Mostrando entradas con la etiqueta Jupiter. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Jupiter. Mostrar todas las entradas

18 de marzo de 2021

¿Pueden ser habitables las lunas de Júpiter y Saturno?

Imagen de Encelado - NASA, ESA, JPL, SSI, Cassini Imaging Team

En estos momentos donde la exploración del planeta Marte ocupa un objetivo prioritario en la discusión científica internacional, no podemos perder de vista otros cuerpos planetarios en nuestro sistema solar también con un gran potencial para la exploración.

Las lunas heladas de Europa y Encelado ya están en el punto de vista de los científicos como lugar de estudio en próximas misiones. La luna Europa se localiza en el sistema de Júpiter, es el sexto satélite en orden creciente de distancia al planeta y el más pequeño de los cuatro Galileanos. Encelado es el sexto satélite más grande de Saturno. Ambos presentan características muy interesantes desde el punto de vista astrobiológico que les hacen merecedores de un espacio en las futuras misiones de exploración planetaria.

Cada una de las lunas heladas está espolvoreada por una sustancia rosa anaranjada que de momento no se tiene clara su composición. Estos mundos de agua helada con océanos subsuperficiales podrían compararse a lo que sucede bajo el hielo de la Antártida donde se han encontrado ecosistemas microbianos. Estos análogos terrestres (lugares del planeta Tierra que por sus características fisicoquímicas se parecen a algún lugar del sistema solar) nos dan pistas y nos preparan para el estudio de lo que podríamos encontrar en esos lugares extraterrestres. La vida que se puede encontrar en Marte es antigua, quizá fosilizada, que pudo sobrevivir hace millones de años cuando era más cálido y húmedo pero podría no decirnos mucho de cómo comenzó nuestra vida. Pero ¿porque decimos que estas lunas entrarían en la categoría de lugares con cierto potencial de habitabilidad?

En Europa se descubrió la presencia de agua con los datos de la nave Galileo e imágenes del telescopio Hubble, esto se confirmó a través del magnetómetro y aplicando el sistema de inducción magnética que indicaba que es un mundo criogeológico donde sustituye la roca por el hielo de agua en la superficie. Posee un débil campo magnético impulsado por Júpiter que es su fuerza motriz. Este conductor de electricidad hacia el campo magnético es el agua líquida que estaría debajo de la superficie. La presencia de un océano que puede tener desde 50 a 100 km de profundidad (se piensa que con cierto grado de salinidad para formar el campo magnético) ya que el agua pura es mal conductor de electricidad. ¿Por qué ofrece verdadero potencial como hábitat para la vida más allá de la tierra? Tiene agua líquida en contacto con la roca alimentada por las fuerzas de marea, hay energía química y se dan los compuestos orgánicos esenciales para la vida que conocemos.

Inconvenientes: no sabemos el espesor del hielo que podría llegar hasta los 30 o 40 km; tampoco si se regenera por medio de la criogénesis de la tectónica de placas, si las grietas observadas en el hielo son fallas por donde pasa el agua a la superficie o si hay depósitos de agua aislados en el interior de la capa de hielo. Además la radiación en Europa es extremadamente alta porque orbita muy cerca de Júpiter y capta muchas partículas cargadas en su campo magnético.

El presupuesto y financiación para enviar misiones se está viendo recortado al priorizar en otros proyectos (envío de Rovers a Marte).

Encelado es una luna pequeña un sexto del tamaño de Europa con una superficie muy helada y brillante. La sonda espacial Cassini observó con sorpresa unos geiseres o columnas de polvo que emanaban de una región acotada de la zona sur formando el anillo E de saturno y las sobrevoló analizando el material expulsado con su espectrómetro de masas. La sorpresa fue comprobar que había agua (al no haber una fuente de calor continua no hay razón para pensar que el hielo no esté congelado). También se detectó abundancia de amoniaco que mezclado con el agua actúa como un anticongelante eficaz. Cuando midieron las temperaturas en los respiraderos vieron agua líquida como resultado. Además se detectó metano productos orgánicos complejos, aminoácidos y una sopa de materia orgánica.

Existen datos interesantes de atracción gravitacional confirmando que entre la capa de hielo y el núcleo de roca se forma un bolsillo de agua emparedado que las haría estar en contacto formándose grietas en la superficie y apareciendo las plumas de polvo. Con todo este cóctel tendríamos una química muy interesante que se ajusta a todos los criterios de habitabilidad que conocemos: tiene fuentes de energía química y carbono para construir moléculas complejas.

Inconvenientes: no hay una fuente continua de calor. Todo el mundo pensaba que el océano debería estar congelado pero la sorpresa fue que no.

Hay dudas y teorías sobre esto. Se piensa que Encelado se encontraba hace millones de años en una fase de excentricidad mucho mayor que su órbita y bombeaba calor hacia el interior. Ahora quedan los restos de ese océano que algún día se congelaría, entonces podría no haber existido por un periodo suficiente de tiempo para darse las condiciones de vida.

Próximas Misiones

JUICE en 2022 (financiada por la ESA) aunque su objetivo será Ganimedes y no Europa, que solo tendrá sobrevuelos en aproximación ya que necesitaría más propelente para entrar en su órbita y supondría mucho más coste. La segunda misión es EUROPA CLIPPER de la NASA para 2024. Sí tiene como objetivo mapear el subsuelo para encontrar señales de vida, realizarán en torno a 40 sobrevuelos bajos sobre la superficie y estará equipada con 9 instrumentos que (medirán el campo magnético, un radar perforador, analizarán que minerales contiene el hielo o la temperatura de la superficie). La mala noticia es que se ha suprimido ICEMAG uno de los instrumentos más importantes para perforar el hielo y aunque todavía es posible que puedan medir la profundidad del océano y la salinidad, será mucho más difícil sin él. Dependerán de cómo sea realmente Europa y que se encuentren una vez allí.
Tipos de Lanzamiento posibles

Trajectory 1: Vehículo comercial (Falcon Heavy o Delta IV Heavy) EVEEGA (Earth, Venus, Earth, Earth) Asistencia gravitatoria de la Tierra y Venus. Los Sistemas de la nave especial deberán sobrevivir mucho más tiempo en el duro entorno especial. Tardaría 7,5 años en llegar pero se reduciría el coste.

Trajectory 2: Vehículo directo a Jupiter: SLS Transfer: 2.5 años en llegar, mucho más caro que un cohete comercial. El presupuesto de esta misión es de 4.250 millones de dólares. La NASA está cada vez más preocupada por tomar una decision final sobre qué vehículo de lanzamiento se utilizará finalmente y mantiene un debate con el congreso, que insiste en que se utilice el sistema de lanzamiento SLS. Pero han surgido problemas de compatibilidad de hardware y tampoco está claro si habrá suficientes cohetes disponibles, ya que son necesarios para que el programa Artemis devuelva a los astronautas a la superficie lunar. Finalmente parece que se utilizará un vehículo privado en octubre 2024.

¿Y si pudiéramos elegir a donde ir?

Podría ser Europa, que ha tenido agua líquida en contacto con la roca y una fuente de calor abundante durante un largo periodo de tiempo para que pueda darse la vida. Sin embargo, podría mantenerlo todo bajo el hielo y no poder penetrarlo, sería muy complicado.

El elegido sería Encelado, ya que está a nuestro alcance; el agua es expulsada constantemente al espacio y disponemos de tecnología necesaria para tomar muestras y retornarlas a la tierra. La misión seguiría la trayectoria EVEEGA (Earth, Venus,Earth, Earth Gravity Assist) aprovechando la ayuda gravitatoria de varios planetas del sistema solar interior, gastando poca energía y multiplicando la velocidad de crucero para reducir los tiempos de llegada.

Tardaría 7-8 años en llegar a Saturno, estaría dos orbitando cerca y realizando descensos a través de los geiseres y emplearía otros cuatro para regresar bajando hacia la gravedad del sol antes de traer a la Tierra las muestras. Necesitaría una fuente de energía que se mantuviera funcionando en el espacio profundo en torno a 16 años y una lanzadora especial. El presupuesto de la misión sería unos 4.000 millones de dólares.

