17 de febrero de 2015

Rosetta capta al detalle las formas del cometa 67P en su máximo acercamiento

Montaje de cuatro imágenes del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko tomadas a las 11.15 horas del sábado.ESA/Rosetta/NAVCAM
  • Las imágenes tienen el mayor contraste visto hasta ahora
  • Rosetta estuvo a 6 kilómetros de la superficie del cometa
  • La sonda de la ESA ahora se alejará para evitar posibles impactos
El sábado 14, la sonda Rosetta hizo su máximo acercamiento al cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko. Fue a las 13.41 hora peninsular española, y a lo largo del trayecto en el que se situó a 6 kilómetros de su superficie captó varias series de imágenes con gran detalle.

Las instantáneas, captadas con la cámara NAVCAM, han sido facilitadas este lunes por la Agencia Espacial Europea, que ha creado mosaicos en los que se observa la región del cometa conocida como Imhotep.

La superficie del cometa tiene partes lisas y rugosas, de polvo y rocas. ESA/Rosetta/NavCam

Las imágenes más cercanas ofrecen detalles de la superficie de 67P con el mayor contraste visto hasta ahora, ya que la sonda se situó en el punto al que llegaba la luz directa del sol, por lo que los instrumentos de la sonda pudieron captar imágenes sin demasiadas sombras.

Además de poder captar instantáneas en primer plano de la superficie del cometa de alta resolución, este sobrevuelo ha permitido a los instrumentos de Rosetta analizar las partes más internas de la atmósfera del 67P para entender mejor la relación entre la fuente de la actividad observada y la coma de forma más amplia.

Desde el acercamiento, Rosetta ha empezado a alejarse del cometa y está previsto que se sitúe a 255 kilómetros del centro del cuerpo celeste.

El objetivo es alejarse para evitar el posible impacto de piedras que se desprendan del cometa. Y es que el 67P, formado por hielo y rocas, se irá descomponiendo a medida que reciba el calor solar.


Fuentes: Rtve.es

Observan una protuberancia en Marte que alcanzó hasta 250 kilómetros de altura

El penacho marciano en rotación en el terminador día-noche Wayne Jaeschke
  • Es el penacho más alto observado hasta ahora en la superficie del planeta
  • En Marte se forman nubes de cristalitos de hielo y dióxido de carbono
  • Barajan si el penacho es una inusual nube o una emisión luminosa
En marzo de 2012, astrónomos aficionados tomaron desde diferentes rincones del mundo imágenes de una protuberancia que emergía al amanecer en el borde del disco de Marte y que llegó a alcanzar más de 200 kilómetros desde su superficie.

El penacho, cuyo estudio publica la revista Nature, se pudo ver durante unos diez días. Los investigadores del Grupo de Ciencias Planetarias de la UPV/EHU, con el conocimiento actual de la alta atmósfera de Marte, no han podido explicar el fenómeno, que podría suponer un riesgo para futuras misiones en órbita baja en Marte, informa la UPV.

Nubes de hielo y CO2

En la tenue, fría y seca atmósfera de Marte, los vientos arrastran y elevan el polvo desde la superficie hasta los 50 kilómetros de altura.

En su seno se forman delgadas nubes de cristalitos de hielo y dióxido de carbono, el principal componente de la atmósfera marciana, que en ocasiones alcanzan, como máximo, alturas de unos 100 kilómetros.

Las naves espaciales que orbitan a Marte han tomado imágenes tanto del polvo en suspensión como de las nubes altas sobre el limbo o borde del planeta, proyectadas en el fondo negro del cielo.

Penacho extraordinario en 2012

En marzo y abril de 2012 astrónomos aficionados aprovecharon la aproximación de Marte a la Tierra para tomar imágenes detalladas del planeta.

La sorpresa surgió cuando en el borde del disco, emergiendo en el limbo durante el amanecer marciano, detectaron la presencia de un alto penacho.

La protuberancia fue observada rotando con el planeta sobre el limbo durante unos diez días de marzo, confirmando inequívocamente su presencia. Curiosamente, tras unas jornadas sin ser detectado, se pudo volver a observar varios días en abril.

Medición de la protuberancia

Analizando una selección de las mejores imágenes, el equipo de la Universidad del País Vasco y sus colaboradores han medido este penacho que apareció en la región marciana de Terra Cimmeria, en las latitudes medias del hemisferio Sur, y han desarrollado un modelo geométrico para explicar su visibilidad.

Los investigadores han comprobado que el penacho, de unos 500 kilómetros de extensión horizontal, alcanzó los días 20 y 21 de marzo una altura excepcional, de entre 200 y 250 kilómetros sobre la superficie de Marte.

Nunca antes se había observado un fenómeno que alcanzara tal altura en el planeta. El equipo investigador también pudo determinar su brillo en diferentes longitudes de onda.

