at Europe's Spaceport in French Guiana. is set for launch tonight at 01:45 GMT (03:45 CEST) Watch live: http://www.esa.int/live 
Fuentes: ESA, Rtve

31 de julio de 2018

Mars Express Detecta Agua Líquida Escondida Bajo el Polo Sur de Marte



Los datos del radar recopilados por la sonda espacial Mars Express de la ESA apuntan a un lago de agua líquida enterrado bajo capas de hielo y polvo en la región polar sur de Marte.

La evidencia del pasado acuoso del Planeta Rojo prevalece en toda su superficie en la forma de vastas redes de ríos y canales secos de salida gigantescos claramente representados desde órbita por naves espaciales. Los orbitadores, junto con los módulos de aterrizaje y los exploradores que exploran la superficie marciana, también descubrieron minerales que solo pueden formarse en presencia de agua líquida.

Pero el clima ha cambiado significativamente a lo largo de los 4.6 billones de años de historia del planeta y el agua líquida no puede existir en la superficie hoy en día, por lo que los científicos están mirando bajo tierra. Los primeros resultados de la nave espacial Mars Express de 15 años de antigüedad ya descubrieron que existe hielo de agua en los polos del planeta y que también está enterrado en capas intercaladas con polvo.

La presencia de agua líquida en la base de los casquetes polares se sospecha desde hace tiempo; después de todo, de estudios en la Tierra, es bien sabido que el punto de fusión del agua disminuye bajo la presión de un glaciar que lo cubre. Además, la presencia de sales en Marte podría reducir aún más el punto de fusión del agua y mantener el agua líquida incluso a temperaturas bajo cero.

Pero hasta ahora, las pruebas del radar avanzado de Marte para el subsuelo y el instrumento de sondeo de ionosfera, MARSIS, el primer radar que alguna vez orbitó en otro planeta, no fue concluyente.

Se ha necesitado la persistencia de los científicos que trabajan con este instrumento de exploración subsuperficial para desarrollar nuevas técnicas con el fin de recopilar la mayor cantidad posible de datos de alta resolución para confirmar su excitante conclusión.

El radar de penetración en el suelo usa el método de enviar pulsos de radar hacia la superficie y medir el tiempo que tardan en reflejarse en la nave espacial y con qué fuerza. Los ecos reflejados proporcionan información sobre el material que se encuentra bajo la superficie.

La investigación de radar muestra que la región del polo sur de Marte está compuesta de muchas capas de hielo y polvo a una profundidad de aproximadamente 1,5 km en un área de 200 km de ancho analizada en este estudio. Se ha identificado una reflexión de radar particularmente brillante debajo de los depósitos estratificados dentro de una zona de 20 km de ancho.

Analizando las propiedades de las señales de radar reflejadas y considerando la composición de los depósitos estratificados y el perfil de temperatura esperado debajo de la superficie, los científicos interpretan la característica brillante como una interfaz entre el hielo y un cuerpo estable de agua líquida, que puede cargarse con sal y sedimentos saturados. Para que MARSIS pueda detectar dicho parche de agua, necesitaría tener por lo menos varias decenas de centímetros de grosor.

"Esta anomalía subsuperficial en Marte tiene propiedades de radar que coinciden con el agua o los sedimentos ricos en agua", dice Roberto Orosei, investigador principal del experimento MARSIS y autor principal del artículo publicado hoy en la revista Science.

"Esta es solo una pequeña área de estudio; es una perspectiva emocionante pensar que podría haber más de estas bolsas subterráneas de agua en otros lugares, aún por descubrir ".

"Hemos visto indicios de características subsuperficiales interesantes durante años, pero no pudimos reproducir el resultado de órbita a órbita, porque las tasas de muestreo y la resolución de nuestros datos anteriores eran demasiado bajo", agrega Andrea Cicchetti, gerente de operaciones de MARSIS y coautor en el nuevo documento.


Mars Express ha usado señales de radar rebotadas a través de capas de hielo subterráneas para encontrar evidencias de un lago de agua enterrado debajo del casquete polar sur. Image Credit: ESA

"Tuvimos que idear un nuevo modo de operación para eludir el procesamiento a bordo y activar una mayor tasa de muestreo y así mejorar la resolución de la huella de nuestro conjunto de datos: ahora vemos cosas que simplemente no eran posibles antes".