Análogos en la Tierra

El ejemplo más conocido es el Lago Vida en los valles secos de la Antártida junto con el lago Untersee. Pero si hay un análogo claro en la tierra similar a los respiraderos hidrotermales en el océano de Encelado: el Campo Ciudad Perdida a lo largo del Macizo Atlántico al oeste de la cresta del Atlántico medio. La nave espacial Cassini detectó que el agua líquida subsuperficial de Encelado está circulando a través de sistemas hidrotermales alcalinos y cálidos en el fondo del océano y aunque no están tan bien caracterizados como los respiraderos de la Ciudad Perdida, pero parece haber una base muy similar.

Los sistemas alcalinos en Encelado pueden tener concentraciones más bajas de magnesio que los fluidos de Ciudad Perdida. Otra diferencia fundamental entre los respiraderos de Ciudad Perdida y los de Encelado es la energía disponible para la vida. La química del penacho de Encelado indica que el hidrógeno y el dióxido de carbono forman una pareja redox adecuada para soportar metanógenos pero no se observan sulfatos ni O2, y es probable que no estén presentes. El hábitat de Encelado depende de fuentes de energía alternativas redox. No hay luz solar ni fotosíntesis.

Fernando Carmona Martín. Researcher / Editor Astrobiology

Felipe Gómez Gómez. Científico del Centro de Astrobiología (INTA- CSIC)

Fuentes: ABC

17 de enero de 2021

Astronáutica - Los mundos que ahora explorará la sonda espacial Juno

Recreación artística de la Juno en órbita a Júpiter sobrevolando la Gran Mancha Roja. (Imagen: NASA JPL / Caltech)

Lanzada al espacio in 2011, la nave Juno de la NASA llegó al planeta Júpiter en julio de 2016. La misión principal se completará en julio de 2021.

Ante el buen estado de salud de la Juno, la NASA ha autorizado una prolongación de su tiempo de servicio. El orbitador planetario más distante de la agencia espacial estadounidense continuará ahora su investigación del planeta más grande del sistema solar hasta septiembre de 2025, o hasta el fin de la vida de la nave. Esta prolongación le da a la Juno la oportunidad de explorar todo el sistema joviano (Júpiter, sus lunas e incluso sus anillos, mucho menos vistosos que los de Saturno pero también interesantes) con múltiples encuentros planeados para tres de las más intrigantes lunas galileanas de Júpiter: Ganímedes, Europa e Ío.

"Desde su primera órbita en 2016, Juno ha proporcionado una revelación tras otra sobre el funcionamiento interno de este enorme gigante gaseoso", destaca Scott Bolton del Instituto de Investigación del Sudoeste en San Antonio (Estados Unidos) y miembro del equipo científico de la Juno. "Con la misión extendida, responderemos a las preguntas fundamentales que surgieron durante la misión principal de la Juno, y al mismo tiempo iremos más allá del planeta para explorar el sistema de anillos de Júpiter y los satélites galileanos".

La misión extendida incluye 42 órbitas adicionales, incluyendo sobrevuelos cercanos de los ciclones polares del norte de Júpiter; sobrevuelos de Ganímedes, Europa e Ío; así como la primera exploración extensiva de los tenues anillos que rodean el planeta.

La enigmática Gran Mancha Azul de Júpiter, una zona aislada con un intenso campo magnético situada cerca del ecuador del planeta, será el objetivo de una inspección magnética de alta resolución espacial durante seis sobrevuelos a principios de la nueva etapa de exploración. A medida que la órbita de Juno cambie, realizará varios sobrevuelos de las lunas, concretamente 2 en Ganímedes, 3 en Europa y 11 en Ío, así como múltiples pasos a través de los tenues anillos de Júpiter.

Juno también pasará por unas nubes de iones en forma de anillo en torno a Ío y a Europa, en múltiples ocasiones, caracterizando el entorno de radiación cerca de estos satélites. Los datos que recoja ayudarán a planificar mejor las misiones de la próxima generación de sondas espaciales al sistema joviano, concretamente la Europa Clipper de la NASA y la JUpiter ICy moons Explorer (JUICE) de la ESA (Agencia Espacial Europea).


Fuente: NCYT de Amazings

23 de noviembre de 2020

La luna Europa puede brillar en la oscuridad

Ilustración del gran océano de Europa y su gélida corteza. / NASA/JPL-Caltech

La cara oculta de este satélite de Júpiter podría emitir un resplandor verdoso, según experimentos realizados con hielo irradiado en laboratorios de nuestro planeta. La misión Europa Clipper de la NASA, cuyo lanzamiento está previsto a mediados de esta década, podría confirmar este extraño fenómeno.

La luna Europa, una de las 79 que tiene Júpiter, es uno de los objetos candidatos para albergar vida en el sistema solar, aparte de la Tierra. Este satélite contiene potencialmente un ambiente favorable para ello: un océano de agua líquida y salada debajo de su gélida corteza.

Mientras simulaban en el laboratorio las condiciones de la superficie de Europa, investigadores del Jet Propulsion Laboratory de la NASA y del Instituto de Tecnología de California (NASA/JPL-Caltech) se han topado con un descubrimiento inesperado: este hielo salado puede iluminarse en ausencia de luz solar. El estudio lo publican en la revista Nature Astronomy.

El autor principal, Murthy Gudipati, científico del JPL, detalla a SINC que el hallazgo no estaba previsto en los objetivos iniciales de la investigación: “Estábamos examinando la física y la química de hielos análogos a los de Europa sometidos a un entorno de electrones de alta energía como el que prevalece allí”.

“Pero cuando con cámara remotas y en determinadas condiciones –añade–, observamos que el hielo tenía brillo, cambiamos toda nuestra investigación para incluir estudios espectroscópicos sistemáticos de este fenómeno”.

Simulaciones en el laboratorio han permitido recrear las altas dosis de radiación que envía Júpiter sobre la superficie de Europa, exponiendo el hielo salado a los energéticos electrones y generando una luminiscencia verdosa

Las simulaciones permitieron recrear las altas dosis de radiación que envía Júpiter sobre la superficie de Europa, exponiendo el hielo salado a los energéticos electrones. De esta forma encontraron que el hielo irradiado emite luz verdosa por un proceso llamado luminiscencia estimulada por electrones.

Ilustración de la luna Europa, donde podría brillar la superficie de su lado nocturno, el opuesto al Sol. / NASA / JPL-Caltech

Ningún otro objeto del sistema solar –aparte de la Tierra con su iluminación artificial– brilla en su cara oscura

La intensidad de la emisión depende de la composición específica de los hielos “y podría ayudar a comprender la propia composición química de la superficie de Europa”, explica Gudipati, quien destaca que ningún otro objeto del sistema solar –aparte de la Tierra con su iluminación artificial– brilla en su cara oscura.

La misión Galileo y observaciones infrarrojas del satélite desde la Tierra han permitido conocer datos sobre las sales de sulfato y cloruro, ácido sulfúrico y hielo presentes en esta luna, condiciones que los científicos han replicado en nuestro planeta.

Observación directa de la misión Europa Clipper

Los hallazgos realizado en el laboratorio podrían confirmarse con las observaciones directas que realizará la misión Europa Clipper de la NASA, cuyo lanzamiento está previsto no antes de 2023 para estudiar el potencial de habitabilidad de este satélite.

Según los autores, un vuelo a baja altitud sobre Europa podría ayudar determinar y cartografiar la composición química de su cara nocturna, midiendo el brillo del hielo en diferentes regiones y con distintas longitudes de onda.

Esas observaciones también podrían permitir la caracterización del océano subsuperficial de Europa, limitando, por ejemplo, su grado de salinidad, ya que los productos de los hielos procesados energéticamente en su superficie y los materiales oceánicos se pueden haber intercambiado en escalas de tiempo geológico.

El fenómeno de luminiscencia podría estar ocurriendo de manera similar en Ganímedes, el satélite más grande de Júpiter

Por otra parte, Gudipati considera que el fenómeno de luminiscencia podría estar ocurriendo de manera similar en Ganímedes, el satélite más grande de Júpiter y que también está expuesto a grandes dosis de radiación, “aunque de manera mucho más débil que en Europa debido a que se encuentra mucho más lejos del planeta”.