Paralelamente, buscando en el archivo de imágenes tomadas por el telescopio espacial Hubble, encontraron imágenes de mayo de 1997 en las que se observa la presencia de un penacho semejante al estudiado en latitudes ecuatoriales.

En este caso, no pudieron determinar su altura con precisión, pero sí medir con más detalle su reflectividad, lo cual les ha servido para indagar en la naturaleza del fenómeno.
Naturaleza de la protuberancia

Con estos datos, los investigadores han "explorado dos posibles escenarios para interpretar el fenómeno: podría tratarse bien de una nube, bien de una emisión auroral”, indica el profesor Agustín Sánchez-Lavega.

Es decir, podría, por un lado, tratarse de una inusual nube, que, de acuerdo con su brillo, estaría formada por cristalitos de 0,1 micras de tamaño (una diezmilésima de milímetro).

Sin embargo, para que se pudieran formar cristalitos de agua a 200 kilómetros de altura la temperatura debería caer más de 50 grados (100 grados si fueran de dióxido de carbono) respecto a lo que predicen los modelos actuales de Marte.

Otra posibilidad sería que el penacho fuera producido por una emisión luminosa, tipo aurora, ya que en la región de Cimmeria existe una intensa anomalía magnética que podría canalizar las partículas cargadas provenientes del exterior y excitar la emisión.

Sin embargo, esto implicaría una emisión unas 1.000 veces más potente que la de las auroras terrestres, lo que es inviable. “Ambas hipótesis, aun siendo las más plausibles, parecen imposibles por cuanto desafían nuestro conocimiento actual de la atmósfera marciana”, indica Sánchez-Lavega.

Dado el riesgo que la presencia de estos impredecibles altos penachos podría entrañar en futuras misiones en baja órbita o en entrada al planeta, se proseguirá su búsqueda y estudio con observaciones desde Tierra y desde las naves en órbita.


Fuentes: Rtve.es

15 de febrero de 2015

El planeta enano Haumea brilla con hielo cristalino

El quinto planeta enano del sistema solar, Haumea, y al menos uno de sus dos satélites, mantienen agua helada cristalina gracias a las fuerzas mareales entre ellos y al calor de elementos radiactivos. Así lo refleja un estudio internacional, con participación española, realizado con las observaciones del telescopio VLT del Observatorio Europeo Austral en Chile.


Fuentes: SINC

Las estrellas ayudan a rastrear basura espacial

Un equipo de investigadores del Real Instituto y Observatorio de la Armada (ROA), en Cádiz, ha desarrollado un método para seguir el movimiento de objetos geoestacionarios basándose en la posición de las estrellas, lo que puede ayudar a monitorizar la basura espacial. La técnica se puede aplicar con pequeños telescopios y desde lugares poco oscuros.


Fuentes: SINC

P/2012 F5, un asteroide con cola

Los asteroides, a diferencia de los cometas, no se caracterizan por exhibir una cola, pero existen una decena de excepciones. Investigadores españoles han observado a uno de estos raros asteroides desde el Gran Telescopio Canarias y han descubierto que algo le pasó sobre el 1 de julio de 2011 para que le apareciera su ‘apéndice’. Quizá una ruptura interna o la colisión con otro asteroide.

Fuentes: SINC

La escafandra estratonáutica fue el predecesor de los actuales trajes espaciales

La escafandra que diseñó el granadino Emilio Herrera en 1935 se considera el prototipo de los trajes espaciales. Contaba con tres capas, una de lana, una de caucho y una tercera de lona muy resistente. La zona de las articulaciones estaba diseñada como un acordeón reforzado con cables y tirantes de acero para dar libertad de movimiento al piloto. Una capa de aluminio pulimentado y una tela de plata recubrían en el casco cilíndrico y el traje para reflejar los rayos solares y evitar el recalentamiento.

Fuentes: SINC

Evidencias de placas tectónicas ‘sumergidas’ en la luna Europa


Los científicos ya habían observado regiones donde se expande la corteza helada de Europa, una de las lunas de Júpiter. Ahora investigadores de las universidades de Idaho y Johns Hopkins (EE UU) han detectado por primera vez zonas de subducción, es decir, áreas donde la vieja corteza se adentra hacia abajo para destruirse y dejar hueco a la nueva. Se trata de los primeros signos de tectónica de placas fuera de la Tierra, donde esta teoría explica los movimientos de los bloques sobre su superficie y la dinámica de montañas, volcanes y terremotos.

En la imagen se ilustra cómo se supone ocurre el proceso de subducción, donde una placa externa de hielo, de entre 20 y 30 kilómetros de espesor, se adentra en la corteza interior más caliente hasta diluirse. En la placa superior se producen bandas plegadas y emergen ‘criolavas’ por procesos de erupción. Las fotografías reales que han servido de base para estos análisis fueron tomadas a comienzos de la década de los 2000 por el satélite Galileo de la NASA.