El hallazgo recuerda algo al lago Vostok, descubierto a unos 4 km por debajo del hielo en la Antártida en la Tierra. Se sabe que algunas formas de vida microbiana prosperan en los ambientes subglaciales de la Tierra, pero ¿podrían los pozos subterráneos de agua líquida salada y rica en sedimentos en Marte también proporcionar un hábitat adecuado, ya sea ahora o en el pasado? Si la vida alguna vez existió en Marte sigue siendo una pregunta abierta.

"La larga duración de Mars Express, y el agotador esfuerzo realizado por el equipo de radar para superar muchos desafíos analíticos, permitió este resultado tan esperado, demostrando que la misión y su carga útil aún tienen un gran potencial científico", dijo Dmitri Titov, de la ESA y científico del proyecto Mars Express.

"Este descubrimiento emocionante es un punto culminante para la ciencia planetaria y contribuirá a nuestra comprensión de la evolución de Marte, la historia del agua en nuestro planeta vecino y su habitabilidad".

Mars Express se lanzó el 2 de junio de 2003 y celebrará 15 años en órbita el 25 de diciembre de este año.

17 de mayo de 2018

Anillos entrecruzados de Saturno



Anillos entrecruzados:

A primera vista, los anillos de Saturno parecen entrecruzarse de forma imposible. De hecho, lo que muestra esta vista de la nave internacional Cassini son los anillos que pasan por delante del planeta, sobre el que proyectan su sombra. Y como los anillos como los del anillo A y la división de Cassini, que aparecen en primer plano, no son totalmente opacos, el contorno de Saturno y la sombra de esos anillos pueden verse a través de ellos.

Los anillos de Saturno presentan estructuras complejas y llenas de detalles, muchos de los cuales pueden apreciarse en la imagen. En ciertos casos sí se conoce cuál es la causa de las divisiones y los subanillos: por ejemplo, la luna Pan, de 28km de ancho y que aquí se ve cerca del centro de la imagen, es la responsable de la división de Encke. Sin embargo, en otros casos, los orígenes y la naturaleza de las divisiones y subanillos no son fáciles de comprender.


Esta vista mira hacia la cara iluminada de los anillos a unos 14º por encima de su plano. La imagen fue tomada en luz visible por el teleobjetivo de la cámara de Cassini el 11 de febrero de 2016 y aparece destacada en un artículo publicado el 25 de abril de 2016. La vista fue capturada a 1,9 millones de kilómetros de distancia de Pan y con un ángulo Sol-Pan-nave de 85º. La escala de la imagen es de 10 km/píxel.

La misión Cassini es un proyecto cooperativo de la NASA, la ESA y la agencia espacial italiana ASI. La misión concluyó en septiembre de 2017.

Crédito: NASA/JPL-Caltech/Space Science Institute

#CEVNASA #NASA #Saturno #Cassini #Anillos #NASANET

Una Vista Única de Nuestra Galaxia

Image Credit: ESO/ATLASGAL consortium; ESA/Planck

A primera vista, esta imagen podría parecer una descarga eléctrica o un chorro de tinta roja filtrándose en el agua, pero se trata de una vista única de nuestro hogar en el cosmos. Esta imagen del plano central de la Vía Láctea es obra del satélite Planck de la ESA y el Experimento Pionero de Atacama (APEX), situado a unos 5.100 m de altitud en los Andes chilenos y operado por el Observatorio Europeo Austral.

La imagen fue publicada en 2016 como producto final de un estudio de APEX que cartografió el plano galáctico visible desde el hemisferio sur a ondas submilimétricas (situadas entre las ondas infrarrojas y de radio en el espectro electromagnético). Complementa a los datos de los observatorios espaciales Planck y Herschel de la ESA.

Planck y APEX forman la pareja ideal. APEX visualiza con todo detalle pequeños fragmentos del cosmos, mientras que los datos Planck son perfectos para estudiar áreas a gran escala. Además, abarca la totalidad del firmamento, algo nada sencillo. Los dos se complementan bien y ofrecen una perspectiva única del Universo.

La imagen revela numerosos objetos en nuestra galaxia. Las manchas brillantes a lo largo del plano de la Vía Láctea son fuentes compactas de radiación submilimétrica: regiones muy frías, polvorientas y llenas de acumulaciones que permitirían estudiar innumerables cuestiones, desde cómo se forman las estrellas hasta la estructura del Universo en conjunto.