En el caso de la luna Io, plantea que es difícil predecir un brillo “porque no se ha detectado mucho hielo en su superficie, que parece estar compuesta de materiales salados y de azufre”, aunque los hallazgos en Europa podrían ser relevantes en cualquier satélite expuesto a entornos de gran radiación joviana.

Fuentes: SINC

29 de octubre de 2020

Esta luna tiene más de 400 volcanes activos - Desvelan nuevas imágenes de Io, la luna repleta de volcanes más grande de Júpiter






















Io, la luna de Júpiter con más de 400 volcanes activos | ALMA

Los más de 400 volcanes de Io están teniendo un efecto notable en su atmósfera, mil millones de veces más fina que la de la Tierra.

El Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) ha obtenido imágenes de radio que muestran por primera vez el efecto directo de la actividad volcánica en la atmósfera de la luna Io de Júpiter.

Io es la luna con mayor actividad volcánica de nuestro Sistema Solar: tiene más de 400 volcanes activos que expulsan gases de azufre. Estos gases la tiñen amarillo, blanco, naranja y rojo cuando se congelan en su superficie.

A pesar de ser extremadamente fina (cerca de 1.000 millones de veces más fina que la atmósfera de la Tierra), la atmósfera de Io puede proporcionarnos información sobre la actividad volcánica de este peculiar satélite, así como su interior y todo lo que sucede debajo de su colorida corteza.

En estudios anteriores se había descubierto que la atmósfera de Io está compuesta principalmente de gas de dióxido de azufre generado por su actividad volcánica. "Sin embargo, no se sabe qué procesos impulsan las dinámicas de la atmósfera de Io", señala en un comunicado Imke de Pater, de la Universidad de California en Berkeley. "¿Es la actividad volcánica o la sublimación del gas [su transición de estado sólido a gaseoso] a partir de la superficie de hielo, cuando Io se expone a la luz del sol?", interroga.

Con el fin de distinguir los distintos procesos que dan origen a la atmósfera de Io, un equipo de astrónomos usó ALMA para obtener imágenes del satélite durante su paso por dentro y por fuera de la sombra de Júpiter (fenómeno conocido como eclipse).



"Al pasar por la sombra de Júpiter y dejar de recibir luz solar directa, Io se vuelve extremadamente fría y el gas de dióxido de azufre se condensa sobre su superficie. Durante ese período, lo único que vemos es dióxido de azufre de origen volcánico. De esa forma, podemos ver exactamente qué proporción de la atmósfera se ve afectada por la actividad volcánica", explica Statia Luszcz-Cook, de la Universidad de Columbia (Nueva York).

 

¿Por qué tiene tantos volcanes?

Gracias a la gran sensibilidad y capacidad de resolución de ALMA, por primera vez los astrónomos pudieron observar con mucha claridad las plumas de dióxido de azufre (SO2) y monóxido de azufre (SO) emanadas de los volcanes. A partir de las imágenes obtenidas, los científicos calcularon que los volcanes producen directamente cerca del 30-50 % de la atmósfera de Io.

























En las imágenes de ALMA también se observa un tercer gas proveniente de los volcanes: cloruro de potasio (KCI). "Vemos KCI en zonas volcánicas donde no se observa SO2 ni SO. Esta es una prueba fehaciente de que el magma es diferente en los distintos volcanes", comenta Statia.

Io presenta actividad volcánica debido a un proceso conocido como calentamiento gravitacional. Io describe alrededor de Júpiter una órbita que no es del todo circular y, al igual que nuestra Luna con respecto a la Tierra, siempre tiene el mismo lado mirando a Júpiter.

La atracción gravitacional de Europa y Ganímedes, otras dos lunas de Júpiter, genera muchísima fricción interna y calor, y de ese fenómeno nacen volcanes como Loki Patera, que se extiende por más de 200 kilómetros. "Al estudiar la atmósfera y la actividad volcánica de Io se aprende no solo sobre sus volcanes, sino también sobre su interior y los procesos de calentamiento gravitacional", explica Statia.

La temperatura de la atmósfera inferior de Io, en tanto, sigue siendo una incógnita. Los astrónomos esperan poder medirla en investigaciones futuras. "Para medir la temperatura de la atmósfera de Io necesitamos realizar observaciones con mayor resolución, y para eso tenemos que observarla durante más tiempo, algo que solo podremos hacer cuando Io se encuentre expuesta a la luz solar, puesto que no pasa mucho tiempo en el eclipse", señala Imke.

"Durante esas observaciones, Io giraría en decenas de grados. Tendríamos que usar software para corregir las imágenes y que no se vean borrosas, como hicimos con las imágenes de radio de Júpiter obtenidas con ALMA y el Very Large Array (VLA)".


Erupciones de 400 kilómetros en una luna de Júpiter
Hace tiempo que conocemos a Ío, el cuerpo con más vulcanismo de nuestro sistema solar. Más de 400 volcanes siembran esta luna y el origen no es otro que un “baile” entre satélites.

Superficie de Io/Foto: /NASA

Imagina un mundo de lava, una tierra en constante erupción, inyectando azufre y dióxido de carbono en la atmósfera. Prácticamente un infierno con erupciones que alcanzan los 400 kilómetros de altura. No se trata de una tierra primigenia, ni siquiera es nuestro mundo. 628 millones de kilómetros nos separan de esta tierra de fuego. 628 millones de kilómetros de helado espacio que se extienden entre nosotros y una de las muchas lunas Júpiter.


Su nombre es Ío y tiene un radio de 1821 kilómetros es aproximadamente del tamaño de la Luna. Esto lo convierte en el tercer satélite más grande de Júpiter y, por lo tanto, una de las cuatro lunas que Galileo pudo ver con su primitivo telescopio en 1610. Pero que no te engañe, porque a pesar de su modesto tamaño, es el cuerpo geológicamente más activo del Sistema Solar.

En este mundo de calderas, el agua escasea especialmente, y no porque no haya lagos, sino porque, directamente, ostenta el récord como cuerpo más seco del Sistema Solar. Ío es un satélite de extremos a quien el punto medio no parece sentarle bien, incluso su superficie baila entre un enorme rango de temperaturas que va desde los -130 grados centígrados hasta los 1600 en sus coladas de roca fundida.

Fuerzas de marea

Con estas cifras tan descomunales podríamos pensar que el interior de Ío es excepcionalmente activo y que en él los procesos de fisión nuclear superan a los de muchos planetas, sobrecalentándolo. Así es, al menos, la forma en que el interior de nuestro planeta “mantiene” su calor, pero en el caso de Ío nos estaríamos equivocando de cabo a rabo. Su secreto es otro y lejos de relacionarse con energía nuclear, tiene que ver con las mareas.

En concreto hablamos de fuerzas de marea, que un cuerpo que no experimenta la misma gravedad en todos sus puntos. Dado que la fuerza de gravedad se reduce con el cuadrado de la distancia, cuando dos objetos masivos están suficientemente cerca, como la Tierra y la Luna, el lado de la Luna que nos “mira” está experimentando más fuerza de gravedad que la cara oculta, frenando o incluso bloqueando su rotación. Esta misma fuerza es la que produce las mareas, deformando nuestros mares, haciendo que se eleven bajo la Luna (y en sus antípodas) y que su nivel baje en el resto del globo. Por eso nuestra luna no gira apenas sobre sí misma, porque sufre un acoplamiento de mareas. Algo parecido ocurre con Ío, pero la Luna no está plagada de volcanes, así que ¿Cuál es la diferencia?

Io, luna de Júpiter (fotografía de la NASA editada)/Foto: /NASA

Lo que cambia las reglas del juego es que Júpiter no solo tiene una luna, tiene muchísimas más, y en especial otras dos (Europa y Ganímedes) con propiedades muy interesantes. Como si fuera un balé perfectamente sincronizado, por cada vuelta que completa Ganímedes en torno a Júpiter, Europa da dos e Ío da cuatro. Esta relación tan perfecta se llama resonancia orbital, en concreto resonancia de Laplace, y es la clave del vulcanismo de Ío.