“Si tiene un sistema global de tectónica de placas, Europa puede ser más parecida a la Tierra de lo que imaginamos", dice Simon Kattenhorn, uno de los autores, que subraya: "Este descubrimiento no solo la convierte en uno de los cuerpos geológicamente más interesantes del sistema solar, sino que también implica una comunicación bidireccional entre su exterior y el interior, una forma de mover material desde la superficie al océano (interno), un proceso con importantes implicaciones en el potencial de Europa como un posible mundo habitable”.

Fuentes: SINC

Así será el primer aterrizaje de la historia en un cometa


La misión Rosetta, una sonda que ha concluido un viaje de diez años por el sistema solar hasta llegar al cometa en el que tiene previsto aterrizar el próximo noviembre, ha fijado el punto del astro 67/P Churyumov-Gerasimenko donde espera posarse, informó este martes la Agencia Espacial Europea (ESA).

El lugar elegido, al que los científicos denominan lugar o punto J y que ocupa una superficie de un kilómetro cuadrado, se encuentra en la cabeza del cometa, solo a cuatro kilómetros de su extremo exterior, y se ha revelado como el más idóneo de los cinco que habían preseleccionado los expertos, aunque no es absolutamente perfecto.

"Ninguno de los sitios candidatos cumple con el cien por cien de los criterios operacionales, pero el punto J es claramente la mejor solución", señaló en una conferencia de prensa en París el responsable de la delicada maniobra de aterrizaje, Stephan Ulamec.

La selección ha tenido en cuenta criterios como la iluminación del Sol, el relieve del terreno, la temperatura del cometa, la presión y de la densidad del gas que rodea su núcleo o su velocidad de rotación.

Fuentes: SINC

El agua del cometa que sigue Rosetta es distinta a la de la Tierra



El origen del agua en nuestro planeta es objeto de debate continuo entre los científicos. Una de las posibilidades, y así lo apuntaban estudios previos, es que procediera de los cometas, pero los datos de la sonda Rosetta señalan que no es así, al menos en el caso del cometa 67P al que persigue. Su agua en forma de vapor es distinta a la de la Tierra, según un artículo que aparece esta semana en Science.

El espectrómetro de masas ROSINA de la nave ha confirmado que la proporción entre el deuterio (D, isótopo del hidrógeno con un neutrón) y el hidrógeno (H) del agua de ese cometa es tres veces mayor que la de los océanos terrestres. Ese ratio D/H es un indicador para comparar el agua de distintos cuerpos del sistema solar, y parece que la de los asteroides es mucho más parecida a la terrestre, por lo que estos objetos son mejores candidatos para haber traído este elemento esencial para la vida a nuestro planeta.


Fuentes: SINC

El enigma del ‘Supersaturno’

Astrónomos del Observatorio de Leiden (Países Bajos) y la Universidad de Rochester (Estados Unidos) han descubierto recientemente un sistema de anillos cercano a una estrella similar al Sol, conocida como 'J1407'. Estos objetos son mucho más grandes y más pesados que el sistema de anillos de Saturno y son los primeros de su tipo que se encuentran fuera del Sistema Solar. En esta infografía revelamos algunos de sus misterios.

Fuentes: SINC

¿Quieres medir la velocidad de la luz observando una luna de Júpiter?

Observaciones del proyecto Rømer realizadas esta semana desde el Observatorio del Teide. / Daniel López / IAC.

Si tienes un telescopio y no te importa trasnochar puedes participar en un proyecto del Instituto de Astrofísica de Canarias para calcular la velocidad de la luz siguiendo los movimientos de Io, uno de los satélites de Júpiter. El proyecto se llama Rømer, en honor al astrónomo danés que en 1676 determinó por primera vez esta constante universal con la misma técnica.

Uno de los aspectos más sorprendentes de la luz es su velocidad, sólo superada por nuestra imaginación. Con esta idea, y en el marco del Año Internacional de la Luz 2015, el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) y el Museo de la Ciencia y el Cosmos (MCC) han puesto en marcha el Proyecto Rømer para que cualquier persona equipada con un telescopio pueda ayudar a medir la famosa constante universal 'c' (299.792.458 m/s).

“El método –explica Alfred Rosenberg, astrofísico y responsable del proyecto por parte del IAC– es sencillo. Consiste en medir el cambio aparente en el período de rotación de Io, uno de los satélites de Júpiter, dependiendo de nuestra distancia a él. Este satélite se comporta como una manecilla de reloj, girando alrededor de Júpiter cada 42,5 horas, aproximadamente”.
Io se comporta como una manecilla de reloj, girando alrededor de Júpiter cada 42,5 horas


Un observador en la Tierra verá que cuando Io, en su órbita, se introduce en la sombra de Júpiter deja de ser visible para luego volver a aparecer. Pero a la vez, la Tierra se mueve en su órbita alrededor del Sol, por lo que estas ocultaciones y apariciones se observarán con una diferencia de hasta 2 Unidades Astronómicas (unos 300.000.000 km), es decir, dos veces la distancia Sol-Tierra.