De derecha a izquierda, las fuentes más notables incluyen a NGC 6334 (fragmento brillante en el extremo derecho), NGC 6357 (a la izquierda de NGC 6334), el propio centro galáctico (el fragmento central, más brillante y más grande en la imagen), M8 (el trazo brillante hacia la parte inferior izquierda del plano) y M20 (visible por encima y a la izquierda de M8). Aquí puede consultarse una vista etiquetada.

Planck fue lanzado el 14 de mayo de 2009 y concluyó su misión en octubre de 2013. El telescopio proporcionó una cantidad ingente de información sobre el cosmos. Su principal objetivo era estudiar el fondo cósmico de microondas, los vestigios de la radiación del Big Bang. Entre otros hitos, Planck dio lugar a un mapa completo del fondo de microondas con una sensibilidad y una precisión sin precedentes, y tomó la ‘huella magnética’ de la Vía Láctea al explorar el comportamiento de cierta luz emitida por el polvo de nuestra galaxia.

Sus observaciones ayudan a los científicos a explorar y comprender cómo se formó el Universo, su composición y su contenido, así como su evolución desde su nacimiento hasta el presente.

APEX es fruto de la colaboración entre el Instituto Max Planck de Radioastronomía, el Observatorio Espacial de Onsala (OSO) y el Observatorio Europeo Austral (ESO). El telescopio es operado por ESO.

19 de abril de 2018

Descubren la estrella más lejana jamás observada



Un equipo internacional en el que ha participado el investigador del Instituto de Física de Cantabria (IFCA), instituto mixto de la Universidad de Cantabria y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), José M. Diego, ha colaborado en la observación de Ícaro, una enorme estrella azul que se encuentra a nueve mil millones de años luz de la Tierra y cuya observación ha sido posible gracias al telescopio espacial Hubble.

Normalmente, sería imposible advertirla, de hecho solo es posible ver estrellas individuales de la Vía Láctea y de galaxias en nuestra vecindad, incluso utilizando los telescopios más potentes hasta el momento. Pero un capricho de la Naturaleza ha amplificado su brillo, de manera que ha podido detectarse utilizando el telescopio espacial Hubble.

Los astrónomos han utilizado esta estrella para probar una nueva teoría sobre la materia oscura, y para estudiar de qué están compuestos los cúmulos de galaxias.

La estrella, que pertenece a una galaxia espiral, está tan lejos que su luz ha tardado nueve mil millones de años en llegar a la Tierra, lo que equivale al 70% de la edad del Universo. “Es la primera vez que vemos una estrella individual magnificada”, explica Patrick Kelly, investigador de la Universidad de Minnesota, Twin Cities y coautor del estudio. “Somos capaces de ver galaxias muy lejanas, pero esta estrella está 100 veces más lejos que la siguiente estrella individual que podemos estudiar, excepto si contamos explosiones de supernova como una estrella”, añade.

“Hasta que Galileo observó a través de su telescopio el cielo, no se veían las cientos de miles de estrellas individuales que componen lo que se conoce como el Camino de Santiago, una zona brillante pero difusa del cielo”, explica Pablo Pérez González, investigador del departamento de Física de la Tierra y Astrofísica de la UCM. Hasta 2016, continúa, solo era posible observar estrellas individuales de la Vía Láctea o de unas cuantas galaxias muy cercanas a nosotros, a unos cuantos millones de años luz.

“Hoy ya es posible observar una estrella individual que está en el otro lado del Universo, y que de hecho ya no existe. Pero no la hemos logrado observar solo gracias a un invento del hombre, sino a la magnificencia de la propia Naturaleza y a las leyes de la Física, entre las que se encuentra la perturbación que ejerce una masa en la trayectoria de los fotones. Es realmente fabuloso”, alaba Pérez González.

La peculiaridad cósmica que ha permitido ver esta estrella es un fenómeno conocido como “lente gravitacional”. La gravedad de un cúmulo muy masivo de galaxias actúa como una gran lupa cósmica amplificando la luz de objetos más distantes. La lente natural que ha permitido ver a Ícaro está creada por el cúmulo de galaxias llamado MACS J1149+2223, situado a unos 5.000 millones de años luz de la Tierra. Combinándola con la resolución y sensibilidad del Hubble se ha conseguido detectar y analizar esa estrella lejana.

Además de la UCM y de la Universidad de Minnesota, en el trabajo han participado el Instituto de Física de Cantabria (IFCA), la Universidad del País Vasco (UPV), el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), la Universidad de La Laguna (ULL) y la Universidad de South Carolina, Columbia.