Gracias a esta excepcional sincronía, las fuerzas de marea que experimenta Ío alargan su órbita alejándola de la idea platónica de círculo para convertirla en una elipse. De esta forma, y simplificándolo un poco: esta regularidad hace que la gravedad de los satélites y Júpiter unan fuerzas para deformar a Ío entre todos, generando todo ese calor que lo ha convertido en un mundo de lava.

Las pateras de Ío

Sin embargo, es posible que estemos imaginando algo diferente de lo que realmente podemos encontrar en Ío. Sus volcanes no son esos conos elevados de nuestra Tierra. Si bien es cierto que cuenta con montañas más altas que el Everest, los volcanes de Ío son cráteres hundidos en la roca llamados pateras, y aunque también hay conos volcánicos, estos son infrecuentes y mucho más bajos debido a la poca densidad de su lava, que se esparce por el terreno antes de solidificarse.

Loki Patera en la superficie de Io (fotografía de la NASA)/Foto: /NASA

En Ío hay más de 400 pateras activas y teniendo menos de un 2% de nuestra masa, expulsa más lava que nuestro planeta y que desde su formación, hace 4500 millones de años, ha tenido tiempo de fundir toda su corteza y su manto aproximadamente ocho veces. Una renovación constante que le ayuda a mantener su corteza casi como nueva, sin restos apenas del impacto de meteoros que nos ayuden a inferir la edad del satélite.

Y a pesar de esta bullente actividad, el 10% de la temperatura de Ío es producida por una única patera. Concretamente la más grande de todas, con un diámetro de 202 kilómetros de pura lava llamada Loki Patera.

El color de la magia en Ío

Todo este vulcanismo proyecta al espacio multitud de gases presentes en la corteza terrestre, en especial dióxido de carbono y compuestos del azufre. Algunos superan la velocidad de escape y caen en las garras gravitatorias de Júpiter. Sin embargo, este planeta cuenta con un enorme escudo magnético que desvía a estas partículas cargadas eléctricamente. Su magnetismo las redirige a través de una suerte de autopistas invisibles llamadas líneas de campo, concentrándolas todas en los polos del planeta y haciéndolas impactar con su profunda atmósfera.

Cuando la erupción es suficientemente poderosa, estas colisiones ocurren por millones y el resultado son cortinas de luces bailando en el cielo, auroras polares en otros mundos muy alejados del nuestro. Por otro lado, si las partículas no consiguen superar la velocidad de escape de Ío, volverán a caer sobre su superficie, pintándola de rojo, blanco, gris y crema en una paleta de otro mundo.

Que no te metan cuento:
  • Aunque Galileo descubrió los principales satélites de Júpiter no les dio un nombre como tal. Hasta que llegó Simón Marius, Ío, Europa, Ganímedes, Calisto se llamaban con números romanos.
REFERENCIAS (MLA):

Fuentes: La Sextala razón

19 de diciembre de 2019

La Sonda Espacial Juno Descubre un Nuevo Ciclón en Júpiter

En esta imagen se puede ver un nuevo ciclón más pequeño en la parte inferior derecha de esta imagen infrarroja del polo sur de Júpiter tomada el 4 de Noviembre de 2019, durante el 23º sobrevuelo científico del planeta realizado por la nave espacial Juno de la NASA. Créditos de la imagen: NASA/JPL-Caltech/SwRI/ASI/INAF/JIRAM

El polo sur de Júpiter tiene un nuevo ciclón. El descubrimiento de la masiva tempestad joviana ocurrió el 3 de Noviembre de 2019, durante el último sobrevuelo de Júpiter realizado por la nave espacial Juno de la NASA. Fue el vuelo número 22 durante el cual la nave espacial con energía solar recolectó datos científicos sobre el gigante gaseoso, pasando a tan sólo 3.500 kilómetros por encima de la cima de nubes. El sobrevuelo también marcó una victoria para el equipo de la misión, cuyas medidas innovadoras mantuvieron a la nave espacial con energía solar lejps de lo que podría haber sido un eclipse que hubiese terminado con la misión.


"La combinación de creatividad y pensamiento analítico nuevamente ha valido la pena para la NASA", dijo Scott Bolton, investigador principal de Juno en el Instituto de Investigación del Suroeste en San Antonio. "Nos dimos cuenta de que la órbita iba a llevar a Juno a la sombra de Júpiter, lo que podría tener graves consecuencias porque estamos alimentados por energía solar. Sin luz solar significa que no hay energía, por lo que existía un riesgo real de morir congelados. Mientras el equipo intentaba descubrimos cómo conservar la energía y mantener nuestro núcleo caliente, los ingenieros idearon una forma completamente nueva de salir del problema: saltar la sombra de Júpiter. Era nada menos que un golpe de navegación de genio y, para nuestra sorpresa, lo primero que pasa al pasar al otro lado es que hacemos otro descubrimiento fundamental ".

Cuando Juno llegó por primera vez a Júpiter en Julio de 2016, sus cámaras infrarrojas y de luz visible descubrieron ciclones gigantes que rodeaban los polos del planeta: nueve en el norte y seis en el sur. ¿Eran ellos, como sus hermanos terrenales, un fenómeno transitorio que les llevaba solo unas semanas desarrollarse y luego menguar? ¿O podrían estos ciclones, cada uno casi tan ancho como los Estados Unidos, ser fenómenos más permanentes?

Con cada sobrevuelo, los datos refuerzan la idea de que cinco tormentas de viento se arremolinaban en un patrón pentagonal alrededor de una tormenta central en el polo sur y que el sistema parecía estable. Ninguna de las seis tormentas mostró signos de ceder el paso para permitir que otros ciclones se unieran.

"Casi parecía que los ciclones polares eran parte de un club privado que parecía oponerse a nuevos miembros", dijo Bolton. Luego, durante el 22° pase científico de Juno, un nuevo ciclón más pequeño cobró vida y se unió a los demás.

Esta imagen compuesta de luz visible tomada por la cámara JunoCam a bordo de la nave espacial Juno de la NASA el 3 de Noviembre de 2019, muestra que un nuevo ciclón en el polo sur de Júpiter se ha unido a otros cinco ciclones para crear una forma hexagonal alrededor de un gran ciclón único. Créditos: NASA/JPL-Caltech/SwRI/MSSS/JunoCam

La Vida de un Ciclón Joven

"Los datos del instrumento JIRAM de Juno indican que pasamos de un pentágono de ciclones que rodea a uno en el centro a un arreglo hexagonal", dijo Alessandro Mura, co-investigador de Juno en el Instituto Nacional de Astrofísica en Roma. "Esta nueva incorporación es más pequeña en tamaño que sus seis hermanos ciclónicos más establecidos: es aproximadamente del tamaño de Texas. Quizás los datos de JIRAM de futuros sobrevuelos muestren que el ciclón crece al mismo tamaño que sus vecinos".

Al sondear la capa meteorológica hasta 50 a 70 kilómetros debajo de las nubes de Júpiter, JIRAM captura la luz infrarroja que emerge de las profundidades de Júpiter. Sus datos indican que la velocidad del viento del nuevo ciclón tiene una media de 362 km/h, comparable a la velocidad encontrada en sus seis colegas polares más establecidos.

La cámara JunoCam de la nave espacial también obtuvo imágenes de luz visible del nuevo ciclón. Los dos conjuntos de datos arrojan luz sobre los procesos atmosféricos no solo de Júpiter sino también de otros gigantes gaseosos como Saturno, Urano y Neptuno, así como los de exoplanetas gigantes que ahora se están descubriendo; incluso arrojan luz sobre los procesos atmosféricos de los ciclones de la Tierra.

Esta imagen de un vórtice en Júpiter, tomada por la cámara de la misión Juno, JunoCam, captura la sorprendente estructura interna de la tormenta gigante. Créditos: Datos de imagen: NASA/JPL-Caltech/SwRI/MSSS Procesamiento de imagen por Gerald Eichstädt/Seán Doran, © BY NC ND

"Estos ciclones son fenómenos climáticos nuevos que no se han visto ni predicho antes", dijo Cheng Li, científico de Juno de la Universidad de California, Berkeley. "La naturaleza está revelando una nueva física con respecto a los movimientos de fluidos y cómo funcionan las atmósferas de los planetas gigantes. Estamos comenzando a comprenderlo a través de observaciones y simulaciones por ordenador. Los futuros sobrevuelos de Juno nos ayudarán a refinar aún más nuestra comprensión al revelar cómo evolucionan los ciclones con el tiempo".