“Por tanto, conociendo la velocidad de la luz, sabemos que ocurrirán con una diferencia de unos 1.000 segundos entre la observación más cercana (oposición de Júpiter) y la más distante en nuestra órbita alrededor del Sol”, señala Rosenberg. “Y aA partir de esta curva (atraso y adelanto en la hora del tránsito) y conociendo la distancia Tierra-Io, se puede determinar la velocidad de la luz”.

Las personas que participen deberán registrarse inicialmente con algunos datos de interés (alias, diámetro del telescopio, aumentos utilizados…) y, posteriormente, enviar mediante otro formulario la hora exacta (preferentemente calculada con GPS) en que haya observado la reaparición del satélite.
Primeras horas de la noche y luego de madrugada
El período ideal del proyecto abarca desde el 6 de febrero (oposición de Júpiter) y durante seis meses y medio, aunque se podrá continuar durante el resto del año. “El problema –advierte Oswaldo González, astrofísico y responsable de Didáctica del Museo de la Ciencia y el Cosmos– será que Júpiter se observará desde primera hora de la noche durante estos primeros seis meses y luego sólo de madrugada”.

El proyecto cuenta con una página web con resultados, enlaces de interés, instrucciones para la observación, próximas reapariciones… Además del dato (hora de la observación), las personas que participen podrán enviar fotos, vídeos, etc., que formarán parte de una galería gráfica. Incluso se mantendrá un blog específico del proyecto.

“No se trata tanto de medir la velocidad de la luz ‘realmente’ –subraya Rosenberg–, sino de hacer sentir la emoción de observar y participar en un proyecto cuyo método, hace 339 años, llevó a Ole Rømer a determinar un valor inimaginable hasta entonces".

Este astrónomo danés, que da nombre al proyecto, determinó en 1676 por primera vez esta constante universal haciendo las mismas observaciones que ahora puede repetir cualquier astrónomo aficionado o profesional con su telescopio.

Zona geográfica: España
Fuente: IAC , SINC

Descubierto un sistema de cuatro soles en formación

Recreación de la formación de las cuatro estrellas en el sistema cuádruple analizado. / B. Saxton (NRAO/AUI/NSF)

Un equipo de investigadores de Suiza, Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Chile ha encontrado una nueva ruta para explicar el origen de los sistemas de pares de estrellas o estrellas binarias al explorar la región de formación estelar de Perseo. Aquí han detectado un sistema cuádruple que consta de una joven protoestrella y tres 'grumos' filamentosos de gas que formarán otras tantas estrellas en unos 40.000 años.

Más de la mitad de las estrellas se forman y evolucionan en el seno de sistemas binarios o múltiples, un número considerablemente más elevado en el caso de las estrellas muy jóvenes. Por ello, el estudio de estos sistemas es esencial para entender la evolución estelar. Sin embargo, la multiplicidad inicial de los sistemas estelares es muy incierta.

Se han propuesto varios mecanismos para explicar el origen de los sistemas estelares binarios y múltiples, como la fragmentación del núcleo, la fragmentación del disco o la captura estelar. Un trabajo que se publica hoy en la revistaNature a cargo de investigadores de Suiza, Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Chile propone que la formación de pares de estrellas o estrellas binarias también puede ocurrir por la fragmentación de filamentos.
El estudio permite avanzar en la comprensión de la evolución estelar

Según explica el investigador que encabeza el trabajo, Jaime Pineda, de origen chileno y actualmente miembro del el Instituto Max Planck de Física Extraterrestre, esta ruta de formación “no había sido sugerida anteriormente y, por lo tanto, nos abre otra vía para crear estos sistemas jóvenes”.
Las nuevas observaciones realizadas por Pineda y sus colegas muestran cómo las múltiples estrellas nacen y crecen juntas. Al explorar la región de formación estelar de Perseo, los autores detectaron un sistema cuádruple en el principio de su formación.

El sistema consta de una joven protoestrella y tres 'grumos' de gas que formarán cada uno una estrella, en un tiempo aproximado de 40.000 años. Estas condensaciones son el resultado de la fragmentación de los filamentos de gas denso, según los autores.

Para llegar a estos resultados, los investigadores han utilizado observaciones de Very Large Array (VLA), un sistema de radio telescopios que permite hacer observaciones a alta resolución de gas denso y frío, en este caso, de amoniaco (NH3).
El Very Large Array ha observado a alta resolución los filamentos de gas denso y frío


“Gracias a estas observaciones hemos podido determinar las propiedades en esta región”, apunta Pineda, quien detalla que emplean el amoniaco para poder estudiar el gas frío y denso “porque éste existe solo en las regiones más frías y densas donde las estrellas se forman”.