LENTE GRAVITACIONAL, ARTÍFICE

Kelly y sus colaboradores vieron varios cambios repentinos del brillo de la estrella producidos por el efecto del microlente causado por el efecto gravitatorio de astros pertenecientes al cúmulo.

“Hay estrellas individuales y estrellas muertas, por ejemplo enanas blancas o estrellas de neutrones, flotando en medio del cúmulo. En realidad son tan débiles que no las vemos. Pero sabemos que están ahí, porque cada vez que una de ellas pasa justo por delante de la estrella lejana en un alineamiento perfecto, vemos cómo Ícaro se hace más brillante”, explica Kelly. “Así que tenemos a la vez un efecto macrolente producido por toda la masa del cúmulo, y un efecto de microlente producido por objetos individuales flotando en el medio intergaláctico.”

Aunque su nombre oficial es “MACS J1149+2223 Estrella Lentificada 1”, el equipo ha decidido llamarla como el personaje de la mitología griega que se acercó demasiado al Sol con sus alas de plumas y cera. Los modelos que el equipo de astrónomos ha hecho para explicar este magnífico evento astronómico indican que Ícaro fue amplificado por una estrella similar al Sol, presente en el medio intergaláctico del cúmulo de estrellas. El alineamiento fue perfecto y se produjo una amplificación de la luz de Ícaro en un factor de al menos 10000.

Ícaro se acercó tanto a este “sol” que alcanzó la gloria como su homónimo griego. “Pudimos establecer que Ícaro es una estrella supergigante azul. Un tipo de estrella mucho más grande, masiva, caliente y, posiblemente, miles de veces más brillante que el Sol, pero que, a la distancia a la que se encuentra, es imposible observarla de manera individual incluso para Hubble, salvo que contemos con el fenómeno de lente gravitacional” comenta Ismael Pérez Fournon, del IAC

El evento de detectar Ícaro con el Hubble fue tan extraordinario que cuando fue descubierta esta estrella todos los telescopios del mundo empezaron a observarla. “En España contamos con el mayor telescopio óptico-infrarrojo del mundo, el GTC, así que los astrónomos españoles involucrados en el proyecto, de la UCM, del IFCA, UPV y del IAC, contactamos con el Director de GTC, y de manera especial nos concedió 4 horas de observación esa misma noche”, cuenta Pablo Pérez González. “El GTC fue, de hecho, el único telescopio que detectó esta estrella tan lejana desde tierra, dado que Ícaro es muy débil”, puntualiza el investigador de la UCM.

El descubrimiento de Ícaro no es excepcional solo por el hecho de ver una estrella tan distante por primera vez. Detectar la amplificación del brillo de una estrella individual permite, de manera única, estudiar la naturaleza de la materia oscura del cúmulo. Explorando lo que flota en él, el equipo de astrónomos liderado por Kelly ha logrado poner a prueba una teoría sobre la naturaleza de la materia oscura que establece que la mayor parte de ella son agujeros negros primordiales, que tendrían una masa igual a varias decenas de soles, y que se habrían formado en el nacimiento del Universo.

Según José M. Diego, investigador del IFCA, y líder de un artículo teórico que acompaña a la publicación de Nature, “si la materia oscura estuviese compuesta por agujeros negros similares a los que está detectando LIGO, la señal observada de Ícaro hubiera sido muy distinta con lo cual podemos descartar este tipo de candidatos”. Tom Broadhurst, de la UPV, señala también que “este tipo de estudios permitirá en el futuro acotar otros modelos de materia oscura, como por ejemplo los modelos que postulan partículas de materia oscura súperligeras y con efectos cuánticos”.

El descubrimiento de Ícaro gracias al efecto de lente gravitacional ha dado pie a una nueva forma de mirar al Universo por parte de los astrónomos, y pronto estaremos buscando más eventos parecidos cuando el James Webb Space Telescope (JWST), el telescopio de la agencias espaciales de Europa (ESA), Estados Unidos (NASA) y Canadá (CSA) que sucederá a Hubble, sea lanzado en 2019. “Esto nos permitirá estudiar estrellas individuales en galaxias lejanas, o incluso planetas que existían mucho antes de que se formara la Tierra”, concluye Pérez González.

Fuentes: http://ifca.unican.es/es-es/news/ – http://www.spacetelescope.org/news/heic1807/

El Hubble capta imágenes de un colosal cúmulo galáctico



Esta imagen, tomada por el Telescopio Espacial Hubble, muestra un cúmulo galáctico masivo brillando en la oscuridad del espacio. Dicho cúmulo es conocido como PLCK_G308.3-20.2.