Salto de las Sombras

Por supuesto, el nuevo ciclón nunca se habría descubierto si Juno se hubiera congelado hasta la muerte durante el eclipse cuando Júpiter se interpuso entre la nave espacial y el calor y los rayos de luz del Sol.

La luna de Júpiter, Io, proyecta su sombra sobre Júpiter cada vez que pasa frente al Sol, tal y como se ve desde Júpiter.
Créditos: Datos de imagen: NASA JPL-Caltech/SwRI/MSSS Procesamiento de imagen por Tanya Oleksuik, © CC BY

Juno ha estado navegando en el espacio profundo desde 2011. Entró en una órbita inicial de 53 días alrededor de Júpiter el 4 de Julio de 2016. Originalmente, la misión planeaba reducir el tamaño de su órbita unos meses más tarde para acortar el período entre los sobrevuelos científicos del gigante gaseoso a cada 14 días. Pero el equipo del proyecto recomendó a la NASA que renunciase al encendido del motor principal debido a las preocupaciones sobre el sistema de suministro de combustible de la nave espacial. La órbita de 53 días de Juno proporciona toda la ciencia según lo planeado originalmente; solo que lleva más tiempo hacerla. La vida más larga de Juno en Júpiter es lo que llevó a la necesidad de evitar la sombra de Júpiter.

"Desde el día en que entramos en órbita alrededor de Júpiter, nos aseguramos de que Juno permaneciese bañada por la luz del sol 24/7", dijo Steve Levin, científico del proyecto Juno en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California. "Nuestros navegadores e ingenieros nos dijeron que llegaría un día de ajuste de cuentas, cuando estaríamos a la sombra de Júpiter durante unas 12 horas. Sabíamos que durante un período tan prolongado sin energía, nuestra nave espacial sufriría un destino similar al del rover Opportunity, cuando los cielos de Marte se llenaron de polvo e impidieron que los rayos del Sol llegasen a sus paneles solares ".

Sin los rayos del Sol proporcionando energía, Juno se enfriaría por debajo de los niveles probados, y finalmente agotaría sus células de batería más allá de la recuperación. Entonces, el equipo de navegación ideó un plan para "saltar la sombra", maniobrando la nave espacial lo suficiente como para que su trayectoria evitase el eclipse.

Una serie de imágenes de JunoCam tomadas durante el 23º sobrevuelo de Juno a Júpiter el 3 de Noviembre de 2019 han revelado un sexto ciclón circumpolar en el grupo alrededor del polo sur de Júpiter.
Créditos: NASA JPL-Caltech/SwRI/MSSS

"En el espacio profundo, estás a la luz del Sol o estás fuera de la luz del Sol; realmente no hay nada intermedio", dijo Levin.

Los navegadores calcularon que si Juno realizaba un encendido de cohetes semanas antes del 3 de Noviembre, mientras la nave espacial estaba lo más lejos posible de Júpiter, podría modificar su trayectoria lo suficiente como para evitar el eclipse. La maniobra utilizaría el sistema de control de reacción de la nave espacial, que inicialmente no estaba destinado a ser utilizado para una maniobra de este tamaño y duración.

El 30 de Septiembre a las 19:46 EDT (23:46 GMT), comenzó el encendido del sistema de control de reacción. Terminó 10 horas y media después. La maniobra propulsiva, cinco veces más larga que cualquier uso anterior de ese sistema, cambió la velocidad orbital de Juno en 203 km/h y consumió alrededor de 73 kilogramos de combustible. Treinta y cuatro días después, los paneles solares de la nave espacial continuaron convirtiendo la luz solar en electrones.

"Gracias a nuestros navegadores e ingenieros, todavía tenemos una misión", dijo Bolton. "Lo que hicieron es más que hacer posible nuestro descubrimiento de ciclones; hicieron posibles las nuevas ideas y revelaciones sobre Júpiter que tenemos por delante".

5 de diciembre de 2019

Mini desfile de planetas brillantes



El acercamiento de planetas brillantes en el cielo nocturno continúa. Esta semana los observadores podrán ver la alineación de Saturno, Venus y Júpiter. Vamos a ver cómo y cuándo observar este mini desfile de planetas.

Venus, Júpiter y Saturno brillan en el cielo del oeste después de la puesta del Sol esta semana. Para ver estos planetas, es necesario encontrar un espacio mirar hacia la parte suroeste del cielo. Cuando el cielo comienza a oscurecerse después de la puesta del sol, busca el planeta más grande del sistema solar Júpiter bajo sobre el horizonte suroeste.

Al mismo tiempo, el planeta más brillante Venus estará en la esquina superior izquierda de Júpiter. La semana pasada observamos el acercamiento de Venus y Júpiter. Esta semana la distancia entre estos planetas aumentará de 7 a 14 grados. Saturno continuará la línea. Lo encontrarás por encima y a la izquierda de Júpiter y Venus. El planeta anillado es menos brillante que Júpiter debido a su menor diámetro y mayor distancia de nosotros, sin embargo, sigue siendo un objeto accesible para la observación.

Puedes observar mini desfile de planetas Saturno, Venus y Júpiter en el cielo después del atardecer a principios de diciembre. En la aplicación astronómica Star Walk 2 encontrarás toda la información para observar planetas, estrellas y otros cuerpos celestes en el cielo sobre tu área.

¡Feliz observación!

Fuentes: starwalk.space
Crédito del texto:Chris Vaughan  Crédito de la imagen:Vito Technology

20 de noviembre de 2019

Científicos de la NASA Confirman la Existencia de Vapor de Agua en Europa

A la izquierda, una vista de Europa tomada desde 2,9 millones de kilómetros de distancia el 2 de Marzo de 1979 por la nave espacial Voyager 1. A continuación se muestra una imagen en color de Europa tomada por la nave espacial Voyager 2 durante su encuentro cercano el 9 de Julio de 1979. A la derecha hay una vista de Europa hecha a partir de imágenes tomadas por la nave espacial Galileo a fines de la década de 1990. Crédito de la imagen: NASA/JPL

Hace cuarenta años, una nave espacial Voyager tomó las primeras imágenes de primer plano de Europa, una de las 79 lunas de Júpiter. Estas revelaron grietas marrones que cortan la superficie helada de la luna, lo que le da a Europa la apariencia de un globo ocular venoso. Las misiones al sistema solar exterior en las décadas posteriores han acumulado suficiente información adicional sobre Europa para convertirlo en un objetivo prioritario de investigación en la búsqueda de vida de la NASA.

Lo que hace que esta luna sea tan atractiva es la posibilidad de que posea todos los ingredientes necesarios para la vida. Los científicos tienen evidencias de que uno de estos ingredientes, el agua líquida, está presente debajo de la superficie helada y que a veces puede irrumpir en el espacio en enormes géiseres. Pero nadie ha podido confirmar la presencia de agua en estos penachos midiendo directamente la propia molécula de agua. Ahora, un equipo de investigación internacional dirigido por el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland, ha detectado el vapor de agua por primera vez sobre la superficie de Europa. El equipo midió el vapor mirando a Europa a través de uno de los telescopios más grandes del mundo en Hawai.

Confirmar que hay vapor de agua en Europa ayuda a los científicos a comprender mejor el funcionamiento interno de la luna. Por ejemplo, ayuda a apoyar una idea, en la que los científicos confían, de que hay un océano de agua líquida, posiblemente el doble de grande que el de la Tierra, que se derrama debajo de la capa de hielo de esta luna de kilómetros de espesor. Algunos científicos sospechan que otra fuente de agua para los penachos podría ser depósitos poco profundos de hielo de agua derretida no muy por debajo de la superficie de Europa. También es posible que el fuerte campo de radiación de Júpiter esté eliminando partículas de agua de la capa de hielo de Europa, aunque la investigación reciente argumentó en contra de este mecanismo como la fuente del agua observada.