En este artículo participan también investigadores del Instituto Federal de Tecnología de Zúrich (Suiza), la Universidad de Yale (Estados Unidos), la Universidad de Massachusetts (Estados Unidos), la Universidad de Liverpool John Moores (Reino Unido), el Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian (Estados Unidos), el Instituto Max Planck de Física Extraterrestre (Alemania), la Universidad de Manchester (Reino Unido), el Observatorio Jodrell Bank (Reno Unido), el Observatorio ALMA (Chile) y el National Radio Astronomy Observatory (NRAO) de Estados Unidos.


Referencia bibliográfica:

Pineda, J. E., Offner, S. S. R., Parker, R. J., Arce, H. G., Goodman, A. A., Caselli, P., Fuller, G. A., Bourke, T. L. y Corder, S. A. (2015), “The formation of a quadruple star system with wide separation”. Nature, 518, 213-215. doi:10.1038/nature14166
Zona geográfica: Latinoamérica
Fuente: DiCYT, SINC

El agujero negro de «Interstellar», realidad científica

WARNER BROS
El agujero negro de «Interstellar»

El equipo de efectos visuales fue tan preciso y realista que ha explicado a los científicos cómo realizó las imágenes

El equipo responsable de los efectos visuales nominados al Oscar por la película «Interstellar», de Christopher Nolan, ha convertido la ciencia ficción en realidad científica, proporcionando nuevos conocimientos sobre los poderosos efectos de los agujeros negros.


En un artículo publicado en la revista Classical and Quantum Gravity, el equipo describe el innovador código informático que utilizó para generar las imágenes del agujero de gusano, el agujero negro y diversos objetos celestes que salen en la película, y explican cómo el código les ha llevado a nuevos descubrimientos científicos.

Utilizando este código, el equipo de «Interstellar», que comprende la compañía de efectos visuales con base en Londres Double Negative y al físico teórico de Caltech Kip Thorne, encontró que cuando una cámara se acerca a un agujero negro que gira rápidamente, superficies peculiares en el espacio, conocidas como cáusticas, crean más de una docena de imágenes de estrellas individuales y del plano sutil y brillante de la galaxia en la que vive el agujero negro. Descubrieron que las imágenes se concentran a lo largo de uno de los bordes de la sombra del agujero negro.

Estas múltiples imágenes son causadas por el agujero negro arrastrando espacio en un movimiento giratorio y estirando las cáusticas alrededor de sí mismas muchas veces. Es la primera vez que los efectos de sustancias cáusticas se han calculado para una cámara cerca de un agujero negro, y las imágenes resultantes dan una idea de lo que una persona podría ver si estuviese orbitando alrededor de un agujero.

El código computacional fue utilizado para crear las imágenes del agujero de gusano y del agujero negro, Gargantúa, y su brillante disco de acreción, con una suavidad y claridad sin precedentes. De esta forma, mostró porciones del disco de acreción, produciendo la imagen de una sombra de división que se ha convertido en un icono de la película.

Esta extraña distorsión del disco brillante fue causada por las lentes gravitacionales, un proceso por el cual los rayos de luz procedentes de diferentes partes del disco, o de las estrellas lejanas, son doblados y distorsionados por el agujero negro, antes de que lleguen a la cámara simulada de la película. Esta lente se debe a que el agujero negro crea un campo gravitatorio muy fuerte, literalmente doblando el tejido del espacio-tiempo alrededor de sí mismo.

«Para deshacerse del parpadeo y producir imágenes con realismo para la película, hemos cambiado nuestro código de una manera que nunca se ha hecho antes. En lugar de trazar las trayectorias de los rayos de luz individuales usando las ecuaciones de Einstein - una por píxel - hemos seguido los caminos y formas distorsionadas de haces de luz», explica Thorne. «Este nuevo enfoque para hacer imágenes será de gran valor para los astrofísicos como yo», subraya.

Los creadores de esta herramienta creen que puede ser fácilmente adaptada para la investigación científica.