Los cúmulos galácticos contienen miles de galaxias unidas por la fuerza de gravedad. En algún momento, los astrónomos pensaron que estos eran las estructuras más grandes del Universo, hasta que en la década de 1980 se descubrieron los supercúmulos, los cuales contienen docenas de cúmulos galácticos que se extienden a varios cientos de millones de años luz. Sin embargo, a diferencia de los cúmulos galácticos, los supercúmulos no están unidos por la gravedad, por lo tanto, los cúmulos galácticos aún se mantienen como las estructuras más grandes en el Universo unidas por la gravedad.

Una de las características más interesantes de los cúmulos galácticos es el espacio que hay entre las galaxias, conocido como medio intracumular, el cual está compuesto de plasma. La materia más brillante del cúmulo reside en el medio intracumular y es extremadamente luminosa en rayos-X. Sin embargo, la mayor parte de la masa de un cúmulo galáctico no brilla, sino que existe en una forma conocida como materia oscura. A diferencia del plasma, la materia oscura no está hecha de materia ordinaria como los protones, neutrones y electrones. Se piensa que la materia oscura conforma el 80% de toda la masa del Universo, y sin embargo, aún no ha sido observada directamente.

Crédito: NASA / ESA / Hubble

25 de enero de 2018

La Galaxia Rueda de Carro Vista por el Hubble



Esta es una imagen de la Galaxia Cartwheel, Rueda de Carro, tomada con el Telescopio Espacial Hubble de la NASA/ESA (Agencia Espacial Europea).

El objeto se vio por primera vez en las imágenes de campo amplio del telescopio Schmidt del Reino Unido y luego se estudió en detalle utilizando el Telescopio Anglo-Australiano.




Situada a unos 500 millones de años luz de distancia en la constelación de Sculptor, la forma de la rueda de carro de esta galaxia es el resultado de una violenta colisión galáctica. Una galaxia más pequeña pasó a través de una gran galaxia de disco y produjo ondas de choque que barrieron el gas y el polvo, como las ondas producidas cuando una piedra cae en un lago, y provocaron regiones de intensa formación de estrellas (que parecen azules). El anillo más externo de la galaxia, que es 1,5 veces el tamaño de nuestra Vía Láctea, marca el borde de ataque de la onda de choque. Este objeto es uno de los ejemplos más dramáticos de la pequeña clase de galaxias en anillo.

Esta imagen se basa en datos anteriores del Hubble de la galaxia Cartwheel que se reprocesaron en 2010, lo que arroja más detalles en la imagen que los vistos anteriormente.

Image Credit: ESA/Hubble & NASA

1 de enero de 2018

Los grandes avances científicos que veremos en 2018

Ilustración de la sonda «Parker Solar Probe», que será enviada al Sol este año - NASA

Dos visitas a asteroides, el lanzamiento de naves hacia la Luna, Marte, Mercurio y el Sol y la foto de un agujero negro, entre los acontecimientos más esperados

El que llega, 2018, será un año repleto de acontecimientos científicos. Muchos de ellos estarán relacionados con la exploración espacial y con la preparación para colonizar en un futuro ya no muy lejano los mundos más cercanos, como la Luna y Marte. También podríamos ser testigos de la primera foto de un agujero negro de la Historia. Esto es lo que nos espera.

1.- Dos visitas a asteroides
Recreación de la recogida de material en Bennu con el sistema «touch and go» de la nave Osiris-Rex - NASA

El próximo verano dos misiones espaciales muy similares arrancarán pedazos de sendos asteroides para traerlos de vuelta a la Tierra y ser analizados. En julio, la sonda Hayabusa 2, lanzada en diciembre de 2014 por la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA), se acercará al asteroide (162173) Ryugu, de casi 1 km de ancho, para atrapar una muestra y regresar en 2020. Poco después, en agosto, la nave de la nasa Osirix Rex alcanzará la primitiva roca Bennu. Allí pasará dos años estudiándola desde su órbita y en julio de 2020, sin posarse, extenderá un brazo robótico para tocar la superficie, una técnica llamada «touch and go» (tocar y marchar).La nave retornará en marzo de 2021, viajará durante dos años y medio y llegará a la Tierra en septiembre de 2023.