“Elementos químicos esenciales (carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, fósforo y azufre) y fuentes de energía, dos de los tres requisitos para la vida, se encuentran en todo el sistema solar. Pero el tercero, el agua líquida, es algo difícil de encontrar más allá de la Tierra ", dijo Lucas Paganini, científico planetario de la NASA que dirigió la investigación de detección de agua. "Si bien los científicos aún no han detectado el agua líquida directamente, hemos encontrado la siguiente mejor opción: el agua en forma de vapor".

Paganini y su equipo detectaron suficiente liberación de agua de Europa (2.360 kilogramos, por segundo) para llenar una piscina olímpica en cuestión de minutos. Sin embargo, los científicos también descubrieron que el agua aparece con poca frecuencia, al menos en cantidades lo suficientemente grandes como para detectarla desde la Tierra, dijo Paganini: “Para mí, lo interesante de este trabajo no es solo la primera detección directa de agua sobre Europa, sino también la falta de ella dentro de los límites de nuestro método de detección ".

De hecho, el equipo de Paganini detectó una señal débil pero distinta de vapor de agua solo una vez durante 17 noches de observaciones entre 2016 y 2017. Al observar la luna desde el Observatorio WM Keck en la cima del volcán inactivo Mauna Kea en Hawai, los científicos vieron moléculas de agua en el hemisferio principal de Europa, o el lado de la luna que siempre está orientado en la dirección de la órbita de la luna alrededor de Júpiter. (Europa, como la luna de la Tierra, está gravitacionalmente bloqueada por su planeta anfitrión, por lo que el hemisferio principal siempre mira hacia la dirección de la órbita, mientras que el hemisferio posterior siempre mira hacia la dirección opuesta).

Utilizaron un espectrógrafo en el Observatorio Keck que mide la composición química de las atmósferas planetarias a través de la luz infrarroja que emiten o absorben. Las moléculas como el agua emiten frecuencias específicas de luz infrarroja a medida que interactúan con la radiación solar.

"Esta primera identificación directa del vapor de agua en Europa es una confirmación crítica de nuestras detecciones originales de especies atómicas, y destaca la aparente escasez de grandes columnas en este mundo helado", dijo Lorenz Roth, astrónomo y físico del KTH Royal Institute of Technology en Estocolmo.

La investigación de Roth, junto con otros hallazgos previos de Europa, solo han medido componentes del agua sobre la superficie. El problema es que detectar vapor de agua en otros mundos es un desafío. Las naves espaciales existentes tienen capacidades limitadas para detectarlo, y los científicos que usan telescopios terrestres para buscar agua en el espacio profundo deben tener en cuenta el efecto distorsionador del agua en la atmósfera de la Tierra. Para minimizar este efecto, el equipo de Paganini utilizó modelos matemáticos y computacionales complejos para simular las condiciones de la atmósfera de la Tierra para poder diferenciar el agua atmosférica de la Tierra de los datos de Europa devueltos por el espectrógrafo Keck.

"Realizamos diligentes controles de seguridad para eliminar posibles contaminantes en observaciones terrestres", dijo Avi Mandell, científico planetario de Goddard en el equipo de Paganini. "Pero, eventualmente, tendremos que acercarnos a Europa para ver qué está pasando realmente".

Los científicos pronto podrán acercarse lo suficiente a Europa para resolver sus preguntas persistentes sobre el funcionamiento interno y externo de este mundo posiblemente habitable. La próxima misión Europa Clipper, que se lanzará a mediados de la década de 2020, completará medio siglo de descubrimiento científico que comenzó con una foto modesta de un globo ocular misterioso y venoso.


Water Vapor Plumes on Europa

Cuando llegue a Europa, el orbitador Clipper realizará un estudio detallado de la superficie de Europa, el interior profundo, la atmósfera delgada, el océano subsuperficial y los respiraderos activos potencialmente incluso más pequeños. Clipper intentará tomar imágenes de cualquier penacho y tomar muestras de las moléculas que encuentra en la atmósfera con sus espectrómetros de masas. También buscará un sitio fructífero del que un futuro módulo de aterrizaje pueda recolectar una muestra. Estos esfuerzos deberían desbloquear aún más los secretos de Europa y su potencial para la vida.


Fuentes: Nasa en EspañolNASA Goddard

Espectaculares Nubes Sobre la Atmósfera de Júpiter

Crédito de la imagen: NASA/JPL-Caltech/SwRI/MSSS/Gerald Eichstadt
Esta espectacular imagen fue captada por la nave espacial Juno de la NASA, en la cual se distinguen patrones coloridos e intrincados en una región de corriente en chorro del hemisferio norte de Júpiter conocida como "Jet N3".

Las cimas de las nubes de Júpiter no forman una superficie simple y plana. Los datos de Juno ayudaron a los científicos a descubrir que las bandas giratorias en la atmósfera se extienden profundamente en el planeta, a una profundidad de aproximadamente 3.000 kilómetros. En el centro a la derecha, un parche de nubes "emergentes" brillantes y de gran altitud se elevan sobre la atmósfera circundante.

El científico ciudadano Gerald Eichstädt creó esta imagen a color mejorado utilizando datos del generador de imágenes JunoCam de la nave espacial. La imagen original fue tomada el 29 de Mayo cuando la nave espacial Juno realizó su vigésimo sobrevuelo cercano a Júpiter. En el momento en que se tomó la imagen, la nave espacial estaba a tan solo 9.700 kilómetros de la parte superior de las nubes, a una latitud de 39 grados norte.

10 de octubre de 2019

¡Saturno supera a Júpiter después del descubrimiento de 20 Lunas nuevas !



Un grupo de astrónomos ha anunciado el descubrimiento de 20 nuevas lunas alrededor de Saturno, con lo cual el planeta ahora tiene un total de 82 satélites naturales confirmados, superando a los 79 de Júpiter.

Cada una de las 20 lunas descubiertas tiene un diámetro de alrededor de 5 kilómetros y 17 de ellas tienen una órbita retrógrada, es decir, orbitan en dirección opuesta al movimiento de rotación de Saturno. Todas ellas tienen periodos orbitales de entre 2 y 3 años.

Las lunas con las órbitas más externas parecen estar agrupadas en tres diferentes cúmulos, en términos de inclinaciones y ángulos. Los astrónomos piensan que estos tres grupos son en realidad los fragmentos de lunas más grandes que fueron destruidas por colisiones violentas con otras lunas más grandes, o, quizás, con objetos exteriores como asteroides o cometas.

Un equipo dirigido por Scott S. Sheppard de Carnegie ha encontrado 20 lunas nuevas en órbita alrededor de Saturno. Esto eleva el número total de lunas del planeta anillado a 82, superando a Júpiter, que tiene 79. El descubrimiento fue anunciado por el Centro de Planetas Menores de la Unión Astronómica Internacional .
Las imágenes de descubrimiento de la recién encontrada luna prograda muy distante de Saturno. Fueron tomados en el telescopio Subaru con aproximadamente una hora entre cada imagen. Las estrellas y galaxias de fondo no se mueven, mientras que la luna de Saturno recién descubierta, resaltada con una barra naranja, muestra movimiento entre las dos imágenes. Las fotografías son cortesía de Scott Sheppard.

"Estudiar las órbitas de estas lunas puede revelar sus orígenes, así como información sobre las condiciones que rodean a Saturno en el momento de su formación", explicó Sheppard.

Las lunas exteriores de Saturno parecen estar agrupadas en tres grupos diferentes en términos de las inclinaciones de los ángulos en los que orbitan alrededor del planeta. Dos de las lunas programadas recientemente descubiertas encajan en un grupo de lunas exteriores con inclinaciones de aproximadamente 46 grados llamadas grupo Inuit, ya que llevan el nombre de la mitología inuit. Estas lunas pudieron haber compuesto una vez una luna más grande que se rompió en el pasado distante. Del mismo modo, las lunas retrógradas recientemente anunciadas tienen inclinaciones similares a otras lunas de Saturno retrógradas previamente conocidas, lo que indica que también son fragmentos de una luna madre una vez más grande que se rompió. Estas lunas retrógradas están en el grupo nórdico, con nombres que provienen de la mitología nórdica. Una de las lunas retrógradas recientemente descubiertas es la luna más lejana conocida alrededor de Saturno.