Fuentes: ABC.es

Descubren un raro planeta «desafiante» con veranos de 1.000ºC


SABINE REFFERT
Ilustración de la órbita de Kepler-432b (interior, de color rojo) en comparación con la órbita de Mercurio alrededor del Sol (exterior, naranja). El punto rojo en el centro indica la posición de la estrella alrededor de la cual el planeta está orbitando. El tamaño de la estrella se muestra a escala, mientras que el tamaño del planeta se ha magnificado diez veces con fines ilustrativos

El masivo Kepler-432b tiene estaciones extremas y un destino fatal escrito en las estrellas

Quizás deje de echar de menos el soleado verano en este crudo invierno del hemisferio norte terrestre si le proponen un destino vacacional como el que ahora va a conocer. Se trata de un nuevo planeta, Kepler-432b, descubierto más allá del Sistema Solar por investigadores del Centro de Astronomía de la Universidad de Heidleberg (ZAH) y el Instituto Max Planck de Astronomía (MPIA) en la misma ciudad. Si pudiera llegar hasta allí, cosa imposible por ahora, se encontraría con un mundo muy raro, uno de los más densos y masivos que se conocen hasta el momento. Tiene aproximadamente el mismo tamaño de Júpiter, pero seis veces su masa. La forma y el tamaño de su órbita también son inusuales: se aleja y se acerca de forma extrema con respecto a su estrella, una gigante roja que, fatalmente, se lo tragará en menos de 200 millones de años. Durante su año, que dura 52 días terrestres, las temperaturas pasan de los 500ºC del invierno a los 1.000ºC del verano.

«La mayoría de los planetas conocidos en movimiento alrededor de estrellas gigantes tienen órbitas grandes y circulares. Con su órbita pequeña y muy alargada, Kepler-432b es un verdadero 'inconformista' entre los planetas de este tipo», dice Davide Gandolfi, del observatorio estatal Königstuhl, que forma parte del Centro de Astronomía, y uno de los descubridores del planeta. La estrella en torno a la cual orbita Kepler-432b ya ha agotado el combustible nuclear en su núcleo y se está ampliando progresivamente. Su radio ya es cuatro veces el de nuestro Sol y será aún mayor en el futuro.

La órbita trae a Kepler-432b increíblemente cerca de su estrella en algunos momentos y mucho más lejos en otros, creando así enormes diferencias de temperatura a lo largo del año del exoplaneta, lo que corresponde a 52 días terrestres. «Durante la temporada de invierno, la temperatura en Kepler-432b es de aproximadamente 500ºC. En la corta temporada de verano, puede aumentar a casi 1.000ºC», afirma Sabine Reffert, también del observatorio Königstuhl.

Desde Andalucía y Canarias

Kepler-432b fue identificado previamente como candidato a planeta por la misión Kepler de la NASA. Desde el punto de vista de la Tierra, el planeta pasa por delante de su estrella, oscureciendo periódicamente la luz estelar y delatando su existencia. Después, los investigadores alemanes utilizaron el telescopio de 2,2 metros en el Observatorio de Calar Alto, en Andalucía, y el Telescopio Óptico Nórdico, en La Palma, para recoger nuevos datos. De este modo, pudieron adquirir las mediciones de alta precisión necesarias para determinar la masa del planeta.

Sin embargo, «los días de Kepler-432b están contados», añade Mauricio Ortiz, estudiante de doctorado en la Universidad de Heidelberg, quien dirigió uno de los dos estudios del planeta. «En menos de 200 millones de años, Kepler-432b será tragado por su estrella anfitriona en continua expansión. Esta podría ser la razón por la cual no encontramos otros planetas como Kepler-432b, astronómicamente hablando, ya que sus vidas son extremadamente cortas».


Fuentes: ABC.es

Cronologia de la mision del vehiculo experimental de la ESA

Ilustración de la misión IXV

Cronología de los acontecimientos más críticos de la misión IXV. El avión experimental sin alas de la ESA está preparado para ser lanzado con un cohete Vega desde Kourou, en la Guayana francesa, el 11 de febrero de 2015.

El avión IXV (Intermediate eXperimental Vehicle) de la ESA será lanzado en el vuelo VV04 con un lanzador Vega a las 13:00 GMT (14:00 CET), para un vuelo suborbital con el objetivo de demostrar tecnologías y sistemas críticos para los futuros sistemas de reentrada automática de la ESA.

Después de la separación del lanzador Vega, a unos 340 km de altitud en el minuto 18 de vuelo, el IXV seguirá elevándose hasta unos 412 km. Después comenzará la reentrada, durante la que recogerán datos un gran número de sensores convencionales y avanzados.

La velocidad de entrada, 27 000 km/h (7.5 km/s), crea las mismas condiciones a las que se somete un vehículo que vuelve desde la órbita baja. El IXV navegará a través de la atmósfera, en su corredor de reentrada, antes de bajar ralentizado por un paracaídas que se despliega en varias fases hasta un amerizaje seguro, en el Océano Pacífico, unos 100 minutos tras el despegue.

Perfil de vuelo del IXV

El IXV volará de forma autónoma y será vigilado muy de cerca desde el Centro de Control de la Misión situado en el Centro de Ingeniería, Logística y Tecnología Avanzada (ALTEC) en Turín, en Italia. Dos estaciones de seguimiento en África y una antena en el barco de rescate Nos Aries recibirán la señal del vehículo.