2.- El nuevo espía de Marte
Recreación del robot InSight en Marte - NASA/JPL-Caltech

La NASA lanzará en mayo su misión Mars InSight, destinada a estudiar el interior del Planeta rojo. Su objetivo es conocer mejor cómo se formaron y evolucionaron los planetas rocosos, incluyendo la Tierra. La nave partirá con dos años de retraso por los fallos en un instrumento científico primordial a bordo del artefacto.

3.- Camino de Mercurio
Recreción de la misión Bepi Colombo a Mercurio - ESA

La misión europea Bepi Colombo partirá en octubre hacia Mercurio, el planeta más cercano al Sol. Su objetivo es intentar explicar los misterios que rodean al primer planeta del Sistema Solar, como la presencia de agua en el fondo de sus cráteres, el origen de algunas extrañas formaciones geológicas o averiguar la naturaleza de su campo magnético. Incluso se aprovechará para poner a prueba, una vez más, la Teoría General de la Relatividad de Einstein.

El viaje a Mercurio llevará siete largos años y cubrirá una distancia media de 77 millones de km., aunque la nave deberá recorrer cerca de 8.900 millones de km., ya que para reducir su velocidad llevará a cabo 9 sobrevuelos planetarios (uno a la Tierra, dos a Venus y seis a Mercurio).

4.- La primera foto de un agujero negro
Simulación de un agujero negro aparecida en la película «Interestellar» - Warner Bros. / Syncopy / Paramount Pictures

Es probable que la tengamos este año y dejemos de imaginar cómo son en realidad esos monstruos cósmicos. Un equipo internacional de astrónomos pudo haber captado el pasado abril, por primera vez en la historia, imágenes de un agujero negro, concretamente, de su horizonte de sucesos, la frontera donde espacio y tiempo terminan tal y como los conocemos. Sin embrago, la información obtenida todavía debía procesarse, por lo que quizás la confirmación llegue en los próximos meses.

5.- Doctor inteligencia artificial
El clásico juego de Go - DeepMind

La inteligencia artifical de Google AlphaGo Zero se saldrá del tablero. El programa demostró este año ser capaz de enseñarse a sí mismo a dominar el clásico juego de estrategia Go, que muchos consideran más sofisticado que el ajedrez. Y lo hizo desde cero, a una velocidad increíble y sin intervención humana. Este año irá más allá y se centrará en resolver complejos problemas médicos, como el plegamiento de proteínas.

6.- El cazador de exoplanetas
Recreación de la sonda TESS - NASA

La búsqueda de una nueva Tierra, un planeta que sea similar al nuestro, tendrá un nuevo y potente colaborador en 2018. La NASA lanzará la misión «Transiting Exoplanet Survey Satellite» (TESS) para buscar exoplanetas en las órbitas de las estrellas más brillantes del cielo. Se espera que en dos años TESS analice la luz de más de 200.000 estrellas en todo el firmamento. Esperan que el observatorio espacial encuentre todo tipo de planetas, pero se fijará especialmente en los mundos pequeños y rocosos alrededor de estrellas cercanas más allá del Sistema Solar. TESS sumará sus esfuerzos al famoso y eficaz telescopio espacial Kepler.

7.- La misión para «tocar» el Sol
La «Parker Solar Probe» - NASA

La NASA lanzará el próximo verano la «Parker Solar Probe», que se acercará a casi 63 millones de kilómetros de la superficie del Sol, siete veces más cerca de lo que se haya conseguido jamás. Su objetivo principal será entender mejor el origen y la evolución del viento solar y las eyecciones de masa coronal, lo que permitirá hacer avances muy importantes en meteorología espacial. Esto es fundamental para predecir con exactitud cuáles de sus efectos son capaces de provocar catástrofes en la Tierra.

8.- Hacia la Luna y más allá
Recreación de la base lunar europea - ESA

Este año que entra será sin duda fundamental en el camino hacia la colonización de otros mundos cercanos, como lo son la Luna y Marte. La NASA, la Agencia Espacial Europea (ESA) y la compañía Space X de Elon Musk (quizás con su cohete Falcon Heavy) son algunos de los interesados en hacer realidad el que puede ser el gran viaje de la humanidad. Además SpaceX tiene programado para 2018 un paseo turístico alrededor de la Luna para dos clientes. En principio, utilizará una nave que ya se está desarrollando para la NASA, la «Dragon 2», y su cohete pesado. Por su parte, la agencia japonesa JAXA quiere, por primera vez, aterrizar un módulo inteligente en la Luna para estudiar los materiales que la componen y facilitar así la futura llegada de astronautas.

Fuentes: ABC