"Este tipo de agrupación de lunas exteriores también se observa alrededor de Júpiter, lo que indica que se produjeron colisiones violentas entre lunas en el sistema de Saturno o con objetos externos como asteroides o cometas", explicó Sheppard.

La otra luna programada recientemente descubierta tiene una inclinación cercana a los 36 grados, que es similar a la otra agrupación conocida de lunas programadas internas alrededor de Saturno llamada grupo galo. Pero esta luna nueva orbita mucho más lejos de Saturno que cualquiera de las otras lunas programadas, lo que indica que podría haber sido arrastrada hacia afuera con el tiempo o podría no estar asociada con la agrupación más interna de lunas programadas.

Si hubiera una cantidad significativa de gas o polvo cuando una luna más grande se separó y creó estos grupos de fragmentos de luna más pequeños, habría habido fuertes interacciones de fricción entre las lunas más pequeñas y el gas y el polvo, lo que causó que entraran en espiral en el planeta.

“En la juventud del Sistema Solar, el Sol estaba rodeado por un disco giratorio de gas y polvo del que nacieron los planetas. Se cree que un disco similar de gas y polvo rodeó a Saturno durante su formación ”, dijo Sheppard. "El hecho de que estas lunas recién descubiertas pudieran continuar orbitando Saturno después de que sus lunas parentales se separaron indica que estas colisiones ocurrieron después de que el proceso de formación del planeta se había completado en su mayor parte y los discos ya no eran un factor".


Concepción artística de las 20 lunas recién descubiertas que orbitan alrededor de Saturno. Estos descubrimientos llevan el recuento total de luna del planeta a 82, superando a Júpiter en la mayor parte de nuestro Sistema Solar. Estudiar estas lunas puede revelar información sobre su formación y sobre las condiciones alrededor de Saturno en ese momento. La ilustración es cortesía de la Carnegie Institution for Science. (La imagen de Saturno es cortesía de NASA / JPL-Caltech / Space Science Institute. Fondo estrellado cortesía de Paolo Sartorio / Shutterstock.)

El descubrimiento se realizó utilizando el telescopio Subaru, el cual se ubica en la cima del Mauna Kea en Hawái. El equipo de astrónomos que participó en el descubrimiento está compuesto por Scott S. Sheppard, David Jewitt y Jan Kleyna. El año pasado, Sheppard formó parte del equipo que descubrió 20 nuevas lunas alrededor de Júpiter.
Los astrónomos esperan que estas lunas recién descubiertas puedan aportar información valiosa sobre su origen y sobre las condiciones que había alrededor de Saturno durante su formación, cuando el Sistema Solar era muy joven.

Fuente: https://carnegiescience.edu/, El Universo Hoy

4 de septiembre de 2019

NASA Confirma la Misión Europa Clipper a la Luna Helada de Júpiter

Concepto artístico de la misión Europa Clipper. Crédito de la imagen: NASA/JPL-Caltech

Un mundo oceánico helado en nuestro sistema solar que podría decirnos más sobre el potencial de vida en otros mundos se está enfocando con la confirmación de la próxima fase de la misión Europa Clipper. La decisión permite que la misión avance hasta la finalización del diseño final, seguida de la construcción y prueba de toda la nave espacial y la carga útil científica.

"Estamos todos entusiasmados con la decisión que lleva a la misión Europa Clipper un paso clave más cerca de desbloquear los misterios de este mundo oceánico", dijo Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas en la sede de la NASA en Washington. "Estamos construyendo sobre los conocimientos científicos recibidos de las naves espaciales insignia Galileo y Cassini, trabajando para avanzar en nuestra comprensión de nuestro origen cósmico, e incluso la vida en otros lugares".

La misión llevará a cabo una exploración en profundidad de la luna Europa de Júpiter e investigará si la luna helada podría albergar condiciones adecuadas para la vida, perfeccionando nuestros conocimientos sobre la astrobiología. Para desarrollar esta misión de la manera más rentable, la NASA apunta a tener la nave espacial Europa Clipper completa y lista para su lanzamiento a partir de 2023. Sin embargo, el compromiso de referencia de la agencia respalda una fecha de preparación para el lanzamiento en 2025.

20 de agosto de 2019

Espectacular Imagen de Júpiter Captada por el Hubble

Créditos de la imagen: NASA, ESA, A. Simon (GSFC) y M.H. Wong (Universidad de California, Berkeley)
Esta nueva y espectacular imagen captada por el Telescopio Espacial Hubble de Júpiter el 27 de Junio de 2019, muestra la Gran Mancha Roja del planeta gigante, y una paleta de colores más intensa en las nubes que se arremolinan en la turbulenta atmósfera de Júpiter que se vio en años anteriores. Los colores y sus cambios proporcionan pistas importantes para los procesos en curso en la atmósfera de Júpiter.

Las bandas se crean por diferencias en el grosor y la altura de las nubes de hielo de amoníaco. Las coloridas bandas, que fluyen en direcciones opuestas en varias latitudes, son el resultado de diferentes presiones atmosféricas. Las bandas más claras se elevan más alto y tienen nubes más gruesas que las bandas más oscuras.

Entre las características más llamativas de la imagen están los colores intensos de las nubes que se mueven hacia la Gran Mancha Roja, una tormenta que rueda en sentido contrario a las aguijas del reloj entre dos bandas de nubes. Estas dos bandas de nubes, arriba y abajo de la Gran Mancha Roja, se mueven en direcciones opuestas. La banda roja arriba y a la derecha (noreste) de la Gran Mancha Roja contiene nubes que se mueven hacia el oeste y alrededor del norte de la tempestad gigante. Las nubes blancas a la izquierda (suroeste) de la tormenta se mueven hacia el este, al sur del lugar.

Todas las coloridas bandas de nubes de Júpiter en esta imagen están confinadas al norte y al sur por corrientes en chorro que permanecen constantes, incluso cuando las bandas cambian de color. Todas las bandas están separadas por vientos que pueden alcanzar velocidades de hasta 644 kilómetros por hora.

En el lado opuesto del planeta, la banda de color rojo intenso al noreste de la Gran Mancha Roja y la banda blanca brillante al sureste se vuelven mucho más débiles. Los filamentos remolinos que se ven alrededor del borde exterior de la súper tormenta roja son nubes de gran altitud que están siendo arrastradas hacia adentro y alrededor.

La Gran Mancha Roja es una estructura imponente con forma de pastel de bodas, cuya capa superior de bruma se extiende más de 5 kilómetros más alta que las nubes en otras áreas. La gigantesca estructura, con un diámetro un poco más grande que el de la Tierra, es un sistema de viento de alta presión llamado anticiclón que se ha ido reduciendo lentamente desde el siglo XIX. La razón de este cambio de tamaño aún se desconoce.

Una característica en forma de gusano ubicada debajo de la Gran Mancha Roja es un ciclón, un vórtice alrededor de un área de baja presión con vientos que giran en la dirección opuesta a la Mancha Roja. Los investigadores han observado ciclones con una amplia variedad de apariencias diferentes en todo el planeta. Las dos características de forma ovalada blanca son anticiclones, como versiones pequeñas de la Gran Mancha Roja.

Otro detalle interesante es el color de la banda ancha en el ecuador. El color naranja brillante puede ser una señal de que las nubes más profundas comienzan a despejarse, enfatizando las partículas rojas en la neblina suprayacente.

La nueva imagen se tomó en luz visible como parte del programa OPAL. El programa proporciona vistas globales anuales del Hubble de los planetas exteriores para buscar cambios en sus tormentas, vientos y nubes.

La Cámara de Campo Ancho 3 del Hubble observó a Júpiter cuando el planeta estaba a 400 millones de millas de la Tierra, cuando Júpiter estaba cerca de la "oposición" o casi directamente enfrente del Sol en el cielo.

9 de agosto de 2019

Un meteoro acaba de explotar en Júpiter, y un astrofotógrafo lo captó en video.

Un observador de estrellas consiguió el disparo de su vida el Miércoles después de capturar imágenes extremadamente raras de un misterioso destello de luz sobre Júpiter, que pudo haber sido una elusiva explosión de meteorito.

El astrofotógrafo de Texas Ethan Chappel capturó la increíble vista el 7 de Agosto de 2019, a las 4:07 UTC, mientras filmaba el planeta y dijo que el evento en el Cinturón Ecuatorial del Sur (South Ecuatorial Bands, SEBs) de Júpiter «se ve terriblemente como un destello de impacto». Se puede ver un punto brillante que aparece de la nada antes de que se desvanezca rápidamente.


«¡Después de ver el video y ver el flash, mi mente comenzó a correr! Sentí urgentemente la necesidad de compartirlo con personas que encontrarían útiles los resultados», dijo Chappel a ScienceAlert. El astrónomo Jonti Horner dijo que «nunca había visto algo así antes», y describió el destello como «simplemente totalmente impresionante». «Muchas veces estas cosas pasarán desapercibidas y sin ser observadas» , explicó. «La mitad de ellos sucederá en el otro lado del planeta. Así que hay muchas cosas que funcionan en contra de ver estos eventos».
La explosión parece ser de un bólido, un meteorito que explota al entrar en la atmósfera. Son bastante comunes en la Tierra, que es un planeta más pequeño y menos gravitacionalmente intenso que Júpiter. Júpiter también está rodeado de objetos como cometas y asteroides que pueden ser absorbidos por su gravedad. Un estudio de 1998 encontró que la tasa de grandes impactos en Júpiter es entre 2,000 y 8,000 veces la tasa de impactos en la Tierra. Sin embargo, la captura con cámara de los impactos es rara. Uno fue capturado en 2009 y nuevamente en 2010.

Pequeños impactos de asteroides en la atmósfera de la Tierra durante un período de 20 años.
Crédito: NASA / Ciencia Planetaria .


El impacto puede haber dejado una cicatriz que podría ser detectada por la sonda Juno de Júpiter u otros instrumentos.

El cometa Shoemaker-Levy 9 en 1994, se rompió debido a las fuerzas de marea de Júpiter y produjo una serie de impactos. En realidad, estaban en el lado más alejado del planeta, pero el telescopio de 2.2 metros en Hawai fotografió las firmas de calor de estos sitios de impacto mientras orbitaban a la vista, y Hubble capturó las manchas oscuras que quedaron en las nubes , conocidas como una cicatriz.

Otros impactos fueron capturados en 2009, en 2010, en 2012 y 2017. Pero a pesar de su frecuencia estimada, verlos en el momento es muy raro.



«Es un evento muy fugaz, son unos segundos», dijo Horner a ScienceAlert.

«No sería tan obvio, si estuvieras mirando a través del ocular del telescopio. Muchas veces estas cosas pasarán desapercibidas y sin ser observadas. La mitad de ellas sucederá en el otro lado del planeta. Así que hay muchas cosas que funcionan en contra de ver estos eventos «.

El hecho de que tengamos un video del evento en tiempo real y que podamos verlo brillar y desvanecerse claramente es la parte más emocionante, dijo. Significa que podemos comparar el impacto con otros bólidos, como el meteorito de Chelyabinsk de 2013 , para ver cómo varía el tiempo que tardó cada evento en iluminarse y desvanecerse.

«Creo que estaba mirando hacia el cielo en busca de meteoros de las Perseidas cuando sucedió, por lo que no vi el flash mientras grabé», dijo Chappel a ScienceAlert.

«Solo lo noté después gracias a un gran software llamado DeTeCt de Marc Delcroix, que está diseñado específicamente para encontrar estos flashes».

También es posible que el impacto haya dejado una cicatriz que puede ser estudiada por otros instrumentos, por ejemplo, la sonda Júpiter de Juno. Los primeros informes sugieren que el impacto fue demasiado pequeño para producir una cicatriz, pero podemos tener suerte.

Todavía no sabemos qué tan grande era el objeto, pero tendría que ser relativamente grande para producir un evento visible desde la Tierra.

Si quieres probar tu propia suerte con la fotografía de Júpiter, Chappel ha proporcionado amablemente una lista de su equipo en Twitter . También promete una imagen limpia, así que esté atento a su feed de Twitter.

Qué logro tan fantástico. No podemos esperar para ver la ciencia que surge de ello.
Fuente: Science Alert.

Artículo original: «A Meteor Just Exploded On Jupiter, And A Photographer Actually Caught It On Video«. Michelle Starr. Aug. 8, 2019.

Material relacionado:

Sobre la tasa de impactos en Júpiter:

Asteroids Smack Jupiter More Often Than Astronomers Thought. David Dickinson. Universe Today. April 16, 2018.

Otros impactos en Júpiter:

New Impact Flash Seen on Jupiter.Bob King. Sky & Telescope. May 28, 2017 .

Flash de luz en Júpiter captado por aficionados. Fue un nuevo impacto en Júpiter? Carlos Costa. Asociación de Aficionados a la Astronomía de Uruguay. Abril 4, 2016.

Updated Images: Jupiter Swallows an Asteroid – or a Comet? SOTT. Sept. 12, 2012.


2010 Jupiter impact event. Wikipedia.

What hit Jupiter. NASA Science. Aug. 3, 2009.

Sobre el Impacto del Cometa Shemaker – Levy 9:

Los impactos del cometa SL9 son de importancia histórica. Esta fue la primera vez en la historia humana en la que se predijo un impacto importante en un cuerpo planetario antes del evento. SL9 es el primer cometa que se ha detectado orbitando el planeta Júpiter. También es el primer cometa que se ha observado que se divide en más de unos pocos fragmentos individuales.

Durante el período de 1 semana del 16 al 22 de julio de 1994, más de 20 fragmentos del cometa P / Shoemaker-Levy 9 (SL9) se estrellaron contra el planeta Júpiter a velocidades de aproximadamente 60 km s −1 . Estos impactos produjeron una variedad de efectos.

Se espera que se produzcan impactos cometarios significativos en Júpiter aproximadamente una vez cada mil años más o menos, por lo que el evento se describió como » el evento astronómico del siglo «.
Comet Shoemaker-Levy 9 collision with Jupiter.
Shoemaker-Leevy 9: Comet’s impact left its mark on Jupiter.
Jovian Armagedon + 20.
Jupiter Swallows Comet Shoemaker Levy 9.
Comet’s collision with Jupiter; still detectible 19 years later.

Sobre el impacto en Júpiter del cometa Shoemaker – Levy 9 y el surgimiento del concepto de Defensa Planetaria:

How Historic Jupiter Comet Impact Led to Planetary Defense. Karl Hille. NASA Headquarters. June 30, 2019. Last updated: July 8, 2019.

Videos:
Cosmic collision: The impact of comet Shoemaker-Levy 9 with Jupiter destroyer of comets.
On Jupiter-Destroyer of Comets.
Collision: Comet Shoemaker-Levy 9.

Curiosidades:

Sobre el rol de Júpiter como escudo protector de la Tierra.

No sólo no es cierto el concepto de » Júpiter como escudo «, lo que implica que el planeta protege a la Tierra de los impactos de cometas, sino todo lo contrario, tal vez el papel más importante de Júpiter en la promoción del desarrollo de la vida en la Tierra fue – la entrega de los materiales volátiles necesarios para que la vida apareciese, desde el Sistema Solar Exterior:

Nuevo estudio cuestiona el rol de Júpiter como escudo protector de la Tierra contra los impactos de Cometas. Carlos Costa. Asociación de Aficionados a la Astronomía de Uruguay. Feb. 5, 2016.

Cabe preguntar qué sucede en los sistemas exoplanetarios con los Júpiters calientes y los planetas que los acompañan, ¿sucederá los mismo?; aquí tienes la respuesta:

Hot Jupiters Are Very Bad Neighbors.Jaime Green | Astrobites, Mar 4, 2015.

Hot Jupiters prefer long distance relationships. Leonardo dos Santos. Astrobites. July 5, 2016.

GIANT PLANETS: GOOD NEIGHBORS FOR HABITABLE WORLDS? Nikolaos Georgakarakos et al. April 9, 2018.

Fuentes: Asociación de Aficionados a la Astronomía Uruguay