Sigue la misión en directo el 11 de febrero desde las 12:30 GMT (13:30 CET) vía Arianespace TV y ESA TV.

IXV timeline

Los tiempos están definidos en relación al momento del despegue. Todas las horas pueden cambiar.

AOS: Adquisición de señal
BOT: Comienzo del seguimiento
MCC: Centro de Control de Misión de IXV en ALTEC, Turín
CSG: (Centro Espacial Guayanés), centro de control de Vega en Kourou
MAL: Estación de seguimiento en Malindi, Kenya
LIB: Estación de seguimiento en Libreville, Gabón
LOS: Pérdida de señal
TM: Telemetría
AVUM: Módulo Superior Attitude Vernier, etapa superior de Vega
HorarioActividades
–8h 15mInicio de la configuración del segmento de tierra del IXV, ensayos de subsistemas internos, activación de los enlaces de las estaciones de tierra. 
–7h 45mInicio de la cuenta atrás de Vega
–7h 30mInicio del flujo de datos de ensayos de IXV entre el MCC y las estaciones de tierra
–6h 30mInicio de la verificación de todo el segmento de tierra de IXV 
–6h 15mPrueba de voz CSG-MCC-nave
–4h 45mSimulación No 1 de Fin de Misión
–3h 30mInicio de la cuenta atrás de IXV 
–2h 40mRetirada de la grúa pórtico móvil (45 min)
–2h 00mRecepción de las medidas de viento a alta altitud desde la estación meteorológica  (lanzada a L–4h)
–1h 00mSegmento de tierra configurado para el lanzamiento 
–0h 34mSistema de lanzamiento a punto
–0h 10mInforme meteorológico final del lanzador
–0h 04mInicio de la secuencia automática de lanzamiento de Vega 
–0h 01mIXV: paso a modo lanzamiento 
H0 (14:00 CET)Despegue
+1m 52sSeparación de la primera etapa (P80)
+3m 35sSeparación de la segunda etapa (Zefiro-23)
+4m 02sEyección de la cofia (Vega está ya en el espacio)
+6m 37sSeparación de la tercera etapa (Zefiro-9)
+8m 00sPrimer encendido AVUM
+13m 49sApagado AVUM 
+16m 13sLibreville AOS Vega (lo antes posible)
+17m 59sSeparación; IXV en vuelo libre (lo antes posible; ventana hasta 21m 34s)
+18m 20sLibreville AOS IXV
Durante Libreville hasta después de Malindi LOSMCC recibe IXV TM; el estado de IXV permenentemente vigilado; ajuste de las coordenadas previstas para amerizaje
+20m 34sIXV:  Encedido, por reactores, del sistema de control de actitud 
Los tiempos indicados abajo son estimados, dependerán del desarrollo real del vuelo de IXV
+23m 30sMalindi AOS
+25m 35sLibreville LOS
+34m 12sMalindi LOS
+1h 20mBOT, antena de seguimiento del barco; el barco busca la señal de IXV tras el apagón producido por la reentrada
+1h 22mFinal del apagón de la reentada; se espera AOS de la antena del barco; inicio de la recepción de datos de TM y experimentales de la nave 
+1h 25mEyección del panel del paracaídas
+1h 29mEyección del paracaídas principal
+1h 31mPasivación de IXV 
+1h 42mAmerizaje (predicción)
+1h 42mTras el amerizaje: MCC resume el estdo de IXV, coordenadas reales de amerizaje.
 El barco emprende las operaciones de recuperación
Fuentes: ESA

Un capuchino en el polo sur de Marte






Cappuccino swirls at Mars’ south pole

Estos remolinos de color chocolate, caramelo y crema podrían despertar el apetito de los más golosos. Las mesetas en tonos crema rodeadas por crestas marrones y cruzadas por vetas de color caramelo crean una escena que recuerda a una buena taza de capuchino.

Esta instantánea fue tomada por la sonda Mars Express de la ESA, que lleva explorando y fotografiando la atmósfera y la superficie marcianas desde el año 2003. Cuando pensamos en Marte recordamos las numerosas imágenes que nos muestran un terreno pardo rojizo acribillado de cráteres, pero el Planeta Rojo nos puede sorprender con inesperadas tonalidades.

La región blanca y brillante es la capa de hielo que cubre el polo sur de Marte, compuesta de agua y dióxido de carbono congelados. Aunque pueda parecer una superficie uniforme en esta imagen, de cerca es una mezcla estratificada de picos, gargantas y planicies, y recuerda a un queso suizo.

El casquete austral de Marte tiene un diámetro de casi 350 kilómetros y alcanza un espesor de hasta 3 km en algunas zonas. Esta capa de hielo es permanente, y durante el invierno marciano queda cubierta por otra capa más fina y de mayor extensión que desaparece de nuevo cuando las temperaturas vuelven a subir.

Esta estructura se encuentra a unos 150 kilómetros al norte del polo sur geográfico de Marte, y Mars Express descubrió indicios que podrían explicar por qué esta capa de hielo está desplazada. Los profundos cráteres de impacto de Marte – entre los que destaca la Cuenca Hellas, la mayor estructura de impacto de todo el planeta, con 7 km de profundidad y 2.300 km de diámetro – canalizan los fuertes vientos del planeta hacia su polo sur, creando una mezcla de sistemas de alta y baja presión. El dióxido de carbono se sublima a un ritmo diferente en función de la presión atmosférica, dando una forma asimétrica a la capa de hielo.

Mars Express fotografió esta región el 17 de diciembre de 2012 en las bandas de la luz verde, azul e infrarroja utilizando su Cámara Estéreo de Alta Resolución. Esta fotografía fue procesada por Bill Dunford, utilizando los datos del Archivo de Ciencias Planetarias de la ESA.



Fuentes: ESA

EL PLANETARIO DE GUAYAQUIL - IV CURSO VACACIONAL "ASTRONOMÍA DIVERTIDA"


10 de febrero de 2015

Observan la fusión de dos estrellas que acabarán en una explosión de supernova

Parte central de la nebulosa planetaria Henize 2-428. ESO/L. Calçada
  • Son dos enanas blancas más pequeñas que el Sol
  • Las estrellas se acercarán y se fusionarán en 700 millones de años
  • Es la pareja más masiva de este tipo encontrada hasta ahora
Dos estrellas masivas han sido identificadas en el corazón de la nebulosa planetaria Henize 2-428, donde se espera, que dentro de unos 700 millones de años se fusionen y tengan suficiente materia como para iniciar una enorme explosión de supernova.

En la investigación, cuyos resultados se publican en la revista Nature, los astrónomos han utilizado las instalaciones del Observatorio Austral Europeo (ESO), junto con telescopios instalados en las Islas Canarias, según ha informado el ESO.

Así, han descubierto una pareja de estrellas enanas blancas -restos estelares muy pequeños y extremadamente densos- muy cercanas la una a la otra y con una masa total de aproximadamente 1,8 veces la masa del Sol.

Esta es la pareja más masiva de este tipo encontrada hasta ahora y cuando estas dos estrellas se fusionen en el futuro crearán una explosión termonuclear descontrolada que acabará como una supernova de tipo Ia.

Hallazgo por sorpresa

El equipo de astrónomos, liderado por M. Santander-García (Observatorio Astronómico Nacional, IGN; Instituto de Ciencia de Materiales (CSIC), ha encontrado esta masiva pareja cuando trataban de resolver un problema diferente.

Querían averiguar cómo algunas estrellas producen nebulosas asimétricas con extrañas formas en las últimas etapas de sus vidas. Uno de los objetos que estudiaban era la inusual nebulosa planetaria conocida como Henize 2-428.

"Cuando observamos la estrella central de este objeto con el Very Large Telescope de ESO, encontramos, no una, sino dos estrellas en el corazón de esta brillante nube extrañamente torcida", afirma el coautor Henri Boffin, de ESO.

Este hallazgo apoya la teoría de que la presencia de estrellas centrales dobles puede explicar las extrañas formas de algunas de estas nebulosas. Pero lo que descubrieron después era mucho más interesante.

"Posteriores observaciones llevadas a cabo con telescopios en las Islas Canarias nos permitieron determinar la órbita de ambas estrellas y deducir tanto sus masas como la distancia que las separa. Entonces fue cuando nos llevamos la mayor sorpresa", ha indicado Romano Corradi, otro de los autores del estudio e investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC, Tenerife).

Estrellas más ligeras que el Sol

Descubrieron que cada una de las estrellas tiene una masa ligeramente menor que la del Sol y que se orbitan mutuamente cada cuatro horas.

Están lo suficientemente cerca la una de la otra como para que, según la teoría de Einstein de la relatividad general, vayan acercándose cada vez más, creciendo en espiral debido a la emisión de ondas gravitacionales, antes de acabar fusionándose en una sola estrella en unos 700 millones de años.

La estrella resultante será tan masiva que nada podrá impedir que colapse sobre sí misma y, posteriormente, explote como una supernova.

"Hasta ahora, la formación de supernovas de tipo Ia por la fusión de dos enanas blancas era puramente teórica", explica David Jones, coautor del artículo que, en el momento en que se obtuvieron los datos, trabajaba como ESO Fellow. "¡Estas estrellas en Henize 2-428 son auténticas!", ha celebrado.

"Es un sistema sumamente enigmático", concluye Santander. "Tendrá repercusiones importantes para el estudio de supernovas de tipo Ia, que se utilizan para medir distancias astronómicas y fueron clave para descubrir que la expansión del universo se está acelerando debido a la energía oscura".


Fuentes: Rtve